NANANANANANANANA BATMAN!!!
NANANANANANANANA BATMAN!!!
NANANANANANA
BATMAN! BATMAN! BATMAN!
DE NUEVO LAS VOCES EN MI CABEZA JODIENDO :b
WHATEVER...
Motivos
La mañana siguiente llegó, una gran ráfaga de sol entró por la ventana de la habitación que empezaba a iluminarse. Judy arrugó los ojos al darse cuenta de la luz en el ambiente, abrió gradualmente y se fijó en su entorno, no se encontraba, estaba desorientada, se miró el cuerpo desnudo, todavía extraviada, hasta que le llegaron imágenes de la noche anterior, sintió todo en su ser como si hubiera pasado recién. Se sonrió un poco sagaz y pronto dio un respingo recordando que debía ir a trabajar. Buscó su teléfono y miró la hora saltando instantáneamente de la cama.
- Dulces galletas con... Nick! Nick! Despierta!- esbozó inquieta zarandeando al chico, este despertó perezosamente completamente perdido.
- Que pasa, zanahorias...?- dijo en tono flojo.
- Despierta! Iremos tarde al trabajo... ay no... no, no... donde está mi uniforme?!- se levantó de la cama y se puso la ropa interior que estaba tirada en el suelo. Nick se estrujó los ojos y se quedó viéndola semidormido, alzó la ceja todavía con sueño y la sonrió mientras ella acomodaba el brassier sobre sus pechos arañados, se puso el pantalón sobre la lencería negra y como por último, buscó la blusa en el piso la cual no hallaba; levantó la vista al chico que estaba sentado en la cama todavía con la cobija encima y una cara despreocupada- y tú que tanto esperas?- él encogió los hombros y se rascó la cabeza.
- Tonta... estoy de reposo, recuerdas?- sonrió astuto. Ella entrecerró los ojos y se puso de pie indignada llevando sus manos a la cadera.
- Ya te dijeron que lo que tienes no es nada grave! Y juzgando lo que hicimos anoche... a mí me parece que estás muy bien!
- Primero, gracias por el halago... me lo dicen seguido...- rió sarcástico, ella frunció el ceño- segundo- se tumbó de nuevo- sabes lo difícil que es que Bogo de un día libre...?! aprovecharé que me dio tres, zanahorias! Lo siento, nada me sacará de esta cama... tenía tiempo sin dormir hasta tarde. Buenas noches, tierna conejita- dijo volviéndose boca abajo sobre la almohada, ella rodó los ojos y salió de la habitación. Nick levantó la oreja al escuchar cerrar la puerta y se volvió sonriendo.
Judy se aproximó a la cocina buscando la blusa negra, miró nuevamente la hora. 8:32am y se exasperó, movió la cabeza hacia todas partes.
- Donde está?!- exclamó buscando por la cocina.
- Buscabas esto?- le preguntó el chico con la camisa sonriendo apoyado sobre el marco del pasillo. Ella se dirigió rápidamente a él quien instantáneamente alzó la prenda sobre su cabeza, ella saltaba tratando de alcanzarla.
- No es gracioso! Llegaré tarde al trabajo, Nick! A ti no te importa pero a mí sí! Ya! Dámela!- el chico rió y empezó a avanzar hacia delante haciendo que ella tropezara con el mueble detrás de ella. Judy cayó sobre el sofá y encima de ella se lanzó él- qué estás haciendo? Dame la camisa, torpe!- replicó ella riendo, él arqueó la ceja con una sonrisa maliciosa en su rostro. Sin responder, Nick se acercó a su cara y le atesó un suave beso en los labios- ya me hiciste perder medio día de trabajo- gimió ella correspondiendo a los actos del chico, mientras que él se negaba a dejarla ir- Bogo me va a retar... y yo te daré una paliza si eso pasa...- le dijo ella tomando el cuello del chico y besando sensualmente sus labios.
- Claro...- él bajó a su cuello y en ese momento ella aprovechó para robar la prenda, la tomó y se zafó del agarre del chico.
- Aja! La tengo... mejor suerte para la próxima, zorro torpe- replicó poniéndose la blusa.
- No se vale, coneja astuta y tramposa!
- Ya, dame las llaves. Tengo que ir a trabajar.
- Está bien...- le entregó las llaves del auto- pero me voy a sentir muy solo hoy...- la abrazó por la espalda- y mañana y después de mañana...
- Entonces, no seas vago y ven a trabajar- se apartó revisando y guardando el teléfono en su bolsillo.
- No voy a desperdiciar mis días libres! Oportunidades como estas ocurren sólo una vez en la vida.
- Jaja, sí... lo que digas- dijo girando la perilla de la puerta, Nick puso la mano sobre ella cerrándola con estruendo y acorraló a la chica.
- No te irás sin despedirte, verdad?- ella le sonrió y le dio un beso en los labios, salió del departamento, fijándose que nadie los viera y le hizo un ademán con la mano camino por el pasillo- te estaré molestando todo el día, zanahorias!- le gritó antes que ella se subiera al ascensor.
Llegó a la planta baja y recibió un mensaje de texto en su celular, "Te amo, preciosa 💜💜💜" en letras mayúsculas, levantó la mirada hacia el edificio y se dio cuenta que el chico estaba apoyado del balcón y le hizo una ademán de despedida, ella rió divertida y se dirigió a la patrulla aparcada en la calle, tomó la camisa y el chaleco que había dejado en ella el día anterior y encendió el auto dirigiéndose a la estación de policía, que como le había dicho el zorro, estaba bastante cerca de allí.
Al llegar, entró con naturalidad por la parte de atrás, el estacionamiento, dejando las llaves de la patrulla "secuestrada" con el encargado. Saludó a algunos colegas y a la distancia la chica armiña hablando afanosamente con dos oficiales más.
- Bounce es un odioso!- exclamó la chica golpeando con furia la mesa- ayer me tropecé con él sin querer. Estaba distraída con llevarle unos informes a la superintendente y no lo vi en mi camino... intenté ayudarle a levantarse pero me dijo sarnosa... e incompetente- bajó la orejas deprimida.
- Hace unos días dijiste que te parecía lindo- replicó una de las otras compañeras de la chica, ella esquivó la cara.
- Y lo es, pero... aún me sorprende que luego de un año... todavía hayan presas así de intolerantes.
- Siempre conseguirás presas así, Leslie- repuso la coneja acercándose- pero eso no debe hacerte sentir mal.
- Jefa...- le dijo la chica levantándose para correr a su encuentro- Eh... n-no estoy diciendo que todos los de su especie sean iguales al detective, señora- ella asintió.
- Lo sé, cariño. Pero es en serio, siempre vas a encontrar presas prejuiciosas que... no quieren darse cuenta que los tiempos han cambiado. No dejes que eso te afecte- la armiña afirmó sonriendo y luego dirigió la mirada hacia detrás de ella.
- Gracias. El... oficial Wilde no vino?- preguntó, Judy sintió un pequeño espasmo facial, pero intentó disimularlo.
- Uhmm... no... p-por qué preguntas?- esbozó una sonrisa fingida.
- No es nada... es que escuché de garritas que tuvo un accidente y me estaba preguntando como estaba- miró a la coneja que estaba estática solo sonriendo con notable hipocresía.
- Oh... bueno si... e-el fin de semana la pasó mal y...- Leslie puso cara de preocupación- p-pero ya está bien! D-digo... está de reposo... el... lunes saldremos de viaje a Wild City así que Bogo le dijo que descansara entonces...
- Ah... bueno- le tomó de las manos- c-como usted es tan allegada a él p-pues dígale que Leslie le manda saludos y... que espera que se recupere pronto- le dio un pequeño beso en la mejilla, la coneja quedó pasmada mientras que la armiña sonrió avergonzada- y que... le mando eso para que mejore- Judy sonrió tensamente y rió aún más rígida.
- Jajaja... p-por supuesto... estoy segura que tus buenos deseos le llegarán... p-por ahora...- se soltó de la armiña y se retiró- permiso- se fue dando zancadas furiosas. La armiña se quedó con una sonrisa astuta y de satisfacción en el rostro, se dio la vuelta y miró a sus dos compañeras que estaban ofuscadas. Leslie encogió los hombros despreocupada.
- Qué? A veces esos dos necesitan un pequeño empujón...- les guiñó el ojo y cambió de tema.
La sargento se fue caminando hacia la recepción donde, como todas las mañanas, Benjamin y Ginette estaban conversando animosamente.
- Te gustó el nuevo álbum?- preguntó la chica al guepardo- a mí me parece que es una flecha al corazón. Es muy romántico...- él asintió sin dejar de ver la pantalla del computador.
- Oh sí lo escuché! Todas las canciones de Gazelle son buenas...- respondió buscando una carpeta en la computadora- pero también oí esta y no sé por qué pero me recordó a ti...- la chica escuchó atentamente la letra y se ruborizó al reconocerla, era una melodía dulce y que le gustaba mucho, pero le gustó mucho más al saber que el chico que le atraía pensaba que se parecía a ella. Ginette sonrió un poco avergonzada.
- Jaja... si, es una de mis favoritas...- replicó esquivando la cara y de pronto se acordó de algo importante- ah... es cierto... e-el sábado tengo una función en el teatro... t-te gustaría venir... y... no sé...- Ben se sonrojó al darse cuenta de la intención de la propuesta. Una cita.
- Claro! Me encantaría verte bailar!- el rostro de la chica se iluminó en un sonrisa y asintió enérgica. En eso la sargento se venía acercando, la pequeña gineta se apartó un poco avergonzada.
- Buen día, Ginnie, garritas... algo interesante hoy?- preguntó ella mirándole las caras a ambos jóvenes. Benjamin se acercó al mostrador y la saludó afable como siempre.
- Buen día, sargento Hopps... en quince minutos empieza la junta- la coneja asintió y decidió no seguir incomodando a la parejita.
- Ah perfecto... iré a hablar con Bogo primero...- se detuvo en seco y boqueó sorprendida al ver al detective conejo llegar al recinto con las manos completamente vendadas y saltó angustiada al encuentro con su colega- Roger! Qué te pasó?!- esbozó aterrada al notar que sus vendas cubrían incluso las falanges, él arqueó una ceja despectivo.
- Ah esto... fue una torpeza que cometí anoche... me tropecé en el baño de la habitación y se me ocurrió agarrarme nada menos que del espejo en la pared, cayó al piso, se rompió y bueno... todo un desastre... pero no es nada... en serio. No tienes de qué preocuparte...- le esbozó una sonrisa algo melancólica, Judy frunció las cejas desconcertada con la actitud del muchacho. Un mensaje le llegó al celular, lo sacó y revisó el número- disculpa, tengo que atender esta llamada- ella afirmó viendo como el conejo presionó con dificultad el manos libres en su oreja, Judy se dio media vuelta y siguió su camino todavía un poco apenada por las manos de su compañero y se dirigió lentamente a la oficina del jefe- necesariamente tienes que llamar justo cuando estoy rodeado de gente?! Qué es lo que quieres?...
Mientras tanto la coneja entró en la delegación del jefe Bogo, ella se acercó a la puerta y escuchó claramente como el hombre de adentro tarareaba una canción del promocional de su cantante favorita, ella llamó dos veces, pero este solo seguía entretenido con la música, la chica empujó la puerta la cual se abrió suavemente, metió la cabeza en la apertura y vio que el hombre cargaba unos auriculares puestos y movía la cabeza de manera rítmica mientras golpeaba ligeramente la mesa con sus pesadas manos. Por supuesto jamás se enteró de la presencia de la oficial Hopps.
- Eres puro, puro chantaje...- canturreó el hombre cada vez más entusiasmado en su pequeño dispositivo musical. Judy rió un poco divertida al ver esa faceta que desconocía de su admirado y algo temido jefe, dio unos pequeños saltos tratando de llamar su atención, pero el búfalo seguía sumido en su mundo.
- Jefe... oiga... jefe Bogo, señor... Jefe!!!- exclamó la coneja intentando que reaccionara, hasta que se dio cuenta de la goma de borrar sobre el escritorio, la tomó, picó pequeños pedazos y empezó a lanzarle para llamar su atención. El hombre resopló enojado y se volvió a ver lo que sucedía.
- QUE?!- esbozó y miró hacia abajo, la oficial sonrió nerviosamente y le hizo un ademán con la mano para saludarlo. Bogo abrió los ojos pasmado y se sentó quitándose los auriculares. Luego volvió a su habitual y seria mala cara. Ella se sentó frente a él como si nada hubiera pasado- Ahem- se aclaró la garganta- buen día, Hopps... puntual como siempre- entrecruzó sus dedos- puedo saber por qué no regresó ayer?- la chica bajó las orejas recordando en un flashback todo lo que había ocurrido el día anterior, el hombre siguió mirándole con severidad.
- Uhmm... porque... uhmm- sacó la constancia médica del zorro que estaba dentro de su camisa y la puso en la mesa- estaba acompañando a Ni... al oficial Wilde a su chequeo médico al mediodía y...- miró hacia la ventana- de pronto... se sintió sumamente mal, estaba al volante y casi chocamos porque estaba mareado y vio... todo oscuro... tal parece que el golpe también le afectó la cabeza... jeje...- el búfalo arqueó la ceja- bueno, total me vi obligada a conducir y llevarlo a su casa... que por cierto, no es muy lejos de aquí y...- rió nerviosa- p-pero... cuando llegamos al piso m-me di cuenta que estaba muy... muy... muy enfermo, tenía una fiebre muy alta y... como su amiga, colega y superior... no podía dejarlo en ese estado, no es así?- mostró las palmas como una excusa, Bogo asintió no muy convencido- m-me tomé la libertad de... encargarme de él... hacer el almuerzo y que su temperatura disminuyera, cosa que costó bastante... en fin, el problema fue que... Wilde no estuvo mejor sino hasta más tarde... y cuando me di cuenta... ya no podía regresar al trabajo, así que volví a mi casa- Judy tratando de adivinar la reacción siguiente del jefe, tragó grueso y finalizó- señor... solo hice lo que pensé que era correcto- Bogo asintió.
- Como una buena novia...
- Exacto. Como una buena nov... QUE?!- se ruborizó de inmediato- N-NO!!! É-él y yo no somos novios... uhmm... que... disparate es ese, señor?! Eso está en contra...- se calló mientras este le miraba con seriedad, lanzó un suspiro que pareció más un bramido y se echó hacia adelante.
- Se nota que no sabes mentir, Hopps...- la coneja bajó las orejas y el rostro abochornada- pero... puedes guardar un secreto...?- preguntó el hombre, ella ladeó la cabeza y arqueando la ceja confundida.
Momentos más tarde, la coneja salió de la oficina un poco aturdida con el "acuerdo" al que había llegado con su director, luego sacó su celular, lo miró un segundo y se dedicó a enviar un mensaje.
- Eres la peor influencia para mí!!! Acabo de decir la mentira más grande que habré dicho en toda mi vida al jefe Bogo sólo para cubrirte la espalda! Espero que me lo agradezcas luego >:( - envió el mensaje, malhumorada y se fue caminando a su oficina. En seguida le llegó respuesta.
- Me hiciste el día, zanahorias! Has aprendido bien! Me enorgulleces! nwn - le llegó a su teléfono, ella se burló y respondió.
- No es gracioso! Ni siquiera me creyó... Fue tan evidente que intenté mentirle que casi muero de vergüenza! De hecho creo que sospecha algo sobre nosotros ¬¬ - lo envió abriendo la puerta de la oficina, caminó hacia la PC y prendió la máquina. Un nuevo mensaje llegó.
- Siempre hay una primera vez para todo y casi nunca es perfecto... pero pronto te convertirás en una maestra del engaño. Yo me encargaré de eso- ella arrugó la frente-... y no te preocupes... tan pronto te tenga en frente, te daré tu "agradecimiento" ;) - ella se ruborizó de inmediato. Repentinamente llegó otro- y respecto al otro asunto... si... yo también lo supuse... en estos días me dio unos consejos ;) - ella abrió los ojos sorprendida.
- Espera... él ya lo sabe?
- Claro! Si todos en la jefatura lo saben lol... yo no sé disimular cuando siento algo en serio... y tú tampoco eres muy discreta que digamos... según los lobos... ¬¬
- Que?! y todos hicieron la vista gorda y aquí no pasó nada?!
- Buenos colegas, no crees? n_n - la coneja bajó las orejas ofuscada.
- Vaya... la verdad no sé que decir... por un lado estoy aliviada y por el otro... siento algo de decepción de cómo algunas infracciones quedan así de impunes... incluso tratándose de los asuntos internos de la policía.
- No está tan mal...- ella sonrió resignada, luego de eso se puso a trabajar en la computadora. Dejó de escribirle por un rato.
No muy poco tiempo después el detective Bounce se acercó a la oficina, tocando tres veces la puerta y se quedó un momento inmóvil solo viéndola trabajar.
- Ocupada, Hopps?- preguntó el conejo, Judy se volvió a verlo y le sonrió amablemente.
- No mucho, solo estoy revisando un par de cosas... para que todo quede en orden antes que me vaya. Estoy algo ansiosa por el viaje a decir verdad- Roger rodó una silla hacia el escritorio de la oficial y se sentó a su lado.
- Ansiosa emocionada, o ansiosa muerta de miedo?- ella sonrió insegura.
- Un tanto de ambas. Es que... había estado esperando tanto... desde... el año pasado que ocurrió el incidente con los Howlers, que fue... hasta ahora el caso más importante que he tenido desde que me uní a la policía como... una oficial real... luego fueron algunos robos, escenas del crimen... uno que otro secuestro y trabajos en el S.W.A.T... era emocionante... la primera vez, pero luego se convirtió en algo habitual... y seguía siendo emocionante! Pero después llegaron los fatídicos días tranquilos... por eso me entusiasma el hecho de volver a los casos reales, pero a la vez me inquieta ya que, esta vez no será en mi ciudad ni con... mi equipo... más bien agradezco que hayan dejado que Nick me acompañe a esta misión... me siento- suspiró- me siento más segura cuando estoy a su lado...- Bounce frunció el ceño pero decidió no dar largas o discutir.
- No... todo lo que te han dicho de Wild City es cierto... la verdad sí, es un sitio bastante peligroso... pero tiene su encanto... y-yo me refiero a que...- dejó caer sus orejas y cabeza derrotado- a quien quiero engañar...? Ese lugar es horrible... debes dormir con un ojo abierto y el otro cerrado, al menos veinte familias de mamíferos pierden un miembro al día, hay peleas de barrios a diario y esos malditos... AGH!- se llevó las manos a la cabeza- esos miserables de Owen y Lynx...- empezó a sollozar- se han cargado al menos a la mitad de los habitantes de la ciudad... todo por sus estúpidas disputas por el territorio...
- Y por qué la policía no ha hecho nada por detenerlos?- preguntó Judy algo angustiada. El se volvió a verla con los ojos hinchados y entrecerrados.
- Por qué? Por qué? Cómo podrían? Uno es un maniático pirómano y sociopata y el otro un acomplejado con sus antecesores y delirios de grandeza... todos... son reclutas muy jóvenes y sinceramente no están capacitados para llevar a cabo esas misiones... la policía teme que ocurra otro atentado en contra de la jefatura...
- Otro?- Roger frunció los labios.
- Fue conocido como el Kamikaze de WCPD... hasta ahora es el evento más catastrófico de la ciudad... ocurrió hace tres años... una bomba explotó en la comisaría...- Judy se removió aterrada- uno de los oficiales que había sido secuestrado por los hombres de Owen... un día regresó al departamento como si no hubiera pasado nada... aunque estaba muy nervioso... muy extraño... la bomba estaba dentro de su cuerpo...- ella quedó impresionada con el relato que el conejo le estaba narrando. Roger estaba mirando al suelo, sus ojos oscuros y fijos en las baldosas, su voz era temblorosa y neutral- Luego de eso, la central quedó destruida y todos los oficiales de ese tiempo murieron... costó mucho reconstruir el edificio y volver a reclutar nuevos policías, el miedo no hacía más que crecer en la ciudad. Yo decidí entrar porque tenía un par de cuentas que saldar con ellos...- apretó los dientes con furia y empezó a sollozar- esos dos son la verdadera desgracia de esa ciudad... sería mejor si ambos estuvieran muertos... nunca los perdonaré- susurró para él entre dientes, pero Judy le escuchó.
- Es que acaso, su repulsión por los depredadores se debe a algo que ocurrió con Scar o Nigel?- preguntó interesada y preocupada por el conejo, él sonrió irónico. El brillo muerto en los ojos del conejo le inquietó, no parecía él mismo.
- Si... digamos que el miserable de Owen me robó algo que quería... algo que amaba... por eso... no me detendré hasta verlo caer... a él, y a ese niño estúpido... me vengaré... juro que lo haré...- Judy le miró en silencio, él siempre se mantuvo con la cabeza abajo, se miró las manos y se puso de pie- bueno! Hah... lamento haberte incomodado durante este rato... gracias por escucharme... aunque no tuvieras interés- el conejo se dispuso a salir de la oficina pero ella lo retuvo.
- Roger... tal vez... no hayas tenido muy buenas experiencias en el pasado, pero no te cierres... siempre hay una nueva oportunidad para empezar de cero... no... todos lo depredadores son malos...- él se volvió a verla y le sonrió de manera cordial y melancólica.
- Hah... Judy... eres tan dulce y bondadosa...- acarició su mejilla- casi tanto como lo fue ella...- negó con la cabeza- pero no lo intentes... mi impresión sobre ellos... no cambiará...- luego de eso le hizo un ademán de despedida y salió del cubículo. Judy se mantuvo en silencio sumida en sus pensamientos durante unos minutos, luego se acercó a su escritorio y tomó su teléfono. Se dedicó a enviar otro mensaje.
- Debemos cumplir con la misión de Wild City... sin importar qué. Es nuestro deber resolver los conflictos de la ciudad.
- Vaya... y ahora por qué tan determinada?
- Para ayudar a alguien... para ayudar a todos... para hacer de ese un lugar mejor... por Bounce y por todos los habitantes.
- Que?! Y yo tengo que ayudar a ese conejo?! Debe ser una broma- ella arrugó la frente.
- Sé que ustedes dos no se llevan bien, por muchas razones, Nick... pero es necesario... créeme... Roger tiene sus motivos para ser así, es incluso más profundo de lo que pensaba...
- No voy un día y ya me cambiaste por el detective ternura. Buen trabajo, zanahorias!
- No te enojes... es en serio... Nick... debemos ayudar a Bounce... y por favor... entiéndelo... solo está respirando por sus heridas...
- Haré el intento, Judy... pero no prometo nada...
BUANO GENTE!
CUENTAS CLARAS CONSERVAN AMISTADES...
Y LAS PROMESAS SON
DEUDAS SO...
DEUDA SALDADA!
GRACIAS ZARO POR ESE HERMOSO DIBUJO!!!
TE ADOGO, DUDEEEEE >w<
NO ME JODAN HASTA EL VIERNES >:v
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BYE nwn