Su mano estaba sobre la mía, y yo solo pude sentir un pequeña descarga eléctrica en mi interior.
Pero paso lo que tenía que pasar. Jin Young, como "el narcisista más narcisista de todo el mundo y el más perfecto." Alejó su mano bruscamente de la mía y me miró con un poco de enojo. Yo solo me dí la vuelta, viéndolo de frente e hice una reverencia en forma de disculpa.
Estaba yéndome cuando sentí que jalaron mi brazo bruscamente.
-Sabes... Debería ser yo el que pida una disculpa.-dijo Jin Young dando una reverencia.
"¿Por jalarme bruscamente y ser grosero o por existir?" pensé.
Aunque he de admitir que su acción me dejó muy impactada, nunca creí ver eso de él. Llevaba poco conociéndolo, pero su forma de ser no dejaba mucho a la imaginación.
-Esta bien, yo tampoco me fijé, así que soy responsable por si te incomodé - dije un poco sorprendida de que escuchara bien lo que acababa de decir.
-Bueno entonces ambos deberíamos tener cuidado -dijo serio. Pero a pesar de eso podía sentir sinceridad en sus palabras. -Hasta luego -dio una reverencia y se fue dejandome en una especie de trance y confusión a un máximo nivel combinado de...
No lo había visto comportarse de esa forma, y mi corazón comenzó a sentirse de una manera extraña.
Le resté importancia y salí de aquella tienda.
*3 horas después*
Estaba sentada en el escritorio de mi cuarto viendo fijamente ese uniforme sobre mi cama y mi mochila con unos cuantos útiles dentro de ella.
Estaba en una guerra con mi mente ¿iré o no iré? No podía pensar con claridad. Después de casi quemarme el cerebro salí de mi cuarto a ver a mi mamá, no pensaba pedir consejos ni nada, la respuesta sería más que obvia.
-Hola mamá ¿puedo pasar?- dije al verla acostada en su cama.
-Si ¿que pasa Eun Ah?- preguntó mientras se sentaba en ella.
-Nada, solo venía a ver cómo estabas.- me senté a su lado.
-Estoy bien. Pero a pesar de que me he sentido un poco mejor estos días, mañana no podré acompañarte a la escuela, me gustaría descansar un poco más.
-No hay ningún problema con que no vayas, lo importante es que descanses. Yo puedo arreglarlo sola.
-Si Eun Ah yo se que puedes sola. Pero hay una persona que te acompañará en mi lugar. Ella es realmente buena así que debes obedecerla y ayudarle en lo que puedas para tu ingreso en esa escuela.
-Bueno... -suspiré- mañana la iré a buscar cuando llegue. No te preocupes.- dije un poco desanimada. Pero mi mamá no lo notó.
-Su nombre es Lee Young Soo y se ve joven para su edad.-dijo sonriendo.
-Tú también te ves joven para tu edad mamá.-me estiré
-Sin contar de que eres muy fuerte.-dije suspirando.
-Me siento un poco cansada Eun Ah. ¿Que te parece si duermes temprano para que mañana puedas levantarte? No quiero que te levantes tarde mañana.- noté su semblante pesado y cansado.
Yo solo asentí y me separé de ella. Me despedí y fui hacia mi habitación, al llegar solo suspiré profundamente y me acosté sobre mi cama y decidí ya no atormentarme más.
Había tomado una decisión. Iría a la escuela.
*Al día siguiente*
Me desperté al sentir como rayos del sol inundaban mi cara. Me estire y me llevé la gran sorpresa que hace 20 minutos ya tenía que haber salido de mi casa para llegar temprano.
Saqué rápidamente mi nuevo uniforme y me lo puse lo mas rápido que pude, me cepille mi cabello y lo até en una coleta alta con un listón en ella.
Bajé casi corriendo las escaleras y metí una manzana y una botellita de leche para el camino, ya que era demasiado tarde para desayunar.
Llegué justo a tiempo a la parada de autobús ya que estaba apunto de arrancar.
Me senté en la parte trasera y saque mi reproductor para ir escuchando música en el camino.
Nunca había ido a esa escuela por lo que no sabía que tan lejos estaría de la parada.
La parada se llamaba Instituto de Busan. Cuando baje pude ver la escuela de cerca, ya que no estaba lejos de la parada de autobuses, y se veía muy grande así que empecé a caminar para encontrar la entrada.
Cuando la ví, me sentí aliviada, pero luego pude ver como la puerta estaba siendo cerrada. Entonces supe que tenía que correr.
Llegué justo a tiempo y el señor de vigilancia sólo me dio una mirada de molestia.
-Buenos días.- dije pasando al lado de el.
-Si, como sea.-bufo molesto.
Yo solo seguí caminando mientras reía por lo bajo. Vaya forma de conocer al personal de esta escuela.
Llegué a un edificio el cual decía oficinas, ahí pediría información para mi ingreso.
-Hola buenos días. Mi nombre es Eun Ah y vengó a pedir informes de...
-¿Eun Ah? -se escuchó una voz detrás de mí, volteé y me encontré con una señora como de unos 40 años.-Vaya...-dijo observándome.-Soy Lee Young Soo, tu madre me habló de ti, pero te ves mejor en persona.
Yo solo Sonreí nerviosamente ya que aún no entendía quien era la persona frente a mí.
-Hola. ¿Lee Young Soo...? -dije lentamente para ver si recordaba.
-Si, ¿tu madre no te lo dijo?- preguntó un poco preocupada.
*Flashback*
-Bueno... -suspiré.- mañana la iré a buscar cuando llegue. No te preocupes.
-Su nombre es Lee Young Soo y se ve joven para su edad.
*Fin del flashback*
-Oh si ya recuerdo -dije un poco apenada-. Mucho gusto y gracias por ayudarnos -di una reverencia.
-Si, no hay problema cariño. Te parece si vamos a ver lo de tu ingreso - asentí y me hizo señales para que la siguiera.
Estaba agradecida con la señora Lee, gracias a ella el proceso fue más rápido.
-Listo querida, aquí esta tu horario y solo espera al profesor de tu aula para que te asigne.- dijo mientras me entregaba lo necesario.
-¿Usted no se quedará?-pregunté curiosa.
-No cariño, debo hacer unas cuantas cosas. Me gustaría quedarme, pero supongo que será para la otra.
-Si esta bien. Ya hizo mucho, de todos modos gracias.- dije sonriendo.
-Bueno entonces ya me voy, adiós me dio mucho gusto verte.-dijo mientras se alejaba.
Yo solo me despedí con la mano y con una sonrisa.
Me senté en una banca cerca y me puse a observar mi horario.
Mi salón era el 8-1 y tendría educación física 3 veces a la semana, los días jueves y viernes saldría temprano.
-Tu eres Eun Ah ¿verdad? -me dijo una voz haciendo que dejara de leer mi horario.
Levanté mi rostro y me encontré con un señor, como de unos 30 años el cual supuse que sería un profesor.
-Si... Soy yo.
-Que bueno -sonrió-. Mi nombre es Choi Si Won, pero me puedes decir profesor Choi, o Siwon.
-Mucho gusto, entonces usted me dará alguna materia.-me puse un poco nerviosa en caso de que no fuera así.
-¿Tu clase es la 8-1? -asentí -Bueno supongo que soy tu tutor, así que sígueme.
Me puse de pie y caminé con el, llegamos a un edificio, y el profesor me explicó que pertenecía a los alumnos de primero. Entramos y caminamos por un pasillo el cual tenía muchas puertas y cada una decía algo como esto:
1-1
2-1
3-1
4-1.
...etc.
Hasta llegar al 8-1, el cual era el último, se detuvo.
-Espera aquí Eun Ah, en un segundo vuelvo -dijo mientras entraba solo él.
Yo no podía ver nada de lo que pasaba adentro del salón así que solo respiraba hondo e intentaba contener los nervios que sentía en ese momento.
Jugaba con uno de los botones de mi uniforme cuando salió el maestro.
-Listo Eun Ah, hora de entrar, animo -dijo con una sonrisa.
Tomé aire por última vez y entre, encontrándome con las personas a quien menos imaginaba ver. Ahí estaban, en el mismo salón que yo..