🌹𝐔𝐍𝐀 𝐑𝐎𝐒𝐀 𝐃𝐄𝐍𝐓𝐑𝐎 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐂𝐑𝐈𝐒𝐓𝐀𝐋🌹 ~Yoonmin~

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(Narrador Omnisciente)

Hoseok entró rápidamente a la habitación cuando escuchó el fuerte grito de su Omega.

Lo encontró de rodillas en el piso mientras sostenía fuertemente su cuello y ahogaba un grito de dolor. El Alfa corrió hasta él y lo envolvió en sus brazos, arrullandolo y tratando de calmarlo.

- Señor Jung, lleve al joven Kim a su habitación. Le aconsejó que trate de crear la marca, si no lo hace pronto podría ser demasiado tarde - Aconsejo el doctor Choi.

El Alfa no espero escuchar más. Levantó entre sus brazos al Omega y lo envolvió en estos, sintiendo como Taehyung se aferraba fuertemente a él y sollozaba con dolor, sintiendo su cuello quemar y un dolor indescriptible en su pecho mientras el lazo se rompía.

Hoseok no creyó que aquello sucediera antes. No espero que la muerte de Jungkook alcanzará a su Omega y este sufriera el dolor de un lazo roto. No sabía que fue lo que su bonito chico hablo con el Alfa, pero en ese momento solo deseaba calmar todo dolor de su pequeño Tae.

Lo llevo hasta la habitación de este y lo recostó en la camilla, sintiendo pesadez en su pecho al escuchar el doloroso llanto de su Omega bonito. Se sentó en la orilla de la camilla y poso sus grandes manos en las mejillas del Omega.

- Bebé... - Llamo - Estoy aquí contigo cariño, déjame... Déjame calmar tu dolor cielo, déjame salvarlos a ambos.

Taehyung abrió sus ojos y asintió lentamente, aún sintiendo aquel quemar en su cuello y pecho. Su lobo se estaba debilitando y ambos se mantenían firmes únicamente por la presencia de su bonito Alfa, anhelando que aquel hermoso ser calmara su dolor tan desgarrador.

- H-azlo Hobi... - Rogó el Omega.

Hoseok se acercó al rostro del menor y dejó un suave beso sobre la frente de este. Quitó la mano del castaño que permanecía ejerciendo presión sobre su cuello y al retirarla, pudo ver lo oscuro que estaba y como la antigua marca iba desapareciendo, hasta quedar nada de esta, más que una dolorosa y oscura cicatriz, que sería cubierta por su marca y el eterno amor  que le juraría a su chico bonito.

El Alfa acercó sus labios al cuello del menor, sintiendo como este ladeaba la cabeza a un lado y sus puñitos se aferraban a la camisa del mayor. Taehyung cerró los ojos y se inundó de la esencia del Alfa, respiro profundo el dulce néctar de su aroma y se permitió relajarse un poco, aunque todo su interior estuviese quemando.

Los labios del mayor se posaron sobre aquella oscura marca, dejando un suave beso sobre esta, antes de dejar salir sus colmillos y encajarlos sobre la dañada pero hermosa piel.

El dulzor de la sangre se sintió en el paladar del Alfa, al mismo tiempo que creaba un lazo de unión que aunque sería temporal, sería suficiente para salvar la vida de sus dos grandes tesoros.

La marca fue creada y con ello un lazo de unión, promesas y amor entre la pareja, quien con todo su corazón anhelaban poder amarse por el resto de sus vidas y ser felices siempre.

Taehyung suspiró tembloroso y sintió su lobo relajarse al mismo tiempo que gozaba de la esencia que se unía a él por un lazo que era creado por salvar la vida de ambos, pero sobre todo, un lazo que prometía amor puro y plena felicidad.

Hoseok fue sacando sus colmillos, limpiando la sangre que salia del cuello de su bonito chico. Dejó un último beso, sintiendo las manitas de su Omega aferrarse a su camisa y escuchando los suaves suspiros de este junto a una hermosa sonrisa plasmada en su rostro.