(Narrador Omnisciente)
El sol estaba por ocultarse, la pareja se observaba con amor desbordante, sus ojitos les decían a gritos todo el amor que existe uno por el otro, el brillo especial que existe en ellos y que nadie jamás podría destruir.
Jimin apreciaba la delicadeza de las facciones de su Alfa, tan varonil pero tan tierno, fuerte, rudo, pero todo un gatito mimoso, con ojos gatunos, labios delgados, mandíbula definida, pero a la vez tan adorable. Así era como el Omega describía a su amado.
Un Alfa rudo, varonil, pero gatito mimoso y tierno.
Mientras el Alfa observaba con profundo amor lo hermoso que es su ángel, su pequeño cachorro, su lindo Minnie. Tan adorable, pero con un perfil hermoso, sus labios gruesos y esponjosos, mejillas regordetas, ojitos brillantes y sonrientes, amando cada que estos se vuelven dos finas líneas al reír.
Yoongi podía describir a su amado Omega, como el ser más puro, adorable, hermoso y tierno del mundo.
- Si seguimos así, nos desgastaremos uno al otro - Dijo entre medio de bromas el Omega, robando un beso a los delgados labios del mayor.
- No importa eso amor, ¿Sabes cuánto amo poder apreciarte y decirte el hermoso ángel que eres? - Las palabras del Alfa siempre harían sonrojar al Omega, algo que amaba ver.
- Eres un romántico Yoon - Dijo sonriente el Omega - ¿Siempre fuiste así mi Alfa? - Y ahí estaba una de las cosas que Yoongi más amaba escuchar de su Omega.
Qué lo llamará mi Alfa.
- No, jamás, pero tú mi vida, tú logras sacar lo más cursi, romántico y tierno de mi, no me importa mostrarme así ante el mundo, porque solamente tú lo logras.
El Omega sonrió enamorado de su Alfa, se abrazó a él y oculto su rostro en el cuello de este, aspirando su delicioso aroma, relajándose y sintiéndose seguro en su lugar.
Mientras Yoongi abrazaba con calidez el menudo cuerpo de su pequeño Minnie, protegiéndolo y deseando mantenerlo en su pequeña burbuja de felicidad y amor.
- Eres mi lugar seguro en el mundo Yoon - Susurró el Omega.
El Alfa amaba cada que Jimin le decía aquellas palabras, ¿Cómo no estar enamorado de tan bello ser?
- Tú eres todo lo que está bien en este mundo para mí, mi amado Minnie.
Jimin sintió mariposas revolotear en su pancita, se aferró más al cuerpo de su Alfa y río bajo. Él es realmente feliz, tanto que sentía moriría de tanto amor y emociones increíbles cada que estaba cerca de su Alfa y eso implicaba, todo el tiempo.
- Yoonnie - Llamo el Omega.
- Dime cielo mío - Una vez más la risita del Omega hizo sonreír al Alfa, por siempre lograr hacer feliz a su pequeño.
- ¿Me dirás sobre el libro? - Preguntó el Omega.
Yoongi suspiró y asintió, quizá era el momento adecuado para hablar de dicho libro a su pequeño, había estado esperando el momento indicado, pero quizá sí, ese era el momento más indicado para contarle la verdad.
- Lo haré mi cielo, aunque no traje el libro - Dijo el Alfa, recordando ese detalle.
Jimin se levantó de su lugar seguro y cálido, escuchando el refunfuñar del Alfa, río una vez más por lo tierno que se escuchaba, no se cansaría de decir que Yoongi es un adorable gatito mimoso.
- Lo traje conmigo - Dijo el Omega, mostrando el libro.
Yoongi río y asintió, palmeando su regazo, invitando a su pequeño a sentarse una vez más. El Omega no dudó en hacerlo y tomo asiento sobre las piernas de su Alfa, prestando atención a libro entre las manos de este y en lo que su amado tenía por decir.
Mientras Yoongi, observó el libro y sonrió, era el libro que había terminado más rápido, el cual demoró unos días en escribir, editar y enviar a la editorial, siendo meticulosamente editado también por sus trabajadores.
- “Una vida junto a ti” - Leyó el Alfa, con una suave sonrisa en su rostro, siendo observado por su Omega.
- ¿Me explicas Yoon? - Pidió el menor, aún con mucha curiosidad.
- Este libro... Lo escribí yo - Dijo el Alfa, levantando la vista y conectandola con su Omega.
- ¿Tú? - Preguntó un sorprendido e incrédulo Jimin.
- Así es, yo soy August'D - El Alfa río cuando Jimin lo hizo también - ¿Por qué te ríes Minnie - Preguntó con gracia el mayor.
- Por qué no te creo Yoonnie, ya dime la verdad ¿Si? - Pidió el menor, aún riendo.
- Te estoy diciendo la verdad amor - Yoongi quería reír, no podía creer que su Omega no le creyera que él es el autor de dicho libro - ¿Por qué no me crees cielo?
- ¡Por qué eres perezoso hasta para levantarte e ir al baño Yoon! - Dijo obviando sus palabras el Omega.
Yoongi lanzó una carcajada realmente divertido. No podía creer que su Omega noble creyera que él es el autor de “Una vida junto a ti”, ¿Por qué no creerle cuando dice la verdad?
- ¿Cómo te demuestro que soy el autor amor? - Preguntó el mayor.
- Recitame alguna frase de alguna página del libro y te creeré Yoon - Reto el Omega, pensando que su Alfa no podría con ello.
- Bien, me parece justo - Acepto el mayor - Abre la página 40 - Jimin lo hizo - Justo ahí dice una frase que memorice muy bien.
- ¿Qué frase es? - Preguntó el Omega, observando la página que su Alfa le dijo.
- “Si vivo amándote día con día, una vida entera, ¿Por qué no amarte en esta y en todas?”
Recitó el Alfa, orgulloso de su cometido. Jimin abrió enorme sus ojitos al ver dicha frase incluso remarcado en negrita, resaltando perfectamente al centro de dicha página. Si, Jimin se sentía sorprendido de tener a su escritor favorito frente a él y que justamente esté fuese su amado Alfa.
- ¡Oh por la madre luna! ¡Yoonnie! - Grito Jimin, demostrando así su sorpresa - ¿En serio eres... August'D? - El Omega estaba asombrado.
- Lo soy y este libro lo escribí para ti, tiene solamente 50 páginas, es corto. Lo cree justamente para ti, desde el día en que te conocí y lo estuve trabajando en este tiempo - Aseguro el mayor.
Jimin tenía una hermosa sonrisa en su rostro, mostrando su lindo eyesmile. Observaba con adoración aquel libro, amando ver las iniciales de ellos dos grabadas y sobre todo la firma de su escritor favorito, que resultó ser su Alfa destinado.
- ¿Te gusta cielo? - Preguntó el mayor, al ver la sonrisa y emoción de su pequeño
- Me encanta Yoon - Se emocionó el Omega - En verdad... Es el mejor regalo que he recibido jamás - Aseguro el Omega - ¿Por qué no me lo dijiste antes? - Preguntó está vez el Omega.
- Estuve buscando el momento adecuado, aunque creo que te me adelantaste, pero justo pensaba dártelo en este viaje, aunque... Casi lo olvidaba, si tú no lo hubieras tenido entre tus manos cuando fui por ti, lo hubiese olvidado - Río divertido el Alfa.
- Eres un tonto Yoon - Río el Omega.
El menor abrazo con tanto amor a su Alfa que fue correspondido sin dudar. Ambos podían sentir el amor desbordar de sus corazones, ambos eran conscientes que sus sentimientos fluían por su lazo, por su conexión y nada les podía negar jamás, que su amor es totalmente real.
- Yoonnie - Llamo el Omega.
- ¿Mgh? - Susurró el Alfa, perdiéndose en el aroma de su pequeño.
- Te amo, ¿Lo sabías? - Preguntó el Omega.
- Lo sé mi cielo y no sabes cuánto te amo yo a ti - Respondió el Alfa, dejando un casto beso sobre el cuello de su Omega, justo en su marca.
Los minutos pasaron, ellos manteniendo la posición, aspirando el aroma del contrario y sintiendo sus corazones latir al unísono. Hasta que Yoongi recordó algo importante.
- Amor, te tengo otra sorpresa muy importante para nosotros - Dijo el Alfa.
- ¿Otra sorpresa? - Preguntó curioso el Omega.
- Así es, pero para ello, debemos llegar a un pueblo cercano a esta isla - Dijo el Alfa poniéndose de pie - Acomódate cielo, no tardaremos mucho.
Jimin tomo asiento, apreciando a su Alfa mientras esté se dirigía a la cabina para emprender camino hacía el pueblo que este había mencionado. El Omega abrió el libro y lo leyó una vez más, para después suspirar enamorado. Lo cerró y lo guardo muy bien entre sus cosas, no deseando que este se arruinará.
Observó el hermoso cielo mientras se acercaban al pueblo. Jimin fue testigo del lento cambio que hubo entre el día y la noche, el tiempo parecía ir lento, aunque no fuese así, algo que realmente encanto al Omega.
Cuando llegaron al pequeño pueblo iluminado, lleno de hermosos faros por cada lado, con gente alegre, bailando en las calles, riendo a carcajadas y un ambiente muy alegre.
Jimin se preguntó si ahí estarían, pues la idea le encantaba. Se sentía muy sonriente de solo ver a los demás. Sonreía con cada persona que le sonreía, Yoongi estaba satisfecho con su cometido y aunque no fuese ahí que estarían, sabía que ese increíble ambiente encantaría a su pequeño y no se equivocó.
- Estamos solo de pasó amor, la verdadera sorpresa nos espera cerca de aquí - Jimin hizo un puchero que fue besado por el Alfa, pero de igual forma, acepto lo que fuese que su amado haya preparado para él.
Unas calles más lejanas, se empezaba a ver el mar a lo que Jimin curioso quiso saber cuál es el verdadero lugar al que irían.
- ¿Dónde me llevarás Yoonnie? - Preguntó el Omega.
- Solo espera cielo, pronto lo sabrás - Respondió el Alfa.
Cuando llegaron, subieron a un yate mucho más pequeño, el cual solamente los transportaría hasta donde Yoongi había preparado la sorpresa para su amado Omega.
Jimin estaba confundido, habían dejado el enorme Yate, llevando sus cosas consigo y dejándolo en la isla, para transportarse en otro Yate hasta un lugar del cual solo Yoongi sabía, algo que tenía muy curioso al menor.
El Omega dormitaba sobre el hombro de su Alfa, no habían demorado más de 15 minutos, pero el menor se sentía hipnotizado por el delicioso aroma que su Alfa desprendía.
- Yoonnie - Llamo el Omega.
- Dime cielo
- Tú... - El Omega fue interrumpido por el Beta que los transportaba.
- Hemos llegado - Dijo este, a lo cual solo el Alfa logró entender.
La pareja bajo y el Beta se retiró, pues así eran las órdenes que había recibido. Jimin aún curioso observó al Alfa, esperando una explicación, pues no entendía nada. Yoongi río y tomo la manito de su pequeño y empezaron a caminar por la orilla del mar.
Con sus pies descalzos, sintiendo la fría agua tocar sus pies, mientras iban con sus manos entrelazadas y caminando tranquilamente, sintiendo la fresca brisa de el hermoso mar.
Mientras más caminaban, más se acercaban a la sorpresa que el Alfa había preparado para su amado Omega. El mayor trataba de mantener la atención de su pequeño en cortas anécdotas o entre medio de risas y palabras cariñosas. Hasta que por fin se pudo divisar la sorpresa del mayor hacía su pequeño Omega.
Había una mesa decorada con una vela y una exquisita cena en ella, rodeada de muchas más velas y antorchas que iluminaban perfectamente y la vista era increíblemente hermosa, pues los colores lilas constractaban perfectamente con el romántico ambiente.
Jimin empezó a caminar más lento hasta el lugar, soltando la mano de su Alfa sin darse cuenta. Embobado por la hermosa e increíble sorpresa, estaba realmente encantado, no cabía de la emoción, cuando estuvo frente a la mesa y pudo ver todo, chillo de la emoción, se sentía el Omega más afortunado del mundo al tener a su increíble Alfa junto a él.
- ¡Yoonnie...! - Grito de emoción el Omega, dándo media vuelta y deteniendo sus palabras abruptamente ante la nueva imagen frente a él.
El Alfa estaba con su rodilla derecha en la arena, mientras sostenía una cajita de terciopelo rojo entre sus manos, mostrando un hermoso anillo bañado en oro rosa, que tenía la increíble forma de una rosa, con una brillante diamante en el centro.
Jimin boqueo en sorpresa y sus ojitos se empezaron a nublar de la sorpresa, intentado no ponerse a llorar en ese momento, deseando que eso en verdad no fuera un sueño y toda su felicidad fuera eterna.
- Y-oon... - Susurró con un nudo en la garganta.
- Amor de mi vida, mi cachorro, mi bello ángel, mi pequeño Minnie - Llamo el Alfa por varios diminutivos tiernos a su Omega - Se que... Es muy pronto para esto, que acabas de salir de tu peor pesadilla y aún la sigues superando amor mío. Pero tú y yo sabemos que lo nuestro es más real que nada, que somos destinados, estamos únidos uno al otro, tú me perteneces y yo te pertenezco. Que la madre luna siempre nos unirá como destinados, porque nos amaremos por siempre sin importar nada mi pequeño - Pauso el Alfa, sintiendo derviosismo - Minnie mi pequeño y tierno Omega. ¿Aceptas casarte conmigo?
Jimin ya se encontraba derramando lágrimas de felicidad, su lobo movía el rabo de lado a lado, mientras saltaba de emoción, su pechito palpitaba desenfrenado. El Omega sabía que Yoongi siempre sería su lugar seguro en el mundo.
- Si... ¡Claro que sí acepto Yoon! - Grito el Omega, desbordando felicidad.
El Alfa sonrió feliz, ambos mostrando sus encantadoras sonrisas. Se puso de pie y colocó el hermoso anillo en el dedo anular del Omega, resaltando en la cálida y delicada piel de éste. El Alfa depósito un casto beso en la mano de su pequeño y después entrelazó sus manos, conectado sus miradas.
- Me haces el Alfa más feliz del mundo mi cielo - Dichas estás palabras, Yoongi levantó por las caderas a su Omega y giro junto a él.
Ambos tiraban corazones de amor por doquier, riendo a carcajadas sueltas, demostrando su eterno y sincero amor, siendo así, como marcaban el nuevo inicio de una vida eterna juntos, una vida de la cual, jamás podrán separase, porque saben que estarán juntos por el resto de sus vidas, en esa y en todas las siguientes.
- Te amo Yoonnie - Susurró el Omega cuando estuvo frente a frente con su Alfa, mientras sus manitas se aferraba al pecho de este.
- Te amo mi pequeño Minnie - Susurró el Alfa, pegando sus labios a los de su amado.
Sus labios de movían al compás de sus sentimientos, al ritmo de su felicidad y amor. Sus besos siempre demostraban la pasión y deseó entre ellos, pero sobre todo, su felicidad, emoción, alegría y amor, porque su amor es lo más puro y real que existirá jamás.
Largos minutos después se separaron, robándose uno que otro beso en el proceso, sus mejillas dolían de tanto sonreír, pero no les importaba, mientras fuera de felicidad todo estaba bien.
Tomaron asiento e iniciaron con su velada romántica, sus emociones estaban a flor de piel, encantados con todo lo sucedido y mostrándose amor en cada segundo que transcurría.
Morirían de diabetes si seguían así, pero es que nada de eso importaba. ¡Ellos eran felices!
- ¿Por qué una rosa Yoon? - Preguntó con una nueva curiosidad el Omega, mientras observaba con una suave sonrisa el brillante y hermoso anillo en su manito.
- Porque eres como una rosa para mí - Respondió el Alfa. Jimin se sonrojo y observó a su Alfa a sus lindos ojitos gatunos.
- Pero las rosas tienen espinas, si las tocas te pueden pinchar, ¿Por qué te parezco una rosa si sabes que te puedo lastimar?
Yoongi sonrió, pues él sabía perfectamente eso, que una rosa daña si la intentas tomar sin cuidado, pero él veía de una perspectiva muy diferente a su pequeño.
- Una rosa puede lastimar mi cielo, pero si no sabes cómo cortarla. Pero tú, eres una hermosa rosa, delicada, frágil, bella, resplandeciente y llena de vida, mientras no la toquen y viva feliz en su zona, en su ambiente y en su mundo. Tú mi cielo, puedes crear tu mundo y dejar de vivir en una cajita de cristal, ser libre, feliz, sin miedo a nada, una hermosa rosa que siempre será frágil, pero fuerte porque tiene una capa que la cubre de la maldad del mundo exterior.
Jimin entendió una cosa en ese momento. Su Alfa si es un verdadero escritor que sabe cómo trasmitir los verdaderos sentimientos al resto y aunque no lo fuese, sabe que su amado siempre sabrá que decirle, como reconfortarlo y como llenarlo de amor con una simple mirada.
- Tú eres esa cajita de cristal que me cubre amor - Dijo el Omega - Eres mi lugar seguro en el mundo, eres la cajita que me proteje, con quién me siento pleno, feliz, con quién puedo ser yo, sin miedo a nada. Tú eres la cajita de cristal que cubre esta hermosa rosa.
¿Cómo no ver lo únicos que son?, ¿Cómo no darse cuenta que son una pareja feliz y solo quieren vivir su amor sin miedo a nada?
- Mi Omega - Dijo el Alfa, destilando amor por sus ojitos, mientras brillaban enamorados de su pequeño - Te amo más que nada mi pequeño hermoso.
- Mi Alfa - Susurró el Omega, aferrandose a las grandes manos de su amado y sintiendo su corazón acelerado por sentir su amor conectado - Te amo demasiado mi amor.
El amor más puro y real, siempre será como el que tienen Yoongi y Jimin. Eterno.
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¡Hola amigos!
¿Qué les pareció este capítulo?
Se que los hice esperar mucho, demoré demasiado en actualizar.
Este capítulo lo escribi ahora, lo acabo de terminar de editar y se los traigo tarde porque apenas y terminó todo. Pero en verdad les quise traer este capítulo si o si. Ando emocionada 🤭
¡El Yoonmin de comprometió!🥰
¿Se esperaban este momento?
No sé cuánto demorare en regresar, pero espero que no sea mucho tiempo mis chiquillos. Acabo de entrar nuevamente a la U y estoy atrasada con trabajos, yo sé que ustedes entienden. Aún así, aquí les dejo este cap.
Espero que en verdad les haya gustado mucho mis chiquillos bellos.
¡Nos leemos pronto!
Bye💜
No olviden dejar su estrellita si les gusto el capítulo ⭐