Un Inesperado Nosotros

By AndreaSmithh

122K 19.2K 8.7K

¿Y si es muy tarde para empezar de cero? Cuando Gia Davies se muda a Nueva York, está huyendo. Se ha dado cue... More

S i n o p s i s
P r ó l o g o
· U n o ·
· D o s ·
· T r e s ·
· C u a t r o ·
· C i n c o ·
· Seis ·
· Siete ·
· Ocho ·
· Nueve ·
· Diez ·
· O n c e ·
· D o c e ·
· T r e c e ·
· C a t o r c e ·
A d r i e n
· Q u i n c e ·
· D i e c i s é i s ·
· D i e c i o c h o ·
· D i e c i n u e v e ·
· V e i n t e ·
· V e i n t i u n o ·
· V e i n t i d ó s ·
· V e i n t i t r é s ·
· V e i n t i c u a t r o ·
· V e i n t i c i n c o ·
· V e i n t i s é i s ·
· V e i n t i s i e t e ·
· V e i n t i o c h o ·
· V e i n t i n u e v e ·
· T r e i n t a ·
· T r e i n t a & U n o ·
· A d r i e n ·
· T r e i n t a & D o s ·
· T r e i n t a & T r e s ·
· T r e i n t a & C u a t r o ·
· T r e i n t a & C i n c o ·
· T r e i n t a & S e i s ·
· T r e i n t a & S i e t e ·
· T r e i n t a & O c h o ·
· T r e i n t a & N u e v e ·
· C u a r e n t a · (FIN)

· D i e c i s i e t e ·

2.6K 443 136
By AndreaSmithh

🎶 Marjorie 🎶

"Never be so kind, you forget to be clever"


A medida que pasan los días me siento más cómoda en esta nueva vida. Ya soy capaz de mantener una jornada entera de trabajo sin tropezar con los patines y he memorizado todo el menú del Roller Burger. En casa las cosas son mejores. La relación con Adrien ha mejorado desde que decidimos ser amigos y llevarnos bien, aunque...

No hemos vuelto a poner la almohada en medio de los dos para dormir. Podría verse como algo positivo (porque, ¿qué hay de malo en dos amigos que comparten cama solo para dormir?), pero me he despertado en más de una ocasión durante la noche por más sueños en los que Adrien se cuela. Estoy empezando a sospechar que es mi subconsciente tratando de decirme algo, pero no quiero hacerle caso.

Primero de todo, Adrien es el mejor amigo de mi hermano. Está completamente fuera de los limites.

Segundo, es mi compañero de piso. Aunque solo sea un arreglo temporal, es primordial tener una buena relación, y para eso necesitamos ser meramente amigos. Los sentimientos solo darían problemas.

Tercero, no quiero involucrarme de forma romántica con nadie, no estoy preparada. Quizás valoraría tener algo físico, pero nunca antes lo he probado y no me atrevo a lanzarme en estos momentos. He tenido un novio formal durante cuatro años, no sé lo que es acostarse con alguien sin tener un vínculo emocional fuerte.

Ahora solo tengo que hacer el esfuerzo de ignorar los mensajes y llamadas de Carson. En algún momento tiene que captar el mensaje. Además, Nueva York es una ciudad muy grande. Que él venga no significa que vayamos a encontrarnos, ¿verdad? Ni siquiera sabe dónde vivo o trabajo. No sabe nada de mi nueva vida.

Puedo respirar tranquila.

—Gia, ¿puedo hablar contigo un momento?

Dejo la comanda de bebidas a Rachel, que parece haber venido al trabajo con las energías totalmente renovadas, y me acerco a Beth en la caja. Cuando llego a su lado se inclina para no hablar muy alto. Parece nerviosa.

—El otro día, cuando te ofreciste a cuidar de Sophia... —comienza—. ¿Lo decías en serio?

—Claro que sí. ¿Necesitas que lo haga?

Aprieta los labios y juguetea con sus dedos.

—La niñera me ha fallado para mañana por la noche. Entiendo que una noche libre en viernes es una faena, y si no puedes o ya tienes planes yo...

—Puedo hacerlo —la interrumpo.

Poso las manos sobre sus hombros para que se calme porque a medida que me ha pedido el favor se ha ido poniendo más nerviosa. Sigo siendo la única que no trabaja en las cenas, aunque presiento que de seguir así no tardarán en añadirme.

No sabría decir si la idea me gusta o no. Aprecio poder ganar más dinero pero el trabajo es sumamente cansando. Sin embargo, hasta que no sepa que hacer con mi vida, el Roller Burger es mi única conexión con el mundo exterior.

Quizás debería empezar a hacer algún deporte, como Adrien. Cuando vuelve de pádel tiene aspecto de cansado pero también parece muy contento.

—¿Estás segura?

—Mi plan era ver una película de dibujos con palomitas, así que me viene perfecto.

Sus ojos brillan en agradecimiento.

—A Sophia le encantan las películas de dibujos —me informa.

—¡Perfecto! Que me haga una lista que ya tenemos planes para este viernes.

De verdad no me importa echar una mano a Beth con su hija. Mi madre también recibió ayuda de nuestros vecinos, en especial cuando Gabriel y yo éramos todavía pequeños. Sé lo mucho que se agradece.

Además, Beth es lo más cercano que he tenido a una amiga en los últimos años y... me importa.

RONAN: Te tengo muchísima envidia, a mí se me da fatal cocinar. He estado comiendo arroz cocido durante los últimos tres días porque calculé mal la cantidad.

GIA: Eso suena fatal. Un día te vienes a casa y te invito a cenar.

RONAN: Y así nos conocemos en persona. Quiero decir sin que haya distancia, de balcón a balcón.

GIA: Suena muy bien.

Nuestras conversaciones han aumentado los últimos días. No diría que seamos amigos, solo vecinos cordiales. A diferencia de Beth, no le he contado mucho sobre mi vida, pero es agradable y cuenta muchas anécdotas de su gato Nigiri.

—¿De verdad tienes que irte ya? Por una vez que estamos todos...

Me muerdo la lengua para no reírme ante la cara de perrito triste que acaba de hacer mi hermano. Guardo el teléfono y doy un sorbo a mi zumo natural para disimular. Por una vez no me lo dice a mí, sino a Adrien. Ha quedado para jugar un partido de pádel y tiene que irse.

—Mejor vernos cinco minutos que nada.

Mi hermano suspira y baja la cabeza con aire de tristeza. Si soy sincera siempre ha sido un poco dramático.

—En eso tienes razón —acaba por ceder.

Estamos en una cafetería que hay cerca de su casa y que tenía ganas de probar. A mi lado Adrien termina de apurar un café. Por lo que ha dicho es el cuarto del día, porque ya desayunó uno y se tomó dos en el trabajo. A veces pienso que tiene un problema de adicción a la cafeína fuerte.

—¿Cómo os va con el nuevo proyecto? ¿Lo han aprobado ya?

—Estamos en negociaciones —responde Finn. Su tono es calmado pero puedo captar toques de nerviosismo—. Esperamos saber algo antes de que acabe el año.

—Ojalá salga.

—Pues sí, porque ganaríamos un gran aliado.

Notó mi teléfono comenzar a vibrar en el bolsillo de los pantalones. Lo saco con curiosidad

para encontrar una llamada entrante.

Es Carson.

De nuevo.

Adrien carraspea a mi lado y me decido a apagar el teléfono antes de guardarlo en el bolsillo. Los chicos siguen hablando pero apenas los estoy prestando atención. Necesito un momento para volver a conectar, así que me disculpo y levanto de la silla.

—Voy a por un cruasán, tenían muy buena pinta. ¿Alguien quiere algo?

—Sí, otro para mí, por favor —pide Finn.

Asiento y me alejo de ellos, con el cerebro completamente embotellado. Si sigo así, jamás conseguiré pasar página.

A medida que me acerco al mostrador juego con la idea de bloquear el número de Carson. Dado que ignorarlo no funciona, es lo más natural. Sin embargo, por alguna razón, no termino de hacerlo.

Entonces me doy cuenta por qué no puedo hacerlo. Es una tontería, es algo que no debería ya afectarme, pero... Tengo miedo de que Carson se enfade todavía más si lo descubre.

Ignorarlo es más fácil que directamente actuar contra él una vez más.

Lo sé. Estoy totalmente jodida.

Cuando regreso con los dos cruasanes Adrien ya está de pies y colocándose la enorme mochila que lleva a pádel en la espalda.

—La siguiente me quedo más, lo prometo —le dice a los chicos y luego se vuelve hacia mí—. Nos vemos, polilla.

Me guiña un ojo en una despedida totalmente inocente y que no haría sospechar nada de nuestra renovada relación de amistad a mi hermano y a Finn. Sin embargo, sí hace que se revuelva mi corazón, que aletea como si el guiño hubiese sido un mensaje especial dirigido hacia él.

Tomo sitio de nuevo y comienzo a mordisquear mi comida. Ha sido una buena idea comprarlo porque está delicioso.

—Bueno, Gia —comienza a decir mi hermano mientras me ve comer—. Cuéntanos, ¿qué tal en el trabajo?

—Muy bien, ya patino como una profesional.

No puedo evitar que mi voz destile orgullo. Tuve un comienzo horrible, pero mejoré mucho sobre la marcha.

—¿Te tratan bien tus compañeros? —Presiona.

—Sí, son muy simpáticos. Y creo que una de ellas, Beth, podría decirse que es mi amiga.

Noto que se me encienden las mejillas cuando digo esto. Quizás suene un poco infantil, pero me encanta la idea de volver a tener amigas.

—Eso es genial, Gia —me apoya Finn.

—¿Y los demás? ¿Hay quizás algún chico? ¿Alguien interesante?

—¿Algún chico? —Repito despacio, pensando que no lo he escuchado bien. Pero Gabriel asiente y abro los ojos atónita—. ¿Me estás preguntando en serio si estoy saliendo con alguien?

Frente a mí, Finn saca su teléfono del bolsillo a toda prisa y fija la mirada en la pantalla como si hubiese recibido un mensaje sumamente importante.

—No sé por qué pareces tan sorprendida —finge ofenderse, con ese aire dramático suyo—. Como hermano mayor solo trato de preocuparme por ti.

—Pero hace apenas unas semanas que dejé a mi novio, yo no... —dejo la frase en el aire y sacudo la cabeza—. Jamás me has preguntado por chicos, ¡ni yo a ti! ¿A qué viene ese interés?

Gabriel y yo echamos una guerra de miradas, pero es él quien pestañea primero y al final acaba por admitir:

—Sé que has estado hablando con Carson.

—¿Cómo sabes que....?

Pero la respuesta llega sola.

Adrien.

Mi primer sentimiento es el enfado. ¡Sabía que había visto los mensajes y las llamadas! No tenía derecho a contarle nada a Gabriel. ¿Por qué lo hizo?

Sin embargo, también me entra la duda. Mi hermano no sabe que vivimos juntos. Para él, ni siquiera nos vemos más allá de las pocas veces en las que quedamos juntos, como esta. ¿Cómo se lo ha explicado?

La respuesta viene a mí ante la confusión en mi rostro.

—Antes de irse nos ha dicho que ha visto una llamada de Carson en tu teléfono.

Y eso ha bastado para hacer saltar las alarmas en Gabriel. ¿Qué diría si supiera la verdad? Que no deja de escribirme y mandarme mensajes, pero yo nunca le contesto.

—Gia, ¿has vuelto con él?

—No.

Pretendo que mi respuesta sea tajante y directa, pero está claro que la conversación no ha terminado aquí, porque Gabriel extiende un brazo sobre la mesa hasta tomar mi mano. La aprieta para transmitirme confianza y continua.

—No pretendo meterme en tu vida, es tu decisión. Solo quiero saber si es así, por si necesitas hablar con alguien o quieres apoyo o... No sé. No entiendo que sucede en tu vida, pero quiero estar en ella, hermanita.

—Te estoy diciendo la verdad, Gab. No he vuelto a hablar con él, mucho menos hemos regresado.

—Entonces, ¿con quién estabas mandándote mensajes antes?

Tardo unos segundos en procesar que se refiere a Ronan.

—Con un amigo, un chico que vive en frente —sacudo la cabeza y tomo aire para no perder la paciencia—. Si Adrien vio una llamada de Carson en mi teléfono es porque está intentando ponerse en contacto conmigo, pero yo no quiero hablar con él.

—¿Quiere hablar contigo? —Pregunta, pero su expresión cambia drásticamente en cuanto se da cuenta de algo más—. Un momento, ¿no te estará acosando el muy capullo?

A Gabriel nunca le ha gustado Carson. Según él, lo caló desde el primer momento. Aún así nunca en estos años se entrometió. Solamente preguntaba para asegurarse de que estaba bien y feliz. Como si sospechase algo.

—Supongo que no asimila que ya no estamos juntos —respondo en un susurro.

—¿Con cuanta frecuencia te llama?

Me revuelvo incómoda en el asiento.

—Al principio, cuando llegue aquí, apenas un par de mensajes a la semana.

—¿Y ahora? —Presiona mi hermano.

—Intenta llamarme todos los días, aunque los mensajes no son tantos.

Aparto la mano y me encojo de hombros. Finn baja el teléfono y por fin vuelve a mirarlo. En sus ojos también hay preocupación pero cuando habla me dice lo siguiente muy serio:

—Si está molestándote deberías bloquearlo. Gia, lo que está haciendo ese chico es acoso y es un delito.

Abro mucho los ojos ante sus palabras. Acoso es una palabra con mucho peso, y Carson no es así. Él nunca haría algo que fuese contra la ley.

¿Cómo estás tan segura, Gia?

—Yo no... —comienzo a musitar.

Me quedo callada al ver la preocupación latente en ambos rostros. Estos dos chicos se preocupan por mí. Me han visto crecer.

Pienso en Gabriel. En como literalmente me rogó que me quedase con él y no me mudase a mi propio piso, pero terminó por respetar mi decisión. Nunca le di la llave que me pidió y no volvió a insistir. Me escribe y llama para preguntar cómo estoy pero no lo hace tan a menudo que pueda agobiarme.

Me quiere, y justo por eso respeta mi espacio.

—Está bien, tienes razón. Debería bloquearlo.

Tomo el teléfono y lo poso sobre la mesa mientras se enciende. Los chicos me miran y siento los segundos eternos hasta que por fin la pantalla se ilumina y funciona. Entro en la lista de contactos y bajo hacia la C para encontrar a Carson. Sin embargo, cuanto más cerca está, más despacio se mueve mi dedo sobre la pantalla. Y cuando llego a las palabras "bloquear contacto", directamente se para.

Trago saliva y miro a mi hermano. No dice nada, pero está allí apoyándome. Quizás sea que no me siento sola, o simplemente que quiero hacerle ver que estoy bien aunque a veces ni yo misma me lo creo, pero tenerle a mi lado me da la fuerza necesaria para bajar el dedo y bloquear a Carson.

—Bueno, pues ya está —exclamo con un gran control de mi voz aunque por dentro tiemble—. Y ahora, ¿podemos cambiar de tema? Me perdí toda la conversación sobre ese nuevo proyecto que tenéis entre manos.

Finjo una gran sonrisa que espero que funcione. Es Finn quien se inclina hacia delante y comienza a hablar.

—Estamos a punto de cerrar un trato con unos nuevos inversores. Si les gusta puede que en el futuro tengamos ofertas muy buenas.

La conversación continua y esta vez procuro poner plena atención, aún cuando noto un nudo en el estómago. Me concentro en mantener a Carson fuera de mi mente.

"Lo he bloqueado del móvil y de mi vida", me digo a mí misma.

Y ojalá fuese así de fácil creérselo.

Continue Reading

You'll Also Like

271K 6.2K 11
[CHILENSIS] [HISTORIA EN EDICIÓN] ¿Quién diría que la Raquel iba a terminar sintiendo cosas por un hueón que conoció en el metro? "No sabía que te g...
37.8K 3.6K 24
Kou quedó frustrado por no poder salvar a Mitsuba. Eso lo llevó a cometer un gran error. Mientras todo esto sucede Kou empezará a conocer más a Mitsu...
16.5K 688 37
todo tiene un comienzo y un fin, aquí está el comienzo de todo...
278K 15.4K 68
En inglés: Friendzone. En español: Zona de amigos. En mi idioma: Mi mejor amigo me mira como a su hermanita y jamás de los jamases me verá como alg...