Cuenta Jared:
Disparé en dirección a Magnus haciendo que él se desplome en el suelo. Cole salió corriendo a buscar a su hermano el cual yacía inerte en el suelo dejando una gran mancha escarlata.
Me levanté tomando a Megan la cual estaba anonadada por aquella escena y salimos fuera del lugar mientras Cole gritaba con su hermano en brazos -¡Los encontraré!-
Subimos a la trafic a tiempo antes que él hombre asiático nos alcanzara. Magnus había sido tan inútil de dejar las llaves puestas. Giré la llave y la camioneta se puso en marcha encendiendo los faroles traseros y delanteros. Pisé el acelerador con fuerza y escapamos de allí.
-Jared- Megan continuaba tiesa con los ojos abiertos como platos. Apenas había abierto la boca para hablar.
Le di una sonrisa calma- Tranquila estamos bien - ella se abalanzó a mí abrazándome con fuerza haciendo que pierda un poco el control del volante - Oye me duele - su mano había tocado mi espalda ensangrentada dejándolas teñidas del liquido carmesí.
-Disculpa - ella se apartó de mi volviendo a su lugar - Tenemos que ir a buscar a mis padres-
-Ellos seguramente están acompañados Megan ¿Cómo planeas enfrentarte a ellos?-
Ella encojió los hombros.
- Entonces improvisaremos.
Me detuve en uno de los semáforos a esperar que se torne verde nuevamente. Unas muchachas del auto de al lado me miraron atónitas dando agudos gritos.
-¡Es Jared Leto! ¡Oh por dios es tan bello!- dijo la pelinegra que se encontraba al volante.
-¡Te amo!- gritó la copiloto.
Alzé mi pulgar pero había olvidado que mis manos estaban manchadas con sangre lo que hizo que ellas frunzan el ceño con una mirada de asco.
-Es..eso es...- Una de ellas tartamudeó.
-Kétchup- dije rápidamente para intentar corregir aquel error. Ellas sonrieron y por suerte el bendito semáforo se puso en verde.
-¿Kétchup? ¿Enserio?- ella largó una risita.
Puse mis ojos en blanco-¡ Es lo primero que se me vino a la mente!
Llegamos a la casa. Di unos bocinasos y a los segundos dos hombres robustos, ambos de cabello castaño salieron del lugar.
-Pensé que iban a tardar más -dijo uno de ellos dirigiéndose a la parte trasera de la camioneta para entrar. Aprovechamos ese tiempo y salimos de la trafic introduciéndonos a la casa. Ellos se percataron y echaron a correr tras nuestro. Intentamos cerrar la puerta pero ellos estaban pateándola para abrirla.Nosotros ejercimos presión hasta poder cerrarla y trabarla.
-¡Mamá, Papá! - Megan gritó. Sus padres continuaban atados a las sillas ilesos, lo cual hizo que me sintiera aliviado. Desatamos sus manos y le quitamos las vendas de su bocas.
Un estallidó se escuchó fuera de la casa- Hay que irnos de aquí antes que rompan el vidrio por completo- dije señalando hacia los cristales que caían de la ventana.
John nos guió por la salida trasera que conducía al patio cubierto de grama y algunos juegos para niños viejos y descuidados.
Escuchamos que ellos entraron así que salimos corriendo a la trafic subiéndonos rápidamente. Él padre de Megan se había quedado atrás avanzando con dificultad - ¡¿Qué le sucede?!- grité.
-Ataque de Asma - exclamó Meredith agitando las manos.
Salí del auto y lo tomé por debajo de los brazos ayudándolo a subir a la trafic. Uno de los hombres me tomó de mi hombro y me arrojó al suelo apuntándome con el arma.
Megan salió del auto con un objeto en su mano y luego escuché un par de disparos. Quedé anonadado al ver sus cuerpos caer al suelo. Volteé.
Cada centímetro del cuerpo de Megan temblaba y su respiración era agitada y dificultosa.
Le quité el arma tirándola al suelo- Tranquila Megan ¿De dónde sacaste el arma? - fruncí el ceño.
-Adentro de la camioneta - dijo ella con su voz temblorosa que apenas podía ser oída. La tomé en mis brazos y subimos a la camioneta.
-¿Meredith sabes conducir?-
-Claro- dijo ella algo insegura poniéndose al volante. Lo que hizo preocuparme ya que posiblemente ella no era una buena conductora.
Una vez que llegamos nos bajamos de la camioneta.
-¡Shannon abre la maldita puerta!- grité a través del timbre.
Él abrió dejándonos pasar quedando pasmado al vernos.
-Necesita un inhalador Jared- Meredith y Megan estaban teniendo a John en el suelo al cual se le hacía cada vez más dificultoso respirar.
-Tengo uno- fuí a mi cuarto y se lo entregué a Megan. Él hombre comenzó a respirar normalmente.
-Gracias- Meredith me tomo del brazo como agradecimiento.
John y Meredith se quedaron juntos en el suelo un tiempo mientras platicaban.
-¡¿Jared qué te sucedió?!- Shannon gritó horrorizado al ver mi espalda.
-Nos secuestraron Shannon eso fue lo que pasó. Pero estamos bien ahora, tranquilo - él me abrazó haciendo que mi espalda duela como el infierno pero intenté no chillar.
-Necesitas que te curemos - Shannon miró a Megan -Trae el botiquin.
Ella hizo caso y fue a buscarlo entregándoselo a él. Mientras Shannon me curaba mi espalda Megan se fue a recorrer la casa sin prestarme atención alguna evitando hacer contacto conmigo. Posiblemente seguía enojada por haberla abandonado lo que fue algo realmente estúpido de mi parte.
-Terminé. Dentro de unos días se curará del todo-
-¿Ahora eres doctor?- bromeé. Él puso sus ojos en blanco.
-Jared estamos cansados ¿Podemos quedarnos aquí esta noche?- preguntó Meredith.
-Por supuesto- Dirigí a sus padres a mi habitación para que descansen. La noche había caído y estábamos todos exhaustos por este duro día.
Megan,Shannon y yo quedamos en la sala principal mientras el incesable silencio nos invadía.
Rompí el silencio-¿Sigues enojada?- Le pregunté a Megan la cual me ignoró. Eso significaba que si.
-¿Qué le has hecho Jared? - Shannon dijo poniéndose las manos en su cintura frunciendo el ceño.
-Yo...- Megan me interrumpió.
-¡Me abandonó eso fue lo que hizo!- ella se dirigió a la cuarto a paso ligero pero corrí tras de ella y la tomé del brazo derecho haciéndola girar sobre sus talones plasmando un beso en sus labios
