Abrí mis ojos paulatinamente al sentir las cálidas manos de Jared recorriendo mi espalda descubierta. Levanté mi cabeza de su pecho para poder observar todavía somnoliento rostro.
-Deberías ser así de salvaje más seguido- dijo ladeando una sonrisa traviesa.
-¿Ahora retiras lo dicho?-
-No- rió mientras se incorporaba en la cama.
-¿Que? - me crucé de brazos- ¿Así que te sigo pareciendo inocente?
-Siempre serás mi bella inocente - él recorrió mi labio inferior con su pulgar-
Rodé los ojos- ¿Soy yo la que es muy inocente o eres tú el muy pervertido?
-Tú eres muy inocente-
-Bueno tampoco eres un santo Leto-
Acorté la distancia con él haciendo que nuestros labios se rozaran cada vez que las palabras salían de nuestras bocas.
-¿Cómo que no soy santo? me comparaban con Jesús cuando tenía el pelo largo - él rodó sobre mi quedando encima de mi cuerpo acorralándome contra la cama - Digamos que físicamente parecía Jesús pero en la cama era Satán-
- Tú lo has dicho- le di un breve beso en sus labios y giré mi cabeza hacia un costado.
Cole estaba parado a un lado de nuestra cama sosteniendo un cuchillo en sus manos. Su gélida tez lucía más pálida de lo normal.Sus ojos celestes se posaron en mí con una mirada fría y malévola. Jugaba con el arma blanca pasándola de una mano a otra sonriendo levemente.
-¿Vas a matarme?- un nudo se formó en mi garganta.
-No, no lo haré- se acercó más a la cama donde ambos yacíamos acostados. Jared se alejó de mí tomando el cuchillo que Cole le estaba otorgando en sus manos.
-Yo lo haré- con un grito, Jared me clavó el cuchillo en el tórax provocando que lance un bramido de dolor.
Desperté sudando en frío y temblando cual papel. Miré en todas las direcciones para buscar señales de Cole pero no había nadie allí.
Él sol todavía no se había asomado y Jared se encontraba durmiendo a mi lado como si nada hubiera pasado. Era todo un sueño, una maldita pesadilla.
Me recosté a su lado acurrucando mi cabeza en su torso. Pasé una mano por su cintura y lo tomé con fuerza, eso me daba cierta sensación de seguridad y protección sentir su calor tan cerca de mi cuerpo. Tenía miedo que mi sueño se convirtiera en realidad y que Cole apareciera de esa forma en medio de la noche.Sabía que no era bueno desearle la muerte a nadie pero en el caso de Martinsson, se la deseaba fervientemente.
A la mañana siguiente bajo las escaleras para encontrarme con Jared el cual estaba sin camisa sobre la mesada de la cocina con su celular en la mano.
-Hola- Dije tímidamente.
Él levantó la cabeza con el ceño fruncido como si hubiese algo que lo estuviese molestado, forzó una sonrisa y volvió a poner sus ojos en el IPhone.
-¿Estas bien? - Me subí a la mesada a su lado recostando mi cabeza sobre su hombro.
-No no lo estoy, mira esto- me entregó su celular y presionó la flecha que se encontraba en la pantalla para dar comienzo al video.
Era Cole. Se estaba filmando a si mismo en un cuarto blanco con las paredes deterioradas y sucias.
-Quiero felicitarte por haberle propuesto matrimonio a esa perra que tienes como novia, fue tan romántico de tu parte- hizo una pausa y se aclaró la voz- Nos vemos pronto - dijo en un tono cómico aunque no me pareció nada gracioso.El conciso video concluyó dejando una llama de furia creciendo en mi interior.
Jared revoleó el celular contra la pared haciendo que este estalle y de destroce en pedazos y caigan al suelo provocando distintas variaciones de sonidos, algunos más graves y otros más agudas y suaves.
-Todos piensan que mi vida es de color de rosas porque soy famoso, tengo dinero, chicas,familia. Pero no es así.Mi vida es una mierda. Supuestamente la vida se trata de disfrutar todas aquellas cosas que poseo, pero no lo hago - unas lágrimas se escurrían por sus mejillas.
Lo rodeé entre mis débiles brazos tratando de contenerlo. Su cabeza se posó sobre mi pecho mientras sollozaba.
De tan solo verlo llorar mi alma se partía en dos¿ quien podía resistir verlo llorar de esa manera?
Luego de unos minutos de silencio Jared tragó grueso y se secó las últimas lágrimas que se encontraban en su rostro - ¿Me acompañas a la casa de Shannon? Debo hablar sobre esto con él- se bajó de la mesada con una expresión seria - Lo llamaría pero mi teléfono esta algo roto- señaló su IPhone hecho trizas que yacía en el suelo.Una pequeña curva se formó en sus labios en un intento de sonrisa.
Arribamos en la entrada del hogar de Shannon y aguardamos en la puerta de metal la cual se abrió a los instantes luego de nuestra llegada. Jared estacionó el auto a penas ingresamos al sendero que conducía hasta la casa de Shannon. Nos bajamos y caminamos hasta la puerta blanca que poseía detalles en dorado.
Shannon abrió la puerta y nos recibió con un cálido abrazo. Sus brazos eran tan tonificados que llegaba cierto punto que me dolían sus cariñosos abrazos.
- ¿Qué los trae aquí?- Shannon preguntó cortés.
Jared sin decir una palabra lo tomó del brazo ingresando a la lujosa morada. Les seguí el paso pero Jared me frenó - Hablaremos un largo rato Megan. Tendremos que hacer unas llamadas y otras cosas más para resolver este infierno interminable.Si quieres puedes esperar afuera de la sala- Se volteó adentrándose dentro de esta pero interrumpí su caminata.
-¿Y qué? ¿Yo no puedo ir? -crucé de brazos a la altura del pecho.
-No quiero que te sigas preocupando tanto. Recorre la casa,échale un vistazo-
-¿Y si no quiero? - pregunté algo desafiante.
Él se acercó impaciente a mi oído- Se que lo harás Meg -
Usó un tono de voz grave y extremadamente seductor.Juraba que estaba odiando aquella facilidad de hacerme caer ante sus pies con tal rapidez y simpleza. Pero finalmente accedí y dejé que él se dirija a la sala para hablar con Shannon respecto a la amenaza que era Cole.
Comencé a mirar la fachada de la sala de estar. Shannon tenía un muy buen gusto en muebles de estilo vintage y decoración que hacía juego con el empapelado color crema.
El sonido de ni celular hizo que me distrajera y deje de apreciar aquel cuarto. Saqué el aparato del bolsillo del pantalón.
-¿Hola?- atendí.
-¿Hija puedes explicarme qué fue lo que ocurrió ayer a la noche? ¡Jared Leto re pidió tu mano y aceptaste! ¿Te has vuelto loca?- su voz colérica sonaba tras el parlante del celular
-Si madre, me he vuelto loca,loca de amor por él-
Pude sentir el gran suspiro que ella realizó - Él no es bueno para ti. No quiero que te rompa el corazón de nuevo.
-No lo hará- hice una pausa- Pasamos por muchas cosas juntos.Cosas en las cuales nuestras vidas estaban en peligro y otras vidas...se desvanecieron- mordí mi labio inferior- Lo amo y quiero estar con Jared. Y ni tú ni mi padre van a detenerme, tampoco me van a cambiar de parecer, así que es en vano tu intento de convencerme de que lo deje.
-Nunca lo dejaste de amar, lo sabía. Me lo negabas pero yo sabía que tu corazón lo seguía eligiendo no importa qué pasara. No estoy de acuerdo con esta unión pero si decides casarte con él lo voy a aceptar. Solo quiero lo mejor para tí y que seas feliz.
-Gracias.Hasta luego madre debo cortar-
Colgué y me senté en el sillón a esperar.
Me alarmé al ver una sombra la cual se percibía en la pared que daba hacía las escaleras. La figura se movía lenta y sigilosamente.
-¿Hay alguien allí? - me arrimé a las escaleras. La sombra se detuvo. Apoyé un pie en el primer escalón de madera haciendo que esta cruja. Aquella silueta negruzca continuaba sin moverse así que continué subiendo con el corazón en mi boca.
-¿Quien eres?- Llegué al ante último escalón.Tomé coraje y salté hasta subir completamente las escaleras. No había nadie allí.
Pensé que tal vez había sido un producto de mi imaginación pero en ese momento dos frías manos me empujaron de las escaleras haciendo que ruede por estas y me golpeé la cabeza.
Cole baja los escalones con agilidad y me toma de mis cabellos castaños arrastrándome por la habitación. Escuchaba que él me hablaba pero no podía lograr entender qué era lo que quería decirme.
Jared y Shannon aparecen tras Cole ambos con sus rostros serios - Levántate- dijeron al unísono.
-¿Qué me levante? - respondí intentado ponerme de pie pero caí de vuelta.
- Despierta -Jared se acercó a mi. Sus ojos se tornaron rojo sangre y en su pecho llevaba clavado un cuchillo derramando sangre por su musculosa negra -¡despierta!- gotas de sangre comenzaron a fluir desde sus ojos hasta sus mejillas empapando su rostro.
Lancé un chillido agudo y comencé a mover mis manos de un lado al otro completamente alterada.
-¡Tranquilízate Megan! Amor esta bien, esta bien ya acabó- Jared se aproximó a mi y me rodeó entre sus brazos - ¿Una pesadilla no es así?
Me sentía confundida hasta que asimilé que me había quedado dormida y había tenido esa horrenda pesadilla. Era la segunda vez en un solo día que me sucedía esto ¿Acaso no iba a volver a dormir tranquila sin que esas pesadillas me atormentaran durante mi sueño?
-Si .Estoy bien -
-No no lo estas- Besó mi cuello clavando suavemente el vello de su rostro en mi epidermis y provocándome cosquillas- Este tema de Cole te esta afectando mucho linda. Bueno en verdad nos afecta a todos-
-¿Quieres que te diga algo?- Preguntó Jared tratando de animarme con una bella sonrisa.
-Dime-
-Te recomiendo que vayas a comprar un precioso vestido de novia si es que quieres lucir preciosa para nuestro casamiento el jueves -
Abrí mis ojos como platos - ¡¿El jueves?! Jared esto generalmente se planifica con mucho tiempo de anticipación-
-Tranquila ya lo había planeado hace tiempo- guiñó un ojo-Chloe te va a acompañar a comprar lo que te haga falta-
Una muchacha de pelo castaño y tez trigueña entra a la casa de Shannon. Ella llevaba puesta ropa bastante extraña, sus prendas no combinaban absolutamente en nada y eran demasiado extravagantes ¿ Ella era la que iba a elegir mi vestido?¿ En qué diablos estaba pensando Jared? La mujer usaba vestimenta bastante particular y no muy agradable para mi gusto. No iba a dejar que me vista, no señor.
-Chloe Kenner - ella extendió un brazo para saludarme con una expresión no muy contenta en su rostro.