Mi sueño hecho realidad
— Elizabeth...
Alejandro.
Iba a cortar pero este enseguida hablo.
— ¡No me cortés! Por favor... Déjame hablar.
Miré a Justin y este me miraba atento. Pensando quién podría ser. Me levanté y le dije a Justin que era mi madre, este asintió y después me alejé lo suficiente para que Justin no escuchará.
— ¿Qué quieres?...
— Quiero disculparme..., Yo. Aquel día estaba muy pero muy borracho, siempre he creído que eras una cobarde y que te odiaba por nunca haber dicho nada pero... Yo también fui un cobarde, porque no fui capaz de decirte la verdad y tampoco a mi familia. Oculte... Lo que sucedió, por miedo. Y porque Alison me pidió que no le contara nada a mis padres. Lamento, lo que pasó. Lo siento de verdad, estaba muy mal, estoy muy mal.
— Viví años con ese horrible peso de que puede haber hecho algo para salvarla y no lo hice, fui un estúpida. Pero era solo una niña, ¿Qué querías que hiciera? Que es lo que iba a hacer, estaba asustada.
He vivido todos estos años con la culpa de lo que sucedió, gracias a Jasón logré suprimir aquel sentimiento pero eso no quiere decir que allá olvidado a Alison o lo que pasó.
— Lo sé, para todos estos fue difícil. Me iré de la escuela, me mudare e iré a un psicólogo. Yo, han pasado años y en vez de superar a aquello solo me volví enfermo, no estoy bien. Y debo sanar... todos debemos sanar. Te digo esto porque... Quiero que tomes mi lugar en la escuela, debiste ser tú desde un principio. Hay que dejar el pasado atrás, y superar cosas. Sobre todo tú no tienes la culpa, y solo eras una niña Beth. No tienes la culpa de lo que pasó. Realmente lo lamento, Adiós Beth.
— Adiós... Alejandro.
Después este corto la llamada. Y yo mantuve la mirada al frente, tenía razón. Había que dejar esto atrás, había que dejar a Alison atrás. Pero sabía que no sería fácil. No sería un camino fácil.
— ¿Todo está bien? —escucho y me doy la vuelta. Este me sonríe, yo asiento. Y me acercó a él.
— Sí, muchas gracias. Por todo, por traerme aquí, por tus palabras por todo. Creo que estaré bien, solo debo de tomarme un pequeño tiempo para reflexionar y todo eso... Pero estaré bien —le dije. Este asintió y sonrió. Miré a Justin a los ojos y después por alguna razón mi mirada bajo a sus labios. Hace tiempo que quería hacerlo, pero no estaba segura de si era el momento.
— El tiempo siempre es bueno para superar cosas —me dice él, yo al fin quito mi mirada de sus labios y le miró a los ojos—, sé bastante de eso. He pasado por muchas cosas en mi vida, y el tiempo siempre me ha ayudado a superar cosas.
— Lo sé, aunque hay veces en el que el tiempo pasa muy rápido y eso complica a veces las cosas.
Este asiente. Mire unos segundos la vista que presentaba este hermoso lugar y después volví la vista a Justin, este me miraba atento. Por Dios, sentía una sensación de querer acercarme a él y besarle. Pero al mismo tiempo no sabía si era correcto, la noche de la fiesta esperaba bailar con él pero nunca lo hicimos.
— Sabes, me acordé de algo —comienza a decir él y se me acerca—, te debo un baile. ¿Quieres bailar?.
Parecía que leía mis pensamientos. Sonreí y acepte, pese a que no era el baile y no había música de igual forma este me tomo de la cintura y me acercó a él mientras que yo coloque una mano en su hombro izquierdo y la otra tomé su mano derecha. Comenzamos a bailar a pasos lentos y este comenzó a tararear una canción que desconocía, yo no pude evitar sonreír. Mi imaginación me llevo a la noche de la fiesta, imaginándome que así debió de haber sucedido. Nosotros bailando de esta forma, y sonriendonos el uno al otro. Nos mantuvimos así unos segundos hasta que nuevamente mis ojos bajaron a sus labios, para volver a sus ojos y así repetidamente. Quería besarle, pero no me atrevía a hacerlo. ¿Qué pasa si me aleja de él?.
Al final decidí atreverme, me acerque a su rostro y junte sus labios con los míos. Este detuvo nuestro baile y una de sus manos subió a tomar de mi mejilla y la otra se mantuvo en mi cintura. Mientras que mis manos se dirigieron exclusivamente a tomar de su cuello y acercar más su rostro al mío. Para mi suerte no me alejo de él, correspondió al beso y me acercó su cuerpo más al mío. Entre abrí los labios y este hizo lo mismo para después besarnos con más pasión. Sentía mi corazón latir con velocidad, y como una felicidad pasaba por todo mi cuerpo. Esto era lo que quería, esto era lo que necesitaba. Le quería a él, solo a él. Y esperaba que con este beso quede claro lo que siento por él. Nos separamos y nos quedamos mirando a los ojos unos segundos, este me volvió a dar un pequeño beso y después sonrió.
— ¿Tenía que pasar tanto para que al fin llegáramos a esto? —dijo divertido, yo reí. Era cierto, habían pasado muchas cosas antes para que pudiéramos llegar a este momento.
— Tal vez eran necesarias, para que después esto sea especial. ¿No crees? —le digo. Este asiente y sonríe.
— Liz..., ¿Quieres.... Quieres ser mi novia? —me pregunta nervioso. Yo sonrió ampliamente y le digo que si, este después me abraza. Y nos quedamos así unos varios minutos para después volver a casa.
°°
— Y... ¿Qué tal? ¿Dónde te llevo? —me pregunta Kim interesada, yo sonrió y después le miró—, nos insistió mucho que quería salir contigo. Qué quería mostrarle un lugar especial para él.
— Sí, era un lugar muy lindo. Y tenía una gran vista, pero, no puedo decirte —le digo, mientras me siento en la cama. Está también se sienta y me mira haciendo un puchero.
— Vamos Beth, ¿Dónde te llevo?.
— Lo siento Kim, pero no puedo decírtelo. Realmente no puedo, es... Como un lugar especial de Justin y mío ahora —le digo sonriente. Esta me mira curiosa.
— Me da curiosidad... ¿Le gustas a Justin? Últimamente se notaba muy preocupado por ti, más de lo que lo hacía Jasón. ¿Le gustas? —yo solo sonreí pero no dije nada, está me miró con sorpresa y soltó un grito de emoción—, ¡Acaso... Tú y él... —yo solo asentí—, ¡Oh por Dios, pero que drama! Esto parece una telenovela. ¡Tú y Justin están saliendo! Qué emocionante, ¿Qué pasará con Justin y Taylor? ¡Es un trío amoroso!.
Yo fruncí el ceño y me quede pensando. Cierto..., Justin y Taylor. ¿Qué pasará con eso? No quiero que discutan por ello. No quiero que peleen por ello. Maldición.
— Eh, tranquila —me dice ella, yo le miró-, no te preocupes tanto por eso. De seguro no pasará nada, Taylor lo entenderá. Uno no puede controlar de quién se enamora. Mírame a mi, me enamoré de quién no quería porque creía que sufriría. Pero al final termino sucediendo que estoy feliz. Sé que Taylor será capaz de entender eso.
— Si pero... Taylor y yo tuvimos algo... No sé que es lo que siente Taylor a ahora pero... Justin es como su amigo. ¿No crees que le puede molestar?.
— Mejor no pienses en eso, eso es algo que Justin y Taylor deben solucionar. Y demás que Justin ya le contó, después de todo Justin y Taylor se llevan muy bien. Se podría decir que son como mejores amigos, no creo que tanto como tú y Jasón pero algo así. —yo asiento. Sólo espero que todo termine bien.
Un rato después Kim se marchó de casa, y me quede allí sentada en mi casa. Pensando muchas cosas, debes en cuando no podía evitar pensar en Alison pero gracias a las palabras de Alejandro pude entender que esto es algo que tengo que dejar atrás, no puedo seguir permitiendo que me afecte de esta forma. Sabía que tenía gente a mi lado que me aprecia y quiere ayudarme y verme mejor, y para que eso suceda también tengo que dar de mi parte.
Sentí el sonido de mi teléfono y lo tome para ver quién era, me percate que era el número de Justin. Sentí que mi corazón latía con fuerza y una sonrisa de asomo en mis labios. Después conteste.
— ¿Cómo estás? —me pregunta él, me acuesto en la cama y me quedo mirando hacia el techo mientras hablábamos.
— Creo que bien..., Es decir, bien. Kim estaba aquí hace unos minutos, y me estuvo preguntando que donde me llevaste —reí—, aunque le dejé con la duda. Porque no le dije donde me habías llevado.
— Kim es muy curiosa. Creo que me recuerda a alguien —dice este y ríe, yo sonreí. Sabía que se refería a mí—, ¿Tus padres están en casa?.
— No. Están trabajando, aunque me han enviado muchísimos mensajes. Preguntando cómo estoy, con quién estoy, si me siento bien sola, etc. Están realmente preocupados.
— Se entiende, también me preocupa que estés sola en casa. ¿Estarás bien ahí sola?.
— Sí, no te preocupes. Aún me afecta un poco el tema pero... Estaré bien. No haré nada estúpido así que no te preocupes.
— Tranquila, no creo que vayas a hacer algo así. Sólo que estar sola te hace estar más triste, solo eso me preocupa. No quiero que te dejes llevar tanto por la tristeza.
— Estaré bien, no hay problema. —le dije, hice una corta pausa y después continue hablando—, mañana iré a la escuela. No quiero tener que faltar, seguir mi vida habitualmente me servirá para olvidar. Quedarme en casa, encerrada en mi habitación me hará peor.
— Vale, iré por ti en la mañana. Además Jasón te abandono.
— Sí, a veces pienso que ese chico solo me usa —dije riendo—, cuando tiene a alguien solo me abandona. Debería alegrarle eso.
— No lo hagas, eso me beneficia. Puedo pasar más tiempo contigo —dice, sonreí ampliamente y sentí mis mejillas ardiendo. Maldición, ¿Por qué es tan tierno?—, debo cortar. Tengo que ir a cenar y luego irme a dormir. Buenas noches.
— Adiós Justin —dije y luego corte la llamada. Al final después me di una ducha, me seque el cabello y cuando estuve lista me fui a dormir.
Al día siguiente me desperté con sueño, no recuerdo que me haya acostado tarde, ni que haya dormido mal. Pero por alguna razón me sentía muy agotada, tal vez simplemente estaba cansada por todo lo que ha pasado estos días. Me puse mi uniforme escolar y después baje las escaleras para poder ir a desayunar, como supuse mi madre estaba poniendo ya la mesa, ella al verme me sonríe y me saluda. Yo por supuesto le correspondo al saludo.
— ¿Cómo estás? —me pregunta mientras me siento en la mesa—, ¿Todo bien anoche?.
— Sí estoy bien —le dije, tome una tostada y comencé a ponerle mantequilla—, y... Anoche estuvo todo bien. Aunque puede que no haya dormido muy bien ya que amanecí algo cansada.
— Deberías quedarte a descansar hija, no es necesario que vayas hoy a la escuela. Puedes quedarte en cama y dormir. —me dice ella y se sienta en la mesa también. Yo le miró y sonrió.
— Es una gran oferta, pero no. Quiero ir a la escuela, necesito ir. No quiero quedarme en casa sola, donde sólo estaré pensando cosas que no quiero. Así que..., Prefiero ir a la escuela donde podré distraerme —le dije, ella me sonríe y asiente. Después llega mi padre nos saluda y se sienta a desayunar con nosotros, tiempo después me fui con mi madre y por supuesto ella me llevo a la escuela para después ella irse a su trabajo. Cuando entre a la escuela sentí que me llamaban y cuando me giré este enseguida me abrazo y me acerco a él.
— Hola pequeña, ¿Cómo estás? ¿Lista para este maravilloso día?.
— Hola Jay, estoy mejor. Y.. ¿Maravilloso día? ¿Va a pasar algo grandioso o que? —le pregunto. Este ríe y después habla.
— No es eso... Sólo que quien sabe, tal vez si sea un maravilloso día. Hoy comienza tu superación y sobre todo supe por ahí que Alejandro ya no está en la escuela, todo se te será más fácil. —me dice él. Enseguida me acordé de lo que hablamos con Alejandro, él por supuesto que me había mencionado que se iría. Nunca creía que sería tan pronto, tal vez de verdad estaba arrepentido por lo que hizo y decidió irse lo más rápido posible para que no tenga que recordar lo que sucedió entre nosotros. Pero eso no es algo que olvidaré con solo que él se vaya. Aunque, debo admitir que si me alivia que él no esté. Porque pese a que él me explico todo no puedo llegar y perdonar por completo lo que me hizo. No es fácil. No cuando si no hubiera sido por aquellas chicas quizás aquello hubiera terminado muy mal para mí—, maldición. Siempre digo cosas en el momento menos indicado, lo siento Elí. No quería que recordarás eso... Agh, ¿¡Por qué tuve que mencionar su nombre!?.
— Jasón tranquilo, estoy bien. Me quedé callada porque estaba pensando. Pero no eran cosas malas te lo prometo. Esta bien, no importa —le digo. Este me pregunta "¿Segura?" y solo le asiento.
— Sabes, te tengo una grandiosa noticia. —me dice él, yo fruncí el ceño confusa. Y le pregunté que cual era esa sorpresa—, hoy pasaré el día como corresponde con mi mejor amiga. Además Kim no vendrá, se siente indispuesta hoy.
Detuve mis pasos y me crucé de brazos, y después mire con molestia a Jasón. ¡Como se atrevía! Este me miró con confusión ya que no entendía porque de la nada me había enojado.
— ¡Jasón realmente eres un mal amigo! —me quejo. Este se cruza de brazos y me pregunta que porque le decía eso—, ¡Me utilizas! Sólo porque no viene Kim vienes a mi, y si no me abandonas. ¡Eso no es ser un buen amigo!.
— ¡Eh!, ¡No te uso! ¡No hago eso! —yo le miré como diciendo "¿Enserio?" ya que era muy evidente. Desde antes lo hacía, incluso cuando no estaba con alguien. Este se quedo pensando un momento y después se me acercó a mí sonriente-, Elí... Lo siento.
— ¡No! —le dije. Este intento abrazarme pero yo pasé por su lado, ¡¿Cómo se atreve?!. Sentí que él me llamó y después lo sentí avanzar más rápido hacia mí, pero como era obvio yo avance con más rapidez. Y él también hasta que al final terminamos corriendo y por supuesto yo escapando de él—, ¡Jasón no te me acerques! ¡Te voy a golpear y sabes que soy capaz! —le grite mientras corría.
— ¡No me importa, hay que solucionar esto! Maldición Elí, me estoy cansando. ¡No corras de mí!.
— ¡No, y no te me acerques! Correré aún más rápido. ¡Te lo juro Jasón! —le grite. Sentimos el toque de la campana indicando que debíamos entrar a nuestro salón, algunos alumnos nos veían correr y nos veían extrañados mientras que otros se reían. Tengo que entrar a clases y si me detengo ahora Jasón me alcanzaría.
— ¡No tienes escapatoria Elí! —me grita desde atrás. Rayos, tenía razón. Miré hacia atrás y este me sonreía y venía cada vez más cerca—, ¡Cuidado!.
Enseguida mire hacia adelante y estaba Justin, grite y choque con él. En aquel golpe los dos caímos al suelo pero lo más rápido que pude reaccionar fue poner mi mano en la cabeza de Justin, para evitar que su cabeza se golpeara con fuerza contra el suelo. Pero sentí como mi mano sonó y un fuerte dolor en mis nudillos y dedos. Gemi de dolor, y mire a Justin. Jasón se había y se acercó a nosotros riéndose. Justin me miró a los ojos.
— ¿Estas bien? —me pregunta Justin.
— Eso creo...
— Dios, pero que caída. ¡Debieron haberlo visto! Jajaja, fue realmente grandioso. —dice Jasón riéndose. Me levanté junto a Justin y al apoyar mi mano para levantarme un fuerte dolor me hizo quejarme. Jasón dejo de reír y me miró preocupado—, ¿Te hiciste daño?.
Justin me tomo la mano con cuidado y está estaba hinchada y roja. Luego este me miró.
— Es probable que te hayas fracturado algún hueso, tu mano está muy hinchada. Y te duele con el mínimo movimiento, vamos, te acompañaré a la enfermería. —me dice Justin—, Jasón tú ve al salón y dile a la maestra que lleve a Beth a la enfermería que se cayó feo en el pasillo.
Jasón asintió y después se fue dejándonos solos. Luego Justin soltó mi mano y nos dirigimos a la enfermería. Estaba tan bien cuando había dejado las torpezas atrás, pero parece que me acompañaran toda la vida. Cuando llegamos a la enfermería vimos que ella estaba atendiendo a un alumno, ella nos vio y nos dijo que me fuera a una camilla y que allí me atendería. Nosotros lo hicimos, a los pocos minutos después llegó ella y me revisó para ver qué es lo que tenía.
— Joven usted debe irse a clases, así que vaya ahora. Ya después puede venir a verla si así lo desea —le dice la enfermera a Justin, este me mira un segundo y después asiente y se va. Hubiera querido que se quedará, después la enfermera me revisó y dijo lo que ya sabía. Me había fracturado la mano. Me puso unas vendas y dijo que me daría una hora con un doctor para que revise mi mano más con detalle. Por ahora me dijo que descansara, yo me acosté en la cama y me quede mirando el techo.
— Debería descansar, yo le avisaré a que hora el doctor la atenderá. —me dice ella.
— Está bien, gracias.
Después ella cierra mi cortina y intento dormir.
°°
Me desperté tal vez un rato después, ya que al mirar la hora quedaban aún media hora para que tocaran para el primer receso.
— Estoy tan aburrida aquí.
Justo en ese instante, la cortina de al lado se abre y yo veo quién fue.
— Vaya, vaya, vaya. Hace mucho tiempo que no te veía aquí vecina. -me dice él. Yo ruedo los ojos y solo dirijo mi mirada al techo. Este ríe y luego se levanta para sentarse al lado mío. Yo le miro con molestia-, ¿Qué te sucedió ahora?.
Le mostré mi mano y este hizo una mueca de dolor.
— Vaya, eso debe doler. Como siempre tan torpe Beth. —me dice y me desordenada el cabello. Yo le golpeó con mi mano sana y este se queja.
— No molestes, porque aunque tenga una sola mano puedo golpearte igual. —este levanta las manos en rendición y después se tiende a mi lado. Este me mira.
— ¿Y Justin? —me pregunta. Trague saliva nerviosa y le miré. ¿Justin le habría contado a Taylor lo nuestro...?
— En clases, se supone. Me vino a dejar y después se fue. —le dije. Este río y yo le miré extrañada, ¿Qué era lo gracioso?.
— ¿Qué tipo de novio es ese? ¿Dejando a su novia sola y herida? —dice él y ríe—, parece que hay que hablar con él y darle clases de cómo ser un buen novio.
Si lo hablaron...
— ¿Entonces tu sabes ser un buen novio? ¿Y le vas a enseñar a Justin? —le digo divertida. Sé que esto era incómodo, pero quería evitar eso lo mejor que pueda.
— Obvio —dice él de forma creída. Yo reí. En eso sentimos que tocaron el timbre para salir de clases—, ¿Sabes que me recuerda esto? —¿Qué? Le digo yo y luego este contesta—, a cuando nos conocimos aquí. Aunque eras más enojona de lo que eres ahora. Has cambiado Beth —me dice y vuelve a sacudir mi cabello. Y en vez de golpearlo, sonreí.
— Sí. Supongo que todos hemos cambiado de alguna forma. —la cortina se abrió y allí entró Jasón y Justin. Jasón enseguida se me acercó y me abrazo. Yo lo intente alejar de mí—, ¡Me están apretando, salganse de la cama!.
Tomé a Jasón con mi mano sana y lo empujé pero al hacer eso me moví para atrás y empuje a Taylor también haciendo que los dos cayeran al suelo.
— ¡Oh lo siento! —exclame. Justin comenzó a reír mientras se burlaba de los chicos, ellos se quejaron y después se levantaron, Taylor quejándose de la espalda y Jasón del brazo. No pude evitar reír un poco—, lo siento...
— Está bien, no importa —dice Taylor y se sienta en la camilla de al lado. Mientras que Jasón se cruza de brazos y me mira molesto.
— ¡Te has pasado! —se queja él—, aún me duele el brazo.
— ¡Eso te pasa por ser un mal mejor amigo! —le digo y me cruzo de brazos.
— ¡No soy un mal mejor amigo, tú exageras las cosas!.
— Ya arreglen su problema, no pueden estar alegando todo el tiempo.—nos dice Taylor. Tenía razón, pero era verdad lo que decía. Jasón me miró y se me acercó, aunque me advirtió que no lo empujara está vez. Yo asentí, Jasón miro a los chicos y estos entendieron enseguida. Al final estos nos dejaron solos.
— Pequeña, sabes que las cosas no son así. Y lamento si eso es lo que parece, eres alguien muy especial para mí. Y lo sabes. Te amo mucho pequeña, eres alguien muy importante y jamás te usaría como a alguien con quien pasar el rato. —este me abrazo, y yo acomodé mi cabeza en su pecho—, la verdad es que intento aprovechar cualquier instancia que tenga para pasarla contigo.
Yo no pude evitar sonreír y después abrace a Jasón.
— Está bien, lo siento. Tal vez si exagere un poco las cosas —este levantó una de sus cejas—, vale, lo exagere bastante. Te creo... —este sonrió y beso mi frente. En eso me acordé que no le había contado lo de Justin y mi, ¿Kim le habría dicho?—, Jay... ¿Ayer hablaste con Kim?.
— En la noche hablamos un poco, solo me dijo que estaba algo enferma. Y que no vendría hoy y bueno hay hablamos cosas personales. ¿Por qué?.
— Es que... —me separé de Jasón y me acomode bien en la cama para que puediera quedar frente a él—, tengo algo que contarte.
— ¿Qué sucede?.
— Es que... Estoy saliendo con alguien —le dije. Esta me miró algo sorprendido—, es... Justin.