Daniel P.O.V
Increible...hablo enserio, no podria estar haciendo algo mejor en este momentó que lavar platos en un restaurante.
-Es genial que incluso tengamos el mismo trabajo ¿no?-preguntó Alan con una sonrisa, todos lo miramos con cierta molestia.
-Todo es tu culpa mocoso, no se porque tuviste que aceptar lo que dijo Amy sobre buscar trabajo...-hable yo con fastidio.
-Llevamos casi diez horas aqui, estoy cansado-dijo James comenzando a desesperarse.
-Bueno...lo siento chicos pero Amy tenia un poco de razón, además esto no es tan malo...-dijo Max con una sonrisa nerviosa.
-Al menos nos hubieran dado otro trabajo, uno donde hayan bellas mujeres, pero no, en vez de eso estoy encerrado en un cuarto fregando platos con ustedes-dijo Cristian mientras se recostaba en el piso con fastidio.
-Oh vamos chicos, ¡animense! ¡esto debe ser divertido!-dijo Beck intentando darnos animos.
-Dime tarado...¿cómo un trabajo como este puede ser divertido?-pregunté con los brazos cruzados.
-¡Así, Dany!-gritó el y de la nada encendio una pequeña bocina...¿qué demonios?.
-¿De donde sacaste eso?-preguntó el cerebrito encarnando una ceja.
-¡Eso no importa! ¡a rockear se ha dicho!-al instante Beck se subio a una de las mesas y empezó a bailar como si estuviera en un maldito concierto.
-¡Beck!-grité llamandole la atención.
-¡Billie Jean is not my lover! ¡She's just a girl who claims that I am the one!
¡But the kid is not my son!-en ese momentó estuve apunto de soltar una carcajada...aunque me costara admitirlo, el tarado de Beck si que tenia talento para esto, cantaba bastante bien y podia decir que esos pasos eran casi identicos a los de la coreografia original.
-Jaja de todos ustedes, Beck es mi favorito...-dijo Max y al instante dio un gran salto hacia la mesa, no se resbalo ni nada, pero todo estaba mojado así que nos salpico un poco de agua directo a la cara!.
-No se supone que digas algo así mocoso...¡y fijate en donde pisas!-grité ya un tanto furioso.
-Ah lo siento, ¡¿a caso te salpique?!-dijo el y al instante dio una fuerte patada en el agua que aún pisaba, salpicandome en la cara esta vez a proposito.
-¡Agh! ¡maldito mocoso!-grité y lo tome por el tobillo haciendo que cayera de sentón en el piso a lo que todos rieron.
-Así nos llevamos ¿eh?-hablo Max, entonces se levanto y camino hacia el pequeño refrigerador, de ahí saco una jarra llena de agua y...¡el maldito mocoso me tiro el agua encima!.
-Ya te hacia falta un baño ¿no crees?-dijo con burla, obviamente me enfade.
-¡Max! ¡ven aqui!-el mocoso se echo a correr en el momentó en el que comencé a perseguirlo.
-¡Atrapame si puedes Dany!-gritó el obviamente para provocarme, entonces comenzó a correr por todo el cuarto, no era un cuarto muy grande pero aún así me era dificil atrapar a ese idiota...aunque al final lo logre.
-Ahora si...¡de esta no te salvas mocoso!-grité tomandolo por el cuello de la camisa.
-Vamos Dany, solo era una broma...-dijo el intentando soltarse, pero yo era mucho más alto que Max por lo que sus pies no llegaban al suelo y le era más dificil liberarse de mi agarre.
-¡¿Ah si?! ¡pues dejame jugar a mi también! ¡te pondre un ojo morado!-grité apunto de golpearlo, pero senti como alguien me detenia.
-Basta Daniel, tranquilizate-dijo Alan mientras me tomaba del brazo para detener el golpe.
-¡No me digas que hacer insecto!-grité y lo aleje, lo juro, no aplique mucha fuerza y aún así Alan se cayó al piso golpeandose ligeramente con la mesa.
-¡Alan!-gritó Cristian, el y James se acercaron para auxiliarlo.
-¡Idiota! ¡lastimaste a Alan!-gritó Max un tanto...¿furioso? ¿desde cuando le importa?.
-No se preocupen, estoy bien...-dijo Alan sonriendo, pero cuando lo vimos todos nos asustamos, digo, todos menos yo.
-¡¿Qué demonios?!-gritó James mirando a Alan como si fuera un fantasma.
-¿Qué? ¿pasa algo?-preguntó Max preocupado, al instante lo solté y ambos nos acercamos hacia Alan.
-¡Hay una...!-gritó Beck señalando detrás de Alan, aunque no termino la frase por el miedo.
-Oh...-Max se acerco un poco más y pudimos ver que habia una enorme rata detrás de Alan.
-¡Max! ¡haz algo!-gritó Cristian alejandose con cierto temor.
-Tranquilos chicos, solo es una pequeña rata, no hay que temer-dijo Max con una sonrisa, entonces se acerco y la tomo por la cola, incluso Alan estaba inmovil del miedo.
-¿Cómo puedes agarrarla así...?-preguntó Beck con las manos y las piernas temblorosas.
-¿Qué? ¿a caso te dan miedo?-hablo Max con una sonrisa divertida...oh no.
-¡Maldita sea lider! ¡aleja eso!-gritó Cristian a medida que Max se acercaba hacia el.
-Por favor lidersito, sacala de aqui-dijo Beck casi suplicando.
-Haha, vamos, no sean gallinas...-hablo Max y en ese momentó...¡se le cayó la maldita rata al piso!
-¡Mierda!-grito Beck y al instante todos nos alteramos.
La rata corria por todo el piso, todos nos asustamos, no es que las ratas me den miedo pero por precaución la segui con la mirada todo el tiempo para que no se me acerque.
Por instinto Alan se subio a la mesa junto con Beck rompiendo algunos platos al pisarlos...Cristian y James solo se mantuvieron alejados y alerta, por cierto, Cristian casi se resbala con el agua que Max habia regado en el piso, ah y Max...el estaba bastante tranquilo.
-¡¿En donde esta?!-gritó Cristian un tanto alterado.
-Oh...ya la encontre-dijo Max con una sonrisa mientras me miraba...entonces, la rata estaba...¡carajo!.
-¡Ah! ¡Max quitamela!-grité bastante alterado mientras me sacudia violentamente, como era de esperarse Max solo se echo a reir.
Entonces pude ver que la rata salio volando y cayó esta vez a unos centimetros de James, el al mirarla se desmayo.
-¡James!-al instante Cristian logro atraparlo antes de que cayera al piso.
-Haha, enserio chicos, no es para tanto-dijo Max y de nuevo la tomo por la cola, luego se dirigio hacia la puerta y finalmente la saco del cuarto de cocina.
-Vaya, eso fue aterrador...-dijo Beck respirando agitadamente, como si quisiera recuperar aire.
-Oh oh...-pronunció Alan mientras todos mirabamos a nuestro alrededor, la cocina era un completo desastre.
-¿Qué le diremos al jefe?, literalmente tendremos que pagar los platos rotos...-dije con los brazos cruzados, y al instante James despertó y parecia estar un tanto alterado.
-Tranquilo James, la rata se ha ido-dijo mientras aún reia.
-¡Si! ¡el lider nos salvo!-dijo Beck abrazando a Max con una sonrisa de alivio.
-Hum, cualquiera pudo haberlo echo...-murmuré, al instante Max comenzó a reir.
-Lo dice el que corria por todos lados diciendo "¡Ah! ¡Max! ¡quitamela!"-hablo el haciendo una tonta imitación de mi voz y expresiones corporales a lo que todos rieron.
-No se ustedes, pero quizás haya más ratas y no pienso quedarme aqui-dijo James y como si las hubiera invocado...esta vez salieron unas cinco ratas de debajo de la mesa.
-¡¡Ah!!-gritamos casi al unisono, entonces abrimos la puerta y salimos corriendo del restaurante.
Los primeros en correr fueron Beck, Cristian y Alan, James no lo dudo y se trepo en la espalda de Max, el mocoso solto una leve risita y coloco sus manos en las piernas de James para cargarlo de una manera más segura.
-Bien, vamonos Dany, camina adelante, te cubrire para que ninguna rata se te suba...-dijo el sonriendo con burla, este tonto me molesta más a mi porque al menos los demás le tienen más confianza, a diferencia de mi.
En fin, obviamente no rechaze esa propuesta, ambos salimos del restaurante y antes de irnos nos topamos con el dueño, un hombre ya un tanto viejo.
-Oh...¿paso algo?, antes también vi a tus amigos salir corriendo...-preguntó el anciano un tanto preocupado al ver mi rostro lleno de sudor por el miedo y a James en la espalda de Max sin querer bajarse.
-Hay algunas invitadas en su cocina, si me permite yo puedo sacarlas un dia de estos...-hablo Max, el hombre al instante entendio a que se referia.
-No se preocupen, esto fue mi culpa así que pueden irse sin problemas-dijo el viejo con una sonrisa.
-Gracias señor Perx-dijo Max correspondiendo a la sonrisa.
-Ah...y Max, tus amigos y tu aún son bastante jovenes, no deberian trabajar y menos en un lugar tan pobre como mi restaurante-dijo el viejo.
La verdad es que cuando llegamos aqui el anciano estaba apunto de irse, este lugar ya es muy antiguo pero ¿qué podiamos hacer?, es el hogar del señor Perx, y Max...el nos propuso ayudar al anciano a volver a reconstruir este lugar y por miedosos no lo logramos, creo que...es algo un poco triste.
-¡No se preocupe señor Perx! ¡no se rinda!, prometo que vendre a ayudarlo las veces que pueda y cuando sea el dueño de la CDERP, yo mismo haré oficial este lugar-dijo Max y guiñeo un ojo.
-¿Lider de la CDERP?-preguntó el viejo bastante sorprendido.
-Max Wake, ese es mi nombre...-dijo Max y sonrió, el viejo lo miro con la boca abierta.
De hecho, en la puerta de su restaurante estaban pegados cada uno de nuestros carteles de recompensa, si yo hubiera sido ese viejo...sin duda hubiera entregado a todos, o por lo menos a Max, tres millones no suena nada mal después de todo.
-¡Haha!, chico, vuelve cuando quieras, siempre tendran un lugar para trabajar en mi restaurante-dijo el viejo soltando una sonora carcajada.-Y suerte con tu "venganza", haz que Adam Wake nos las pague todas...
-¡Eso haré señor Perx!, resista hasta entonces-dijo Max a modo de despedida y al instante nos alejamos, caminando hacia nuestro asuqueroso ¿hogar? ¿guarida?, no se ni como llamarle a este basurero.
(....)
Una vez que llegamos ahí, las cosas mejoraron un poco, las chicas nos "atendieron" bien al llegar, ¡no! ¡más bien solo atendieron a Max como si fuera el rey de Inglaterra!.
-Jaja, me hubiera encantado verlos asustados por una rata-dijo Min riendo a carcajadas.
-Que raro que el señor Perx no haya pensando en entregarlos...¿creen que Wake le haya echo algo?-preguntó Lizzie.
-Puede ser, todos los que apoyan a Max es porque saben lo que en verdad hace Adan Wake-dije con los brazos cruzados.
-Como sea, el primer dia de trabajo parecio ser muy agotador ¿no?-preguntó Amy mientras le daba a Max un pequeño masaje en los hombros.
-Y que lo digas...-respondió Max mientras se recostaba en el piso, al instante Lina se coloco ahí para dejar a Max recostarse sobre sus piernas.
-No vuelvan a lastimar a Alan, idiotas-dijo Lina con los brazos cruzados.
-Tanto lio por una rata, son unos niños...-dijo Jennifer mientras curaba la herida en la cabeza de Alan.
-Chicos, lamento haberlos hecho pasar por eso...tan solo olviden lo que dije, volveremos a robar o algo así pero no más trabajos-dijo Amy con una sonrisa.
-Ya era hora de lo que entendieras, mi bella Amy-comentó Cristian.
-No volvere a ese lugar, nunca-dijo James aún un poco traumatizado.
-Yo si volvere...-dijo Max bastante decidido.
-¿Ah? ¿por qué?, no me digas que en verdad te gusto trabajar...-dije un tanto extrañado.
-Claro que si, fue bastante divertido, el señor Perx era buena onda, además...la sensación de regresar cansado y que te reciban de esta manera, se siente genial-dijo Max suspirando, claro, porque a el si lo miman demasiado, lo reciben con masajes y hasta limpian su asqueroso sudor.
-Bueno...en realidad no fue tan malo-dijo Beck sonriendo.
-Ya lo decidi, volvere a ese lugar cuando todo esto termine...-dijo Max mientras miraba hacia el hermoso cielo estrellado.
-¿Cómo que volverás?-pregunté un tanto confundido.
-Si le ganamos a Wake me volvere el lider de la CDERP, entonces abrire el restaurante del señor Perx con todo y nueva decoración-respondió Max con una sonrisa.
-¿Y si no ganamos?, también esta el tio Ruby...-dijo Lina a lo que Max asintió.
-Si Ruby gana probablemente ire a prision, una vez que pague mi condena saldre de ahí y vendre a trabajar a este lugar...-respondió Max.
-¿Y si gana Wake?-preguntó Alan a lo que todos miramos a Max con atención, al instante nos sorprendimos con su respuesta, este chico...en verdad va enserio.
-Por favor Alan, estamos hablando de cosas realistas, eso no pasara ni en un millon de años...-hablo Max con cierto enfado mientras miraba hacia la nada.
-¡Ese es mi Max!-gritó Jade mientras se abalanzaba sobre el repartiendo besos por todo su rostro.
-¡Hey! ¡alejate!-le gritó Lina a Jade ya que Max aún seguia sobre sus piernas.
Todos estabamos impactados con esa respuesta, a veces no sé si Max es un tonto o es un verdadero genio.
Estas son las situaciones en las que te sientes orgulloso de Max, en las que sonries al saber que el es el lider, en las que piensas "Max es increible", en las que quieres jurarle eterna lealtad.
Insisto en que yo seria mucho mejor como lider, pero ahora mismo me siento como todo un padre o al menos un hermano mayor, este chico se merece todo mi respeto, mi cabeza ahora mismo solo repite la misma frase una y otra vez...
"Ese es nuestro lider"
Continuara...