Veo como Celeste discute con su novio a través del teléfono y cuando corta, bufa.
—El muy idiota, se olvidó de pagar el alquiler ¡Y dice que ese dinero es para su vinito! ¡Estúpido! —grita furiosa y luego se percata, avergonzada —lo siento.
—¿Por qué te disculpas conmigo? —me señalo.
—Por el escándalo —se ríe.
—Veo que... tienes una relación tóxica —no debería opinar, no está bien.
—Esto no es una novela —rueda los ojos.
—Lo siento, no quise decir eso —debería darme vergüenza.
—¿No era usted el que decía que le dé una oportunidad?
Cierto pero...
La oportunidad se la puede meter por el... mejor me calmo ¿De dónde sale todo este mal humor?
¡Estúpido altercado del baño!
—Cambié de opinión —y no tengo la más pálida idea por qué.
—¿Por qué? —me mira confundida.
Eso me estoy preguntando yo.