La noche había llegado y con ella la oscuridad, todo el campamento se encontraba en una fogata que habían organizado los maestros.
Era campo, por lo que la única luz que había ahí, era la de la luna, la cual debía ser suficiente para alumbrar.
Eun ah se removió un poco incómoda, la cercanía de ese chico la hacia sentir así de incómoda, tomando en cuenta que su aliento y respiración jadeante chocaban con su mejilla.
Él no podía controlar su respiración no había corrido así en mucho tiempo. Sabia que debía moverse, pero le resultaba divertida la cara de aquella joven que lo hacia observarla sin cansarse. Sintió como su pequeño cuerpo se removía debajo de él buscando una salida, así que puso su brazo a un costado para impedirlo.
Eun ah creyó que fue solo casualidad así que intentó moverse por el otro lado, pero el largo brazo del chico se lo impidió nuevamente. No pudo evitar verlo con el ceño fruncido por lo que él en arco una ceja divertido como respuesta.
Ésto no le resultaba divertido, estaba apunto de protestar cuando...
—¡SAL BYUN! Sabemos que estás por aquí.—se escuchó una voz que erizo la piel de Eun ah.
Él chico sólo intentó cubrirse acercándose más a Eun ah, temiendo que lo vieran sobre el pasto y fuera descubierto.
—Será mejor que salgas por tu cuenta, y que no seamos nosotros los que te encontremos.—continuaron un poco más calmados.
Luego de un rato las voces dejaron de escucharse, solo estaban ellos. Eun ah volteó a ver sus ojos oscuros, y se quedó viéndolos por un rato.
Ahora ninguno de los dos hacia el mínimo esfuerzo por moverse.
Hasta que un carraspeo hizo que los dos voltearan sorprendidos y se separaran al instante. Eun ah miró perpleja al chico frente a ella...
—Y-yo...
[ ....]
Del otro lado del campamento se encontraban JinYoung con Mark, intentando encontrar a YoungJae. Para ser honestos, JinYoung apreciaba su amistad con Mark, pero en ocasiones solía molestarle cuando hablaba mucho y sólo para quejarse, como en el caso de ahorita, prefería oír las conversaciones que tenía Mark con YoungJae.
—YoungJae no tenía razones para hacer eso.—repitió Mark molesto, JinYoung podría jurar que está era la milésima vez que lo decía.
Siguieron caminado y cualquiera que los viera, pensaría que mantenían una conversación cuando la realidad era que Mark era el único hablado y JinYoung simplemente lo ignoraba.
Llegaron a un lugar cerca del lago y les pareció visualizar una silueta inclinada hacia el pasto, se voltearon a ver los dos, confirmando que efectivamente era la persona que creían.
—YoungJae ¿Qué haces ahí? Te estábamos buscando.—habló JinYoung desde una distancia considerable.
YoungJae sonrió nervioso y lo volteó a ver preocupado.
—¿Ocurre algo?— intervino Mark curioso.
—No, no es nada.—sus palabras sonaron débiles para los otros dos, que decidieron descubrir que tramaba.
Se acercaron a el, y vieron a un chico sentado en el paso.
—B-Baekhyun.—hablo Mark y éste le regalo una sonrisa.
YoungJae y JinYoung miraron sorprendidos a Mark.
—Mark, eres tú.—Baekhyun se levanto y fue a saludar a Mark.
—¿Qué haces aquí? Creí que estabas en Seúl —comenzaron a hablar olvidando por completo la presencia de los otros 2.
—Lo mejor será que hablemos después.—dijo Baekyun una vez finalizada la conversación.
Le palmeo el hombro a Mark, este asintió y se despidieron.
Cuando la silueta de Baekhyun desapareció en el camino el silencio que se formo se rompió.
—¿Lo conoces?—habló Mark.—Cuando llegamos estabas con el.
—Supongo que sí, lo conocí hace un momento. Pero ¿de qué querían hablar?—cambió el tema.
Los otros no muy convencidos, decidieron seguir el rumbo de la conversación. YoungJae se había excusado, diciendo que quería compartir tiempo con JinYoung y que supuso que a Mark le gustaría estar con aquellas chicas.
YoungJae recordaba lo que había pasado hace unos momentos, antes de que Mark y JinYoung lo encontraran.
Caminaba hacia el pequeño lago que llamo su atención desde que llegaron, y le pareció ver algo entre el pasto, o mejor dicho a alguien. Decidió acercarse para ver si podía saber de quien se trataba, y se llevo la sorpresa de ver a Eun ah debajo de un chico, y los dos se observaban fijamente.
Hizo un carraspeo con su garganta, intentando llamar su atención.
Le resultó divertido ver como los dos se asustaban y se separaban rápidamente.
—Y-yo...—Eun ah se notaba nerviosa. Pero lo que menos quería él, eran explicaciones, ni siquiera era quien para oírlas.
—No deberías estar nerviosa.—dijo intentando calmarla, pero notó que esto se parecía mucho, a la situación de la mañana.
—Aunque.. No creó que sea común ver una escena así dos veces en un solo día..—continúo YoungJae.—y con personas diferentes.—dijo recordando a su amigo.
—Esto no es...
—Si quieres que JinYoung no salga lastimado, tú deberías hablar con él, o por lo menos explicárselo.
El solo vio como Eun ah se levantaba y salia de ese ambiente incómodo en dirección a las cabañas. Regreso su vista hacia el lugar de antes y vió al chico con una sonrisa que le pareció arrogante.
—Y bien, ¿Tú eres?—preguntó intentando obtener respuesta.
—Mi nombre es Baekhyun.—aclaró.
—¿Conoces a la chica?—YoungJae señalo con su cabeza, el lugar por donde se había ido Eun ah.
—No, pero supongo que tú sí —YoungJae asintió.—Y... También que tiene novio.
—Mmm... digamos que no. ¿No eres de por aquí verdad?—cambió el tema.
—No, justamente llegué hoy y me encuentro con "sorpresas"—dijo en un tono burlón que le causó risa a YoungJae.
Tal vez era demasiado apresurado para juzgarlo y solo necesitaba conocerlo más, pero Baekhyun le calló muy bien.
—Bueno espero que nos conozcamos mejor.—acordaron los dos.
Y es ahí en donde llegaron sus amigos.
YoungJae siguió caminando junto con sus amigos restándole importancia a eso, si en realidad había un problema con Eun ah, ella se lo diría a JinYoung, si no él se encargaría de hacerlo...
[.....]
A la mañana siguiente estaban todos reunidos dispuestos a completar el plan que ya tenían para el día. Si bien recordaban, era el Día 1 por lo que debían ir a la montaña que estaba no muy lejos de ahí.
Ya estando todo listo, se formarían equipos para subir juntos, los primeros en llegar recibirían un premio, era algo justo. Las instrucciones ya habían sido establecidas y eran muy claras, ahora solo quedaba formar los equipos.
El profesor choi, que era el encargado de acomodar y organizar a su grupo tutorado, había formado parejas por como lo vio conveniente.
JinYoung — YoungJae
Jackson — BamBam
YugYeom — Na Yeon
Eun ah— Jae Bum.
..........
..........
Etc.
Estaba todo listo cuando se armó un pequeño escándalo por parte de las alumnas del colegio, estas hablaban muy entusiasmadas, ésto atrajo la atención de todos.
—¿Ya viste que guapo es?—parloteaban en voz alta.
Eun ah dirigió su vista hacía donde estaban mirando los demás y se llevó una gran sorpresa. El chico que había visto la noche anterior estaba ahí, frente a todos llamando la atención por su singular atractivo.
A pesar de la poca oscuridad que había la noche anterior Eun ah lo pudo reconocer, y parece ser que el también. Sus ojos se encontraron con los de ella y mantuvieron contacto visual.
Este sonrió aliviado y se acercó al grupo donde se encontraba ella.
Eun ah solo veía atenta sus movimientos y cómo la distancia que los separaba se iba reduciendo poco a poco.
Una vez cerca éste le guiñó un ojo y ella se quedó en shock sin entender su atrevimiento.
—Joven Baekhyun, que sorpresa tenerlo tan pronto por acá, creímos que llegaría el próximo año.—habló el profesor Siwon.
—Si, eso iba a ser en un principio. Pero ya ve... Estoy aquí.—mantenía su vista fija en Eun ah mientras hablaba.
Si antes le había parecido hermosa en plena oscuridad, ahora no tenía palabras para describirla.
Eun ah solo se sentía incómoda y procuraba tener el menor contacto visual con el.
Jae Bum sólo tensó su mandíbula, si ése idiota seguía observando a Eun ah de esa forma no respondería.
—He oído que irán a la montaña.—habló Baekhyun rompiendo la tensión de miradas que había generado.—También oí que será por equipos o algo así.—apartó la vista de Eun ah y la dirigió firme hacia el profesor.
A pesar de que la plática solo era entre el profesor y Baekhyun, todos miraban atentos como si fuera un espectáculo.
Cuando Eun ah decidió alzar la vista nuevamente, vió como el brazo del chico se levantó, y señaló hacia su dirección. Y lo siguiente que oyó, pareció producto de su imaginación.
—Quiero ir con ella.