P.O.V Darwin
Gema se quedó de piedra al escuchar las palabras de su madre.
- Los demás podéis abandonar el salón -añadió la reina de Eldim- , esta es una conversación que me gustaría tener a solas con mi hija.
Me quedé un poco decepcionado, ya que desde luego que quería saber quién demonios era la Señora Colorines. Y descubrir los secretos de la pequeña. Ya que, desde luego, lo suyo no era normal. Siempre parecía saber más cosas que los demás respecto a Harliam, dibujaba cosas siniestras y la poseían. ¿Deberíamos recomendarle un psiquiatra?
Josh y Naomi fueron los primeros en dejar la habitación cogidos de la mano, e intentando no resbalar con el hielo. Los siguientes fueron los hermanos de Rose, Annabelle, Grace y Fanny, que se habían hecho muy amigos al parecer. Harry y Maddie les siguieron y me quedé en la habitación solo con los padres de Rose y Gema, que estaba temblando un poco.
La niña echó a correr hacia mí, pero se ve que no se acordaba del hielo, porque tropezó y se pegó la culada del siglo.
- Auch -gimió mientras se frotaba el culo-, eso me va a dejar un buen moratón.
Sus padres se levantaron con muecas preocupadas, aunque la reina parecía estar suprimiendo la risa, pero yo ya estaba cogiendo en brazos a Gema y haciendo desaparecer los restos de hielo del salón. Matt me miró agradecido.
- No quiero que Darwin se vaya -exigió la niña a sus padres mientras me rodeaba el cuello con sus pequeños brazos. Su madre alzó una ceja en su dirección al escuchar el tono que había utilizado-. Es mejor que él se quede, ya que lo que os voy a contar le incumbe mucho.
Me congelé en mi sitio, mientras los reyes de Eldim compartían una mirada. ¿Qué nos había estado ocultando Gema? Comparé a la niña con sus padres mientras nos sentábamos en unas sillas mullidas. Gema era un réplica de su madre pero con unos ojos verdes brillantes, heredados de su padre. También tenía la sonrisa de Matt y algunos gestos. Una mezcla perfecta.
- Respondiendo a tu primera pregunta, la Señora Colorines es más conocidas por su nombre verdadero, Eldim -Gema dijo sin saber el efecto que había tenido esa revelación sobre nosotros-. La Señora Colorines es sólo un estúpido mote que le puse porque es muy colorida. Tiene el pelo de un color azul eléctrico muy bonito, ¿sabéis? Y sus ojos le cambian de color. Cuando me visita casi siempre son verdes, como los míos. Aunque su piel es un poco rara por su tono rosado...
- Espera un momento - le cortó su madre, que estaba más pálida de lo normal-, ¿Eldim?
- ¿Eldim es una persona? -pregunté sintiéndome tonto- ¿No es simplemente el nombre de la dimensión?
- ¿Si Eldim no fuera una persona de dónde te crees que salieron las Damas? -añadió el padre de Rose con un tono que indicaba que era obvio.
- Papi, no vayas muy de listillo, porque tú tampoco lo sabes todo.
A su madre el comentario le pareció gracioso, pero a él se ve que no.
- Pues más que tú sé, jovencita.
Pero hasta yo estaba empezando a dudar eso. Gema negó, sacudiendo su pelo, irguiéndose en su asiento.
- No, vosotros sabéis lo que la abuela os ha contado -repuso ella-. No la historia completa.
- ¿Estás diciendo que nos ha mentido? -inquirió la reina de Eldim con las cejas levantadas.
- No -contestó cautelosamente Gema-, simplemente os ha ocultado un poco de información.
- Ilumínanos entonces, hija mía. -dijo su padre con una sonrisa sarcástica.
- Bueno, empezaré desde el principio. Si Eldim es una persona corpórea, Harliam también lo es ¿no? Pues lo más normal es que al ser las dos únicas personas en la otra dimensión aparte de la Tierra, que en ese momento no tenía nombre, se enamorarán. Eldim se quedó embarazada primero de los Señores de Fuego y Oscuridad, y al tenerlos, crearon otra dimensión para criar allí a los niños. Pero cuando tuvieron a las Damas de Fuego y Oscuridad decidieron criar a los niños y a las niñas separadas para que no hubieran discusiones. Eldim se quedó con las niñas en la primera dimensión, la que se llamó Eldim, y Harliam se quedó con los niños en la que se llamó Harliam. A medida que iban teniendo más hijos los separaban en las dos dimensiones con cuidado de que no se enteraran de la existencia de los otros.
Los padres de Alex y yo nos miramos entre nosotros con los ojos como platos. ¿Cómo era posible que Gema supiera todo eso y nosotros no?
- Cuando ya fueron lo suficiente responsables y mayores, Eldim y Harliam les dejaron solos en las dimensiones para que gobernaran según sus propias reglas. Eldim creo a las Cortes fijándose en los elementos de sus hijas para que no estuvieran solas, pero Harliam no creó Cortes para que los chicos aprendieran a apañárselas por sí solos. Luego las Cortes de las Damas viajaron a la Tierra donde tuvieron descendientes que trasladaron a Eldim y empezaron a poblar la dimensión. Lo mismo hicieron los Señores en Harliam. Lo demás ya lo sabéis, decidieron elegir a alguien para que gobernara y ganó el Fuego en las dos dimensiones. La Oscuridad se rebeló y llegó la Primera Guerra...
- Vale -interrumpió la reina, que volvía a estar muy pálida. Su marido le pasó un brazo por los hombros para reconfortarla, aunque parecía igual de escéptico-. ¿Pero cómo iba a saber tu abuela lo de la otra dimensión y que Harliam es su padre? Eldim y Harliam tuvieron mucho cuidado para que no se enteraran, según parece.
Yo me sentía un poco fuera de lugar y mareado, pero Gema sonrió.
- Porque cuando se hizo reina, Eldim la visitó para contárselo, al igual que Harliam se lo contó al Señor de Fuego. Aunque no podían comunicarse, nadie de las dos dimensiones había podido comunicarse entre ellos. Hasta que aparecieron Rose y Darwin.
Sus ojos se posaron en mí un momento y enrojecí. Yo no era especial, no podía serlo. ¿Qué tendría yo que ver con todo esto? Luego sentí unaunzada de dolor en mi estómago al pensar en Rose. Ojalá estuviera aquí con nosotros, todo sería menos complicado. Y yo podría abrazarla y decirle que la quería. Y volver a estar juntos.
- Vale -Matt se masajeó las sienes como sí le estuviera dando dolor de cabeza-, en primer lugar, ¿a qué te referías con que Eldim te visita?
- ¿La ves en persona? -añadí , simplemente para meterme en la conversación.
Gema negó con la cabeza y se subió al regazo de su padre. Su madre comenzó a cepillarle el pelo color fuego, pero la miraba con nerviosismo y preocupación. Como su padre. Como yo.
- En persona sólo la he visto una vez -contestó Gema-, no le gusta mucho ser corpórea a los ojos de los demás.
Vale, eso no ha tenido nada de sentido para mí, que le sacó por lo menos once años a la niña, pero si ella se entiende...
- Ella me visita en sueños.
Su madre giró la cabeza tan rápido hacia ella que debió hacerse bastante daño en el cuello, a parte de parecer un poco como la niña de El Exorcista.
- Explícate.
- No es como si se presentara en mis sueños y tomáramos el té -contesta la niña rodando los ojos-, es más como si ella controlara mis sueños para que vea lo que ella quiere que vea. Cosas que aún no han pasado, pero que van a pasar. A veces hablo con ella, pero tiene prohibido decirme algo directamente o ayudarnos.
- Un momento -interrumpo ahora yo- , ¿Eldim te enseña un trozo del futuro? ¿Cómo si fueran sueños proféticos?
- Exactamente.
Sus padres se miraron entre ellos como si tuvieran ganas de desmayarte.
- ¿Cómo que tiene prohibido decirte algo directamente?
- A ella y a Harliam se les tiene prohibido intervenir directamente en el futuro de las dimensiones, por lo que me manda como indirectas de lo que puede pasar a modo de sueños. Luego yo lo dibujo para que no se me olvida, pero hay veces que no sé interpretarlo o que no tiene sentido.
- ¿Desde cuándo esta pasando lo de los sueños? -pregunta su padre firmemente.
- Desde hace poco más de un año. -admite tímidamente la pequeña.
- ¿Y por qué no dijiste nada?
- Yo también lo tenía prohibido hasta que llegáramos a Harliam. Iba a contároslo pero luego Eldim se metió en mi cuerpo para recitar la profecía a Rose y cuando me desperté Rose ya no estaba y os lo iba a contar...
Gema empezó a llorar. Su padre la abrazó y, la verdad, yo también temblaba un poco. ¿Eldim se metió en su cuerpo? ¿Eso no podría dañarla? ¿Y por qué tiene que ser Gema la que tenga los sueños?
- No pasa nada, cariño -le aseguró su madre con la voz rota-. No pasa nada.
Pero sí que pasa. Podríamos haber evitado muchas cosas. Claramente no era culpa de Gema, la verdad esque estaba un poco cabreado con Eldim y Harliam. Aunque ellos tampoco podían hacer nada. Así que me enfado con los Oscuros, porque son los que tienen la culpa.
- ¿Nos enseñas algunos de tus dibujos? - le preguntó dulcemente su madre.
Gema, un poco más calmada, asintió y se levantó del regazo de su padre. Luego me miró directamente a los ojos.
- Será mejor que tú también vengas. -me dijo.
Con un escalofrío, los seguí escaleras arriba hacia la habitación de Gema. Con suerte, no nos cruzamos a nadie para no dar explicaciones. Ya hablarían los padres de Gema con los demás luego.
Entramos por la puerta de madera y la habitación estaría perfecta si no fuera por el lío de dibujos que había puestos en la pared. El primero que su madre cogió fue el de unos elaborados ojos violetas. Parecía mentira que los hubiera dibujado una niña de seis años.
- Parecen los ojos de Sombras. -murmuró la reina de Eldim. Matt la besó en la mejilla para tranquilizarla. De nuevo, volví a extrañar a Rose.
- Son los ojos de los Oscuros -afirmé-. Todos son así porque están bajo el
control mental del Señor Oscuro o porque los han heredado de padres que estaban bajo su control. El único que no los tiene violetas es el Señor Oscuro...
- Que los tiene dorados -acabó la frase ella. Me pregunté como lo sabía y me acordé de que ella había tenido que luchar contra la Dama Oscura.
Con esa frase todos pensamos lo mismo. Ojos dorados como Rose. Pude deducir por sus muecas apenadas que ellos también querían tenerla de vuelta ya.
Siguieron examinando los dibujos. El de la rosa congelada azul, el del lago que estábamos Rose y yo...
- ¿Qué significa este?- su padre señaló al de la corona rota.
- Ni idea -se encogió de hombros Gema-, si lo supiera os lo diría. La mayoría no entiendo lo que significan y no van en orden cronológico. Pueden pasar cuando les da la gana, así que...
Su padre miró con el ceño fruncido al dibujo.
- De todas formas -continuó la pequeña- , ese dibujo se nombra también en la profecía de Eldim. Además...
- Espera un momento - interrumpió su madre. De verdad que le gusta interrumpir a esa mujer-. ¿Qué profecía?
- ¿No te lo contó Rose? - preguntamos Gema y yo a la vez.
- Rose se guarda muchas cosas par ella misma , se ve. -contestó mirándome significativamente. Me sonrojé un poco, lo admito.
Gema le contó el motivo por el que se desvaneció hace unos días y le recitó la profecía de memoria. Por las caras de los reyes de Eldim, parecía que se estuvieran llevando muchas sorpresas desagradables hoy. Mirando dibujos, distinguí unos que me llamaron la atención. En uno se me veía claramente a mí, en el suelo nevado sujetando un movil con la cabeza gacha. Ese fue el día de la desaparición de Rose.
En otro se me a mí llevando en brazos a Rose, que tiene un mueca de dolor en el rostros. Parece ser el día que huimos de los Oscuros y peleamos después de que apareciera Naomi. En otro estamos yo en un bosque con nuestras manos entrelazadas y las otras echadas hacia delante, concentrados. Eso aún no ha pasado, creo, así que eso significa que voy a volver a verla. Tiene que ser eso. Me siento por primera vez esperanzado desde que Rose desapareció.
De repente, Gema se apoyó en la pierna de su padre para no perder el equilibrio. Se le veía pálida.
- ¿Qué te pasa? -le preguntó su madre con ansiedad.
- Necesito que me traigáis un folio y un lápiz. Ya . - ordenó. Su madre chasqueó los dedos y aparecieron de la nada. Wow. Quiero aprender a hacer eso.
Rápidamente, Gema se puso a garabatear en el folio. Los trazos comenzaron a tomar forma del perfil de una cara que conocía bastante bien. Rose. En el dibujo llevaba el pelo recogido en un moño y se le escapaban rizos por la mejilla. Tenía miedo, por la expresión de su cara. Gema continuó dibujando unos brazos que la agarran por detrás, como para impedir que escape. Lo último fue otra mano acercando una copa a la boca de Rose. Para terminar, le dio un toque azulado a la bebida que contenía la copa.
Los tres nos miramos mientras Gema resonaba y soltaba el lápiz.
- No sé si esto ha pasado ya, si está pasando ahora mismo, si pasara en un futuro próximo o si pasara en un futuro muy lejano. -dijo Gema, agotada.
- Pues espero que no pase o que no haya pasado aún. -comentó la reina más pálida que la pared de la habitación.
- ¿Por qué? -pregunté, aunque no quería saber la respuesta.
- Porque es la Poción del Olvido -contestó casi llorando-, y si Rose ha bebido eso significa que se ha olvidado de nosotros. Completamente.
Supe que teníamos que encontrarla ya, antes de que me olvidara. No me podía olvidar. No podía. No... Y me desmayé, delante de los padres de mi novia desaparecida que podía no acordarse de mí.
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Hola lectores :3
Aquí tenéis el capítulo 4, espero que os siga gustando mi historia y que os haya gustado este capítulo. Y que la espera haya valido la pena.
Bueno, ¿qué os ha parecido?
Por fin se explica más a fondo la historia de las dimensiones y los sueños de Gema. Pobrecita, haré que se coma algunas chuches XD
El siguiente capítulo vamos con el punto de vista de Rose otra vez. Intentaré actualizar más rápido, lo prometo.
Sí tenéis alguna duda escribir un comentario o un mensaje privado. Siempre respondo. :)
Gracias por los votos y todos esos fantásticos comentarios que dejáis. Os amo lectores❤️
Hasta el próximo capítulo
~Gem_bc~