Me levante algo cansada pero de igual manera emocionada, ayer la respuesta de la universidad no había llegado, pero la señora Moon dice que no pierda las esperanzas, que esas cosas tardan en llegar, la universidad había dicho que enviaría un email y una carta al orfanato, la carta no había llegado, pero era un servicio que podía fallar, así que confiaba plenamente en la internet y que ese email me llegara.
Decidí ir a darme una ducha e ir a comprar algo de comer, la señora Moon me pagaba por ayudarla todo el día aquí en el orfanato, pues realmente era un trabajo, hasta ahora había ahorrado algunos 1500 euros y los guardaba para poder comprar los pasajes de avión a Ohio.
––Buenos días––saludo Sara, le sonreí de vuelta y le devolví el saludo––¿te vas?
––Si, saldré a comprar algo al Starbucks de unas cuadras, ¿quieres venir?––le propuse, esta se negó rotundamente y volvió a acostarse.
––Que te vaya bien––se rio y me despedí de ella saliendo por la puerta, salude a todos los niños que se encontraban ya despiertos y que se desayunaban, no encontré a la señora Moon pero hoy era mi día libre, así que me fui sin darle explicaciones.
El día estaba muy bonito, algo soleado y con un hermoso frio, me reprendí por no haber traído un abrigo y seguí mi camino.
Llevaba conmigo 20 euros, pero me negué a pedir un taxi, necesitaba caminar, despejar un poco la mente y tratar de calmar mis emociones, y necesitaba ahorrar.
Aun no estaba tan segura de que hare en Ohio, si me aceptan claro, pero trabajare en algunas cafeterías y cosas por el estilo para poder costearme alguna que otra comida extra y ropa si la necesito, también los libros y cosas de la universidad.
Al llegar a la cafetería, abrí la puerta de cristal haciendo sonar las campanillas, algunas personas se fijaron en mí, pero trate de no darle importancia a aquello y camine hacia el mostrador mirando los diferentes cafés y bebidas que podría comprar.
––Hola, buenos días––saludo un chico quien se encontraba aun con la cabeza baja guardando el dinero––¿que desea... comprar?––sonrió al verme, sonreí amigable, y tenía que admitir que el tipo era guapo, mucho.
––Hola, un café con leche por favor––sonreí y mire las galletas y pasteles que se encontraban enfrente en una vitrina iluminada por una luz amarilla––y dos galletas de jengibre.
––enseguida, ¿para comer aquí?––pregunto.
––claro.
Después de esperar la orden, el chico me la entrego con una sonrisa y me miro de manera coqueta con aquellos ojos verdes.
Ojos verdes...
Tome la orden algo aturdida por mi pensamiento y decidí sentarme, ¿por qué ojos verdes, porque tenía que coquetearme con la sonrisa un tipo de ojos verdes?
¿Como estará Harry?, no sé porque me acuerdo de él––pensé molesta conmigo misma y tome asiento junto a la ventana para empezar a comer.
¿Que estará haciendo...
¡Basta _____!, me prometí no recordarlo, pero hacerlo todas las noches es inevitable, y aun no he dejado de ver sus fotos en Facebook, me siento tan tonta, pero lo extraño tanto.
Narra Harry:
––bien bien, ya basta––gruñí y Liam me miro molesto––¿por favor?
––lárgate Harry, ya llamaste al lugar y confirmaste que es realmente un orfanato, ¿qué haces aquí todavía?, ve a buscarla.
––quiero que me acompañes.
––pensé que eras un hombre, Styles.
––Me volví mariposa hoy––rodé los ojos pero tenía que admitir que ver a _____ no era fácil ahora, no ahora que se lo que siento por ella y ya la perdí, no después de que me dijera que me odiaba y que se fuera, y ahora que se donde esta se que no querrá verme.
––ahora eres gay.
––Si me rechaza voy a culparte a ti––lo apunte con el dedo––y te golpeare.
––No puedes hacerme eso––rodo los ojos.
––lose, y gracias––gruñí y me subí a mi auto, ¿debería llevarle flores o uno de los tantos marcos que tengo con fotos de nosotros en mi habitación?––Liam, ¿qué le llevo?
––joder me estar hartando, solo lárgate, se tu mismo––me grito––oh espera no, te odiara.
––a veces no sé porque eres mi amigo, te detesto.
––Seguro esta por besarse con un muchacho––se encogió de hombros––llegaras tarde a apartarlos, hablo enserio––se burlo, lo mire con cara de pocos amigos y encendí el auto para irme.
––púdrete.
––Suerte––se rio y me aleje.
***
Suspire con fuerza y baje del auto, me estoy comportando como un tonto enamorado y yo no lo soy, así que trate de calmarme y dejar de comportarme así, era Harry Styles.
Lo tenía bajo control.
Toque la puerta dos veces y deje mis manos en los bolsillos de mi chaqueta negra, esperando que alguien me abriera.
––hola––me abrió una mujer mayor de algunos 50 años, o eso parecía––¿desea algo?
––busco a una chica, creo... creo que es aquí.
––¿a quien busca?
––_____ Evans, ¿ella está aquí?
––ella trabaja aquí, si, ¿quién es usted?
Fruncí el ceño, no era que me gustaba hablar con las personas y menos con esa señora que no conozco que solo me interroga.
––¡Señora Moon!––una voz chillona se escucho detrás de la puerta––emm, la necesitamos adentro, hola––saludo la chica de pelo negro y baja estatura.
––¿se encuentra _____ aquí?, la busca este joven.
––no, salió hace rato a comprar un café––me miro la chica fijamente––espera... ¿eres Liam?
––Si––mentí mirándola fijamente.
––¿Quien?––alzo una ceja la señora sin entender nuestra conversación.
––es un amigo de _____, por cierto, olvide decirle tus saludos.
––¿puedo esperarla aquí?
––Es un orfanato, no una sala de espera, lo siento––hablo la mujer con dureza y se fue, dejando a la chica enfrente de mí.
––No es así, al parecer no le agradaste––hablo refiriéndose a la mujer––_____ está en Starbucks, tres cuadras hacia la izquierda, por si quieres ir a buscarla.
––gracias, ah... ¿Sara?
––Claro––rodo los ojos y sonrió falsamente, trate de no darle importancia a eso y me subí en mi auto, dando vuelta en U buscando aquella tienda de cafés.
Narra _____:
Pedí prestada una revista y me quede leyendo después de haber bebido dos cafés, quería pasar el tiempo en algo y tratar de distraerme.
El chico del mostrador me había dado su nombre y me había pedido mi número, le explique que no tenía teléfono y me pregunto que donde vivía, le dije que no lo conocía y volví a sentarme, es un chico lindo, pero que pena que sea un mujeriego.
Deje la revista encima de la mesa por si a alguien le interesaba leer, gire instintivamente hacia el mostrador y aquel chico coqueto me guiño el ojo, hice una cara de confusión y trate de no darle importancia, así que camine hacia la puerta sin prestarle atención.
––¡Hey!––levante la cabeza por el llamado de él chico pero antes de que pudiera reaccionar la puerta de cristal se abrió pegándome en la cabeza, haciéndome caer desprevenidamente al suelo.
Me toque la cabeza sintiendo el dolor recorrerme la zona, mire mis manos y pude ver un liquido rojo entre mis dedos, estaba sangrando...
Alce la vista algo aturdida y sentí como se mi corazón se aceleraba en segundos, mis labios quedaron entre abiertos mientras aun me encontraba en el suelo y la sangre era más evidente en mi frente y el dolor más fuerte.
––No quiera que nos encontráramos así.
Holaaaa chicas, espero les guste el capitulo, sin más que decir, bye.