The Black House: Amor y Vampi...

By JhoannyElizabeth

14.1K 515 29

The Black House (casa negra) está habitado por dos familias de vampiros los Anderson y los Scharrier. Liderad... More

Prologo
Introducción
capítulo 1
capítulo 2
capitulo 3
capitulo 4
capitulo 5
capitulo 6
capitulo 7
Capitulo 8
capitulo 9
capitulo 10
capitulo 11
capitulo 12
capitulo 13
capitulo 14
capitulo 15
capitulo 16
capitulo 17
capitulo 18
capitulo 20
capítulo 21
Capítulo 22
capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Epílogo

capitulo 19

224 10 0
By JhoannyElizabeth

Zachary Scharrier entró a la recámara de Elizabeth con el propósito de tomar una cuarta parte de su poder mientras ella se encontraba inconsciente. Camino lentamente por los pasillos, hasta llegar al pasillo que dividía la gran casa, lo pensó un poco antes de cruzar para después dirigirse hacia el gran pasillo que daba a las recámaras. Respiro profundo y cruzó, él mismo había roto su regla: "No cruzar el pasillo a menos que sea sumamente necesario, queda prohibido para un Anderson cruzar hacia la mitad Scharrier y viceversa"

Bueno la regla decía: "a menos que sea sumamente necesario" él cruzaba por algo necesario, cruzaba por poder después de todo, un poco de poder era necesario. O quizá si algún Anderson lo veía y preguntaba por su intromisión a la mitad Anderson diría que iba a ver a Elizabeth porque Joseph le había encargado eso, o quizá ya inventaría una muy buena excusa.

Camino por el largo pasillo iluminado con pequeños faroles que emitían una tenue luz, miro puerta tras puerta antes de encontrar la recámara de la chica, parecía que no había nadie por ahí, el lugar se encontraba casi vacío y desolado. ¿A dónde habrían ido todos los Anderson? Pasó frente a la puerta del despacho de Joseph, aquel antiguo despacho que antes compartían él y su hermano Edward. Un soplo de nostalgia atravesó su mirada, resopló furioso, no podía permitirse sentir tristeza por un simple recuerdo, odiaba a su hermano, lo odiaba ¿por qué lo odiaba? No sabía pero lo hacía, él ya no era más un Anderson ahora era Scharrier y así se quedaría. Meneando la cabeza negativamente continúo con su camino hasta toparse con la habitación de Elizabeth.

Abrió la puerta lentamente, viendo la cama en donde se encontraba dormida la chica, acostada entre muchos almohadones. Al entrar se encontró con Sam durmiendo en uno de los sofás, no se esperaba que hubiera alguien con ella. Cerró la puerta de golpe, provocando que Sam despierte y al verle frunció el ceño, Zach no pudo descifrar si estaba molesto o sorprendido.

-¿qué hacéis aquí?- cuestiono Sam, su instinto protector salía a la luz.

-yo solo venía a ver a Elizabeth...- respondió Zach nervioso, ¿nervioso? ¿Estaba nervioso? Jamás en la vida se había sentido nervioso o intimidado, de la manera en la que Sam lo intimidaba con la mirada, era él mismo quién intimidaba a otras personas, no había quién a él lo intimidase, y ahora ya había quién lo hiciera pero ¿por qué? ¿Por qué sentía miedo? Un nuevo sentimiento para la caja de Zach: miedo.

-¿a verla? ¿Por qué?- cuestionó Sam con una mirada incrédula poniendo más nervioso a Zach, Sam podía sentir su miedo, sabía que lo intimidaba y eso le gustaba.

-inventa algo Zachary- se dijo Zach así mismo. Sam simplemente lo miró como si estuviese adivinando sus pensamientos, Zach tragó en seco.

-sí, eh mi buen parecido sobrino me mando a que viera si estaba bien o no.-respondió Zach esperando que Sam le creyese y saliese de la recámara y así él pudiera quitar el poder de ella.

-¿por qué no te creo?- respondió Sam burlonamente.

-no lo sé. ¿Por qué no queréis creerme?- respondió Zach intentando jugar con su mente.

-será porque estás mintiendo.- respondió Sam de manera firme y sin titubear.

-no lo estoy.- respondió Zach.

-oh no, si lo estás. ¿Cómo Joseph pudo mandarte a ver a Elizabeth si me ha mandado a mí desde que la encontramos que la vigilase día y noche como un perro guardián.- respondió Sam.

-oh, creo que porque sois un perro guardián.- respondió Zach.

-no, soy un lobo no un perro, hay mucha diferencia entre un lobo y un perro, en primera porque sonaría mal el término: Canántropo.- respondió Sam inventando su palabra.

-bueno quizá si haya muchas diferencias entre un lobo y un perro pero de igual forma pareces un perro.

-¡ay claro que no!- respondió Sam.-un perro es un animal doméstico, un lobo es un animal salvaje a quién gusta de libertad.

-ya vez como si digo que parecéis perro, quizá seas un licántropo u hombre lobo pero parecéis perro, eres fiel a la amistad de Elizabeth y Joseph al igual que un perro, si os gustase la libertad tú y vuestro hermano no estarían aquí en Casa Negra vigilándolos.

-soy fiel a su amistad así como ella lo es con la mía. Con Joseph solo hay una buena comunicación y es por esa chica.-respondió Sam señalando a la cama en donde la chica se encontraba.

-como sea, igual sigo pensando que eres como un perro.- murmuró Zach, Sam frunció más el ceño y bufó.

-puedes retirarte, no sé qué es lo que buscas aquí.-dijo Sam.

-no voy a retirarme.- exclamo Zach.

-ay por favor, entonces ¿qué es lo que buscas?

-¿yo? Nada.- respondió Zach.

-¿estás seguro de que nada?- cuestiono Sam con la mirada incrédula.

-sí.- respondió Zach, estaba nervioso nuevamente, no podía permitir que Sam descubriese el verdadero motivo de su visita.

-entonces, si no vienes a buscar nada, puedes retirarte.-sentenció Sam.

Zach abrió la boca para protestar, pero Sam lanzándole una mirada fulminante logró intimidar aún más a Zach haciendo que este asintiese y se retirase del lugar.

Zach salió de la habitación, lanzando blasfemias contra Joseph qué puso a un protector para Elizabeth, y maldijo a Sam por intimidarlo solo con la mirada.

-Simplemente tenía que ser, tenía que ser... - farfullo Zach con la mirada más fría que tenía mientras caminaba hacia su parte de la gran casa.-Mi "grandioso" sobrino Joseph tuvo que ponerle un guardián a su queridísima Elizabeth, lo más probable es que él supiera de mis intenciones, pero él no sabe lo que quiero así que ha de ser imposible. No sé cómo pudo poner a un tonto perro-lobo como guardián. ¡Ay Joseph! De la que te vas a arrepentir al igual que ese Sam. Todos se van a arrepentir, todos.

-¿Qué es lo que murmuras tanto Zachary?-preguntó Stefany que se encontraba en la recámara de este.

-¿qué hacéis aquí?

-no sé, pasaba por aquí y me pregunté si no necesitarías un masajito.

-no necesito nada Stefany.-gruño Zach.

-vamos Zach, tu cama se ve un poco ordenada ¿qué te parece si la desordenamos? Quizá así se pase tu mal humor.

-no Stefany.

-pero Zach.

-nada Stefany, no estoy de humor para nada ¿entiendes? O es que tu lento cerebro no lo capta.- gruño Zach apuntando la cabeza de ella con uno de sus largos dedos.

-no es eso Zach, quiero compartir unos momentos contigo.

-pero yo no, y si ya habéis terminado por favor os pido que os retiréis porque no estoy de humor ni para ver tu cara.

-Zach me ofendes.- exclamo Stefany con cara de incredulidad.

-¿ah sí?- respondió irónico Zach.

-sí-. Dijo ella en un susurro.

-pues me parece que esto es justo lo que debí decir hace siglos.

-¿cómo te atreves?-gritó ella.

-me atrevo porque tengo que decírtelo.-contesto él de la misma forma.

-pero Zach.- exclamo ella.

-¿ahora qué?- cuestiono él quién estaba sentado en su cama con la cabeza hacia abajo, sus manos tomaban su cabeza mientras apoyaba sus codos sobre sus rodillas.

-¿Tú me quieres?-pregunto ella con voz suave.

-no lo sé.-respondió él suspirando pesadamente.

-¿cómo que no lo sabes?- preguntó ella con el corazón hecho trizas ahora.

-Stefany, creo que es el momento de que sepas la verdad.-suspiró él.

-¿qué verdad?-preguntó ella con la cara asustada, lágrimas amenazaban de salir de su rostro, ella a pesar de ser mala, de no tener un corazón digno ni bondadoso, a pesar de ser una ramera en sus tiempos de juventud tenia sentimientos ocultos hacia Zach, ella lo quería y creía que él la quería de la misma forma. Ella sentía su corazón cobrar vida cada vez que lo veía caminar con ese porte tan varonil que él poseía, sus ojos negros la volvían loca, su mirada hacia que corriera entre sus venas una corriente, como un río que iba de ida y vuelta por todo su ser, sin embargo, no se imaginaba que algún día, el hombre que tanto amaba a pesar de sus defectos, a pesar de ser malo, a pesar de que la trataba mal, a pesar de todo, iba a romperle el corazón como lo estaba haciendo en ese instante. Zach suspiro profundamente, ella no aguantó más, una lágrima rodo por su mejilla, él solo torció la boca haciendo una mueca de dolor, quizá porque no le gustaba verla llorar aunque no la amase.- ¿qué verdad Zachary? Dímela ahora.

-solo te utilicé Stefany, de verdad lo lamento.

-¿cómo?- cuestiono ella incrédula, más lágrimas corrían por sus mejillas, sentía su corazón pararse, el mundo se congeló por un instante, dejó de respirar. No había nadie más, la habitación había desaparecido, solo estaban ellos dos. Sus miradas conectadas y aunque ahí no había ni una pizca de amor una extraña corriente los invadía, la corriente en ella corría cada vez más rápido, en su piel se sentía el clavar de pequeñas agujas, y sentía su corazón siendo acuchillado lentamente hasta dejar simplemente trozos muy pequeños de este. El río en sus venas había desaparecido, ahora una corriente de fuego recorría su ser.

-Stefany, yo...-suspiró Zach.- cuando te conocí, eras una mujer de cabaret, de esas que andan noche tras noche ofreciéndose a los hombres, quizá no lo recuerdes porque borré tu memoria, yo no quería que recordarás nada de tu vida pasada y te traje aquí a Casa Negra conmigo y te utilicé.

-Zachary...- murmuró ella entre un ligero sollozo,- cuéntame la historia completa de mi pasado.

-¿estáis segura?- preguntó él, si bien no la amaba sentía compasión ahora por ella, a pesar de mantenerse en su postura rígida y fría.

-sí. Por favor.-suspiró ella, él asintió.

-Te conocí en la noche del 4 de mayo de 1726, había salido a dar una vuelta por el pueblo... habiendo discutido con Joseph sobre la muerte de mi hermano Edward, quería despejarme de todo y de todos, camine por las calles oscuras del pueblo, todos estaban dormidos. Mientras andaba un grupo de jóvenes me hablo diciéndome: "Hey tío ¿a dónde vais?" les conteste que andaba perdido, entonces me dijeron "¿queréis acompañarnos a un club?" fui con ellos, anduvimos por las calles como almas en pena, hasta llegar a una pequeña casa que estaba muy poca iluminada por fuera, pero por dentro había luces tenues por doquier, gente que fumaba cigarrillos en las esquinas, muchachas con muy poca ropa andando por el lugar como si nada les importase, unos cuantos más bebían cerveza de caña o vino en los rincones, al parecer para esa época eso era a lo que llamaban club y había de ser uno clandestino por la poca iluminación que tenía y para mí eso era bueno. Bebí un poco del alcohol que los chicos esos me habían ofrecido, y justo cuando ya no me hallaban completamente bien te apareciste. Me preguntaste que qué había pasado conmigo y que si me encontraba bien, titubeé en palabras diciendo sí. Me preguntaste si tenía a donde ir, respondí que no, y fue ahí cuando caí desfallecido. Despertamos en tu cabaña, no traíamos nada encima más que una pequeña manta, me levanté como pude, suspiré y te vi. Estabas hermosa y no recordaba cómo te encontré, la verdad no recordaba nada, como un reflejo recordé simplemente aquella discusión con Joseph, mi hermano le había dejado a cargo a sus entenados, y a mí me había dejado a mi suerte sin nada ni nadie, todo se lo dejó a Joseph, entonces deseé venganza, tenía que formar mi propia descendencia, tenía que construir lo mío por sí solo, tenía que pelear por una parte de la casa y solo no iba a poder. Un dolor de cabeza me atacó, entonces volví a verte, me sentía débil y me acerqué a tu cuello y absorbí un poco de sangre de la misma, recuperé mis fuerzas. Tenía que recordar que había pasado la noche anterior así que te quité la memoria para quedármela yo. Justo cuando iba a salir de la casa, despertaste. Me preguntaste como me encontraba, sonreíste. No respondí, estabas pálida y me di cuenta que era por el veneno que te había incrustado justo cuando te quité un poco de tu sangre. Teníamos que hacer algo. Me ofreciste algo de comer, recordaste a tus hijos, unos adolescentes que vivían de ti y de vuestro trabajo como pecadora, sentados los cinco en la mesa, te sentiste más débil aún.

Me puse pálido, vuestros hijos asustados os preguntaron si os encontrabas bien; sonreíste y dijiste que ya pasaría, me miraste y preguntaste por mi nombre. "Zachary Scharrier" respondí. "qué lindo nombre" dijiste con una hermosa sonrisa. La debilidad en ti volvió y por instinto atacaste a uno de tus hijos, al mayor: a Dylan, luego este mordió a James y James atacó a Tom convirtiéndose todos en lo que yo era: un vampiro. A Tom le ofrecí beber de mi sangre puesto que si no bebía algo moriría. Ustedes ya no podían seguir viviendo en su pequeña casa, el pueblo no podía enterarse de lo que ahora eran, iban a ser marginados, o condenados por brujería, inclusive podían haber muerto y me pensé en traerlos conmigo, los convertiría en mi familia, así que les di mi apellido Scharrier, desde entonces estas aquí conmigo.

-¿habéis terminado?

-sí.

-bueno, me iré.

-¿A dónde?- preguntó Zach alarmado.

-de aquí, moriré.

-Stefany, sois inmortal.

-eso lo sé. Por favor cuida de mis hijos.-respondió ella con un último suspiro saliendo de la gran recámara.

Zach respiro calmadamente, aunque no la amaba sentía una gran pena por aquella mujer que había estado con él durante muchos siglos, lo había apoyado, lo había escuchado, le transmitía amor a través de caricias todas las noches cuando ambos estaban en su cama. Sentía pena por aquella mujer que fue sumisa con él, ahora es cuando se daba cuenta que ella solo lo hacía por ayudarle y nunca lo había notado, suspiró. Ella volvió por la puerta, él alzó la mirada, ella se acercó tímidamente en su cabeza se debatía entre hacer lo que planeaba o dejarlo así.

-Lo siento Stefany.- murmuró Zach, ella hizo una sonrisa en forma de mueca, se acercó más a la cara de él y le dio un pequeño beso en los labios, transmitiéndole así el amor que le tenía, él le devolvió el beso.

-Te amo.- murmuró ella bajando la cabeza.

-gracias por todo Stefany.

-Adiós Zach.- asintió ella saliendo nuevamente por la puerta.

-adiós Stefany, te quiero.- susurró Zach, lo dijo todo demasiado tarde, ella ya se había marchado.

Stefany Scharrier, camino lentamente por los pasillos de la gran Casa Negra con la cabeza baja, limpiándose pequeñas lágrimas que corrían por sus mejillas.

Zach, suspiro pesadamente, se había dado cuenta que la quería, la quería porque estaba agradecido con ella, agradecido porque lo soporto varios siglos, años, meses, días y horas, la quería porque siempre estuvo ahí para él, y si se iba ¿quién estaría apoyándole? No podía alejarla, tenía que detenerla.

Stefany, entró a la cocina. Su cara empapada demostraba que no se encontraba bien, Katherine la vio al ver su rostro no quiso preguntar simplemente la miró y la abrazó.

-sea lo que sea estarás bien.- le dijo en un susurró, Stefany asintió. Katherine se fue dejándola sola, Stefany alcanzo la alacena tomando un frasco de concentrado de ajo, lo destapo el aroma le dio nauseas, suspiró y recordó las palabras de Zach "Lo siento Stefany" solo un lo siento y nada más.

-Adiós Zach.- susurró ella una vez que estaba en la puerta de Casa Negra, salió y cerró la puerta.

Zach, salió de su cuarto desesperado, se sentía culpable del corazón roto de Stefany. "Los Vampiros no tienen sentimientos" recordó las palabras de su padre el gran Conde Anderson, el mejor vampiro de toda la historia, un hombre frío y sin corazón, sin compasión y había educado a sus dos hijos de la misma forma, sin embargo Edward se enamoró y Zach omitió dichos sentimientos hasta ahora.

Ahora lo único que sentía era culpa, tristeza, desesperación y miedo. No podía perder a Stefany, no podía.

-Katherine ¿habéis visto a Stefany? - Preguntó Zach cuando se topo a Katherine por los pasillos.

-sí, la vi en la cocina, se veía muy mal la pobre.-respondió Katherine.

-no tenéis alguna idea de donde puede estar.- preguntó Zach desesperado.

-no.

-Kathy usa tus poderes con ella.

-no puedo hacer eso.

-Vamos por favor, no quiero perderla me he dado cuenta de que la quiero.

-¿de verdad?- preguntó Katherine incrédula.

-sí.

-¡vaya! eso es nuevo.- exclamó Katherine.

-¿qué?-preguntó Zach

-El gran sir Zachary Scharrier al fin quiere a alguien.- se burló Katherine.

-¿os burlarás de mí o me ayudarás?- preguntó Zach fastidiado.

-vale, vale, haré lo mejor que pueda.- suspiro Katherine. Cerró los ojos para volverlos a abrirlos nuevamente, estaba en trance sus ojos quedaron blancos, Zach suspiró exasperado, tenía que saber rápido donde se encontraba Stefany, antes de que fuera demasiado tarde. Katherine cerró los ojos nuevamente, Zach la miró esperando una respuesta, Katherine bajo la cabeza.

-¿qué?- preguntó Zach desesperado -¿qué viste?

-ella está en el lago.

-Bien gracias iré por ella, tengo que decirle que la quiero.- exclamó Zach con una pisca de esperanza.

-¡No Zach!- exclamó Katherine.

-¿No? ¿Por qué? Si ella tiene que saberlo.- preguntó Zach.

-Zach...- suspiró Katherine.-ella está en el lago, pero no está viva.

Zach sintió romperse sus esperanzas, todas las que tenían se habían esfumado, "no está viva" esa frase le cayó como balde de agua fría, la noticia le golpeo y pateo el estómago con fuerza.

-¿cómo?- preguntó Zach con los ojos aguados, quería llorar. Jamás había llorado, por nada ni por nadie, no estaba hecho para eso, sin embargo ahora, estaba ahí reprimiendo un dolor.

-Ella está muerta, al parecer ingirió un frasco de concentrado de ajo, y su cuerpo sin vida cayó al lago, la corriente del río está llevándose su cuerpo. ¿Estáis bien?

Zach palideció aún más al escuchar lo que le había sucedido.

-Gracias Kathy.- suspiró Zach, caminando de vuelta a su recámara. Era tarde la había perdido y para siempre.

Continue Reading

You'll Also Like

1.1M 129K 8
¿Y si nada terminó con la pregunta? «¿Damián?, ¿quién es Damián?» Eso es lo último que Padme Gray recuerda, junto al hecho de que despertó de nuevo...
1.3K 129 9
Soap pierde a una de las personas más importantes en su vida,para el la penumbra es la única fiel compañía que lo abraza,hasta que llega una persona...
5.7K 240 33
los personajes que voy a usar son de brawl stars,slendytubbies,piggy,doors,welcome home y etc.
6.2K 403 28
En el futuro Bia:No podemos dejarlos aquí el mundo se va a acabar Celeste: Tengo una idea pero no si funcione . . . .. . . ... Carmín : FUNCIONO . ...