Se que soy demasiado joven e iluso para sentirme de esta manera, pero tú indiferencia me ha estado matando estos días, ha llevado mi ansiedad a niveles detestables y mi depresión a un hoyo negro, no se que es lo que pase en tu mente pero cada vez que te hablo espero tu respuesta y jamás la regresas, quizás pienses que soy molesto pero antes solías pensar que yo era interesante, no entiendo que fue lo que hice para que cambiaras de opinión... ahora vuelvo a mi vida como una mosca a la mierda y se que no te importa por qué tampoco te interesaste en el que conociste antes que a mi, en tu vida siempre estarán las fiestas, las drogas y el alcohol, pero algún día sentirás el dolor que provocaste en otros con un corazón roto y no te lo deseo, sentirás que el amor te abandono cuando estés acostado en la cama, pero es solo que la vida cobra deudas y algún día tenemos que pagar el precio de nuestros errores, así como yo estoy pagando el haberte conocido y el haber creído que si te importaba, que deuda tan cara.
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-¡Mételos!- pedí -estoy escurriendo- no podían describir la sensación de sentir a alguien que te toque tan agresivamente y ala vez de una forma tan erotica.
Lo hizo, metió ambos dedos al mismo tiempo -AH!- gemí -¡mierda,si!- sentía que podía eyacular al comenzar a sentir sus dedos entrando y saliendo de mi trasero, solo ver su rostro a medio luz en el auto y pensar que alguien podía vernos me ponía aún más excitado.
-¿Te gusta?- preguntó.
-¡Me encanta!- respondí -¡No pares!- sentía que mi voz venia de mis entrañas, las piernas me temblaban y la punta de mi miembro escurría, de verdad estaba apunto de estallar cada que el penetraba aún más y más adentro -Billy...- dije -Cogeme- y el seguía entrando y saliendo tan fuerte que me lastimaba -¡Bill!- grite y me vine <<joder>> -Oh-eyacule y el de inmediato succiono mi miembro y succiono, me sentía en una nube, recargue mi cabeza y perdí la vista en un segundo dejándome llevar por la satisfacción de este orgasmo en su boca, era algo extraño pero el estaba succionando mi semen sin ningún problema mientras me retorcía, cuando me termine.
-Voy a follarte- dijo quitándose y limpiándose con su camisa -no sabes cómo esperaba esto- decía besándome el cuello -poner mi pene dentro de ti-
-Bill- tomaba su cabeza cerca de mi cuello y trataba de acomodarme en el espacio tan pequeño del auto -¡Hazlo!- dije -¡ponlo dentro!- estábamos cara a cara, viendo nuestros rostros calientes y no había pena entre el y yo -Quiero que te vengas dentro- le pedí -córrete dentro de mi- y sentí la punta tocar mi ano mientras estaba acomodando el sillón del carro.
-Estoy entrando...-
-Puedo sentirte-
-Ya casi- resbaló y entro en un instante.
-¡Gh!- gemí -mierda-
-¿Te gusta?-
-Sí- respondí.
-¿Te gusta mucho?-
-¡Me encanta!- en el sexo hay una pendiente que denomina tu rol no sólo sexual si no también de cómo debes moverte, Bill ya era un hombre, era mayor que yo y algo brusco, eso me fascinaba, había algo en esa brusquedad que me encantaba, aunque nunca tenía una expresión en sus ojos, tenía su verga en mi y su rostro pidiendo al cielo.
-Se siente tan bien estar dentro de ti- dijo.
-Bill- gemí -Bill, córrete- me jaló del cabello y comenzó a besarme el cuello mientras seguía sentándome y moviendo mis caderas contra su pubis, una mano en mi cabello y la otra para tomarme del trasero -pégame- le dije -golpéame- y me dio una gran nalgada -¡puta madre!- Eddie me vino a la mente, no quería hacer todo esto un círculo vicioso de corazones rotos y mucho menos vivir siempre enamorado de el, pero recordar que el y yo también habíamos hecho estas cosas, me entraban ganas de vomitar en verdad -Hazlo,otra vez- le pedí -golpéame en el rostro-
y el solo me escupió.
Mientras jalaba mi cabello, más fuerte el entraba en mi y el choque de su pubis contra mi era realmente fuerte y excitante.
-Voy a correrme- dijo.
-¡Hazlo adentro!- el volvió a soltarme un golpe en el trasero y yo sentía que podía eyacular también -¡Vamos Billy!- lo abrace -córrete dentro de mi-
-¡Me vengo!- sentí realmente caliente dentro de mi trasero y sentí su verga moverse, estaba hecho, estaba dentro, sentí su cruel mirada en mi y yo me sentía completo, me sentía satisfecho y me sentía bien -Si pudiera hacerte mi puta, no tendría dinero para beber nunca más- dijo.
-¿Estás bromeando?-
-Es sarcasmo- sonrió -pero mi pene te lo agradece- me tomo el cuello y me besó, sin tantos dramas ni rodeos, yo simplemente estaba allí en el auto con Billy, mi trasero lleno de semen y un olor extraño, mientras nos besábamos en una posición muy incómoda y su pene seguía dentro, era fascinante, nunca pensé estar en una situación tan loca y de verdad que la vida te pone en situaciones más que extrañas.
me separe de sus labios -Lamentó no haberme ido- confesé.
-¿A que te refieres?-
-Me refiero... a que ahora, siempre estaré pidiendo más de ti y no creo que puedas darme nada-
-Somos Tú, Carmen y yo... porque lo que tú deseas de mi solo Carmen podría dártelo-
-Esto va demasiado rápido Billy... pero a la vez tan lento que siento ganas de vomitar cada vez que tratamos de hablar-
-¿Te gusto?- preguntó.
-Si-
-¿Como tu primo te gusta o más?-
-No lo sé- dije -no hay forma de expresar si es más o menos por qué estás aquí ahora y Eddie no-
-Me gustas Jamie- dijo -me gusta ver que no me necesitas, me gusta pensar que siempre nos hacemos daño sin saberlo... pero, ¿sabes que me gusta más de ti?-
-No, no lo se-
-Que eres fuerte, tienes ese cabello rojo y trabajas duro-
-¿Desde cuando te volviste así?-
-Desde que dejamos de vernos cuando cuidabas a tu primo-
-¿Me extrañaste?-
-Si- dijo.
Me sentía algo culpable de ir a verlo solo por el hecho de que me ayudó, yo era una horrible persona, pero por dentro sabía que el hecho de no poder estar con Billy tenía que ver por qué ninguno de los dos podía ser honesto el uno con el otro.
-El alcoholico Billy extrañando algo que no es el alcohol-
-Extraño muchas cosas- interrumpió -y no quería que tú fueras una de esas-
-Es muy poco tiempo-
-¿Para que?-
-Para sentir algo-
-Con el tiempo que he estado solo, se necesita una persona que cambie tu perspectiva de que tan rápido va el tiempo y yo creo...- acaricio mi mejilla -que han pasado décadas desde que nos conocimos- sonreí sin pensarlo.
-Billy... cállate- le pedí -estás arruinando la sensación-
-Sigo dentro de ti-
-Cada que te veo siento ganas de vomitar y creo que es por qué estoy deprimido y enamorado- el solo levanto la ceja -yo no te gusto- le dije -no negaré que sentimos una atracción el uno al otro, pero es por qué cada que estamos así es una nueva adicción y eso te gusta, no yo- seguí diciendo -todo el mundo me mira por qué nos ven juntos, no había llamado nunca la atención así-
-Te equivocas-
-No Billy... nunca podré agradecerte que me hayas ayudado con mi primo, pero siendo honestos lo más cercano a romance a sido eso, tú seguirás siempre visitando bares y en las fiestas y yo siempre estaré ocupado trabajando-
-¿Te gusta estar conmigo?- preguntó.
-No mentiré y te diré que no me encanta estar contigo, por qué no es así, estoy aquí encima de ti y cada uno de los errores que yo cometa nunca te gustaran ni cuando me conozcas ni cuando conozcas mi rota familia-
-Tengo tiempo Jamie-
-No seas un romántico-
-No lo estoy siendo- dijo -de hecho, pienso que un paso más podría arruinar el conocernos mejor-
-Lo mismo pienso-
-No sabemos mucho de la vida del otro y me gusta eso-
-A mi también-
-Así que esperaré-
-¿A que?-
-A darle tiempo al tiempo-
-No me pongas triste-
-Te he escupido, te he tratado como si fueras un objeto y ¿esto te pone triste?-
-Nunca he sido demasiado inteligente cómo para entender todo por mi cuenta- el río.
-Eso mismo decía yo y mírame ahora rojo, me estás matando y entiendo por qué-
-No podemos- le dije -tampoco creo que Carmen pueda cambiar eso, era algo que esperaba de ti y siendo honestos... ni tú, ni yo sabemos cómo -
-¿Como que?-
-Como abrir nuestro corazón-
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-¿Traes contigo la cerveza?- dijo la chica del cabello rosa.
-Traigo conmigo problemas-
-Así es la vida real-
-Casi no hay nadie-
-Es de esos días de fiesta, casi no vienen muchos hasta más tarde cuando se les termina el alcohol y quieren algo más fuerte-
-¿Que hago entonces?-
-Puedes limpiar las mesas o lavar los vasos sucios-
-¡Excelente!- exclamé sarcástico dirigiéndome a la cocina.
-¡Pelirrojo!- voltee -mi nombre es Vanessa, has estado aquí y ni siquiera nos conocemos bien-
-Creí que tenía algo que ver con tu cabello rosa- reí.
-Es para que no seas tan formal-
Iba a ser una noche larga... y hoy había retrocedido algunos pasos atrás.
CANCIÓN:
AMY WINEHOUSE - TEARS DRY ON THEIR OWN 😔💔