Louis despertó sintiendo que algo había cambiado en su cuerpo.
Se levantó y caminó hacia el espejo que había en la habitación, se detuvo enfrente y observó su cuerpo. Su pancita había crecido un poquito y era más notable con la camiseta que tenía puesta, giró un poquito dándose cuenta que sería difícil de ocultar a no ser que utilice prendas más grandes en la oficina.
Después de un mes de quedarse en la casa de Harry para cuidarlo ya era tiempo de volver al trabajo después de que Harry ya se siente mejor. Aún le dolía el hombro pero su herida en el abdomen ya se veía mejor así que habían decidido regresar juntos a trabajar.
Harry le había insistido mucho al omega para que regresara al trabajo pero Louis se había negado a dejarlo solo.
El omega se puso unos pantalones deportivos ya que los otros no le quedaban y lo último que quería era dejar marcas en su pancita. Decidió usar un suéter que le pertenecía a Harry para esconder su pancita por un poco más de tiempo. Cumpliría cinco meses de embarazo en tres semanas y aún no se sentía listo de darle explicaciones a nadie.
Cuando estuvo listo salió de la habitación viendo que la la puerta de Harry estaba abierta pero el alfa no se encontraba adentro. El omega se había adueñado de la habitación de invitados desde que Harry salió del hospital, el alfa le había dicho que se sentiría más cómodo en su casa pero Louis no quiso. No podía irse y dejar a su alfa solo después de lo que había pasado en Italia.
Bajó los escalones con cuidado y caminó hacia la cocina encontrando a Harry sentado en una silla y bebiendo café. El alfa estabas vestido con un traje impecable que hizo que las hormonas del omega se alteraran.
"Buenos días Louis." saludó Harry levantándose en cuanto vio a omega entrar. "¿Quieres desayunar?"
"Buenos días Harry." respondió Louis sentándose en la primera silla que encontró. "No tengo hambre."
"Está bien." dijo Harry ya que aveces el omega amanecía con náuseas y era mejor no darle hasta que se le pasaran. "¿Estás listo para irnos?"
"Si." dijo Louis bebiendo el agua que el alfa le pasó. "Mi pancita creció un poco más y tengo que llevarme esto."
"Si quieres podemos ir a comprar ropa más tarde." dijo Harry dándole una mirada a su reloj. "Tengo una reunión a las dos con algunos ejecutivos así que podemos ir después de eso."
"Eso suena bien." dijo Louis mirando al alfa y sintiendo su cuerpo muy caliente. "Deberíamos irnos."
Harry asintió acompañando al omega afuera de la cocina. Solamente se detuvo para agarrar su maletín, sus llaves y su teléfono. Los dos salieron de la casa con Harry mirando a todos lados, los vidrios de su auto estaban polarizados pero aún así sentía que llevar a Louis con él era un enorme riesgo.
Abrió la puerta y ayudó al omega entrar para luego rodear el auto y entrar. Se puso el cinturón de seguridad y prendió el motor del auto.
"Harry, relájate." dijo Louis después de ver lo rápido que respiraba el alfa. "Todo esta bien."
"Tengo miedo de perderte." admitió Harry poniendo el auto en marcha. "Charlie aún no está en prisión así que aún puede hacerte daño."
"Jhonny averiguó que él está en Washington. No tienes nada de que preocuparte." dijo Louis queriendo que su alfa se relajara.
"Podría seguir en Londres." dijo Harry mirando al omega brevemente. "Por eso quiero que te quedes en casa de tus padres. Ya debe de haber averiguado mi dirección, no tarda mucho en que alguien se presente."
"Pero quiero estar contigo." dijo Louis con sus ojos llenos de lágrimas. "Me dejaste y me mentiste. Podrías volver a hacerlo y no quiero volver a pensar en que habías..."
El omega detuvo su hablar cuando una lágrima bajó por su mejilla.
El alfa se estacionó a un lado de la carretera cuando vio al omega llorar. Se quitó su cinturón de seguridad y también hizo lo mismo con Louis para luego atraerlo a su regazo.
"No volveré a dejarte o mentirte. Lo prometo." dijo Harry pasando sus manos por la espalda del omega. "Lo único que quiero es que tú y nuestro bebé estén a salvo. Y no lo estarás si sigues conmigo."
"Prométeme que no me dejaras de nuevo." sollozó Louis con su rostro escondido en el cuello del alfa. "Te necesito, nuestro bebé te necesita."
"No te dejaré. Lo prometo." dijo Harry dejando un beso en la cabellera del omega. "Pero tienes que hacerme caso. No puedes seguir quedándote conmigo, estarás más seguro en la casa de tus padres."
"Está bien." aceptó Louis cerrando sus ojitos. "Tengo hambre."
"Entonces vayamos a buscarte algo para que comas." dijo Harry viendo que el omega no se movía.
Harry no quería soltarlo de sus brazos porque sabía que su omega se sentía seguro y a salvo.
¿Cuánto tiempo duraría eso?