Un mes, ya estábamos instalados en la casa, Matt y Rebecca nunca se enteraron de mi embarazo y de mi perdida. Me sentía abrumada. Justin me trajo a la ciudad para comprar algunas cosas. Y mientras el estaba en una reunión camine y camine lo que pude comprando cosas que necesitaba. Las bolsas las deje en su carro y me compre un agua y me senté en un banco con vista al parque.
Un lugar que no me resultaba tan agradable como en otras ocasiones. Los niños saltaban y corrían por doquier. Montándose en los lindo columpios azules y verdes. Deslizándose por el fango, sus risas y miradas inocentes me hacían reprimirme al sonreír. Las madres sentadas en otros bancos conversando al respecto de sus vidas en casa y que les preocupada. Una mujer embarazada paseaba de la mano de su esposo viendo a los más pequeños, pensando que quizás ellos estarían correteando a su hijo cuando naciera. Las lágrimas se deslizaban por mis mejillas. Yo quería esa vida de la que aquellas se quejaban. Yo les tenia recelos por no poder satisfacerme con un bebe.
Lo tuve y lo perdí. Me carcomía por dentro viéndolas entre risas, algunas quejándose de como sus hijos se comportaban mientras otras decían sentirse de forma maravillosa.
El hecho de vivir la experiencia de la que a mi se me había negado. En mi vientre había un bebe, un bebe que ya no esta. Debía superarlo pero se me hacia mas difícil a medida que transcurrían los días y me sentía mas melancólica. Me sentía más sola. Justin se iba muy temprano y volvía a final de tarde. Yo con mi reposo no podía hacer nada. Por suerte y ya había terminado. Y mientras esperaba una semana para empezar a trabajar me dedicaba al aseo de la casa.
Me había convertido en una ama de casa, mi madre lo desaprobaría si se enterara, yo naci para que me sirvieran, a su opinión, la mía es tan diferente siempre quise independizarme y hacer las cosas por mi misma y darle el valor que se merecen
___________---------
Transcurridas las horas veía como las madres recorrían el parque con cochecitos de distintos tipos, unas iban otras venían, constantemente el lugar se llenaba de risas y la inocencia de los niños parecía iluminar todo a pesar de que ya estaba oscureciendo. Justin me llamo preguntándome donde estaba, mi voz se apago al decirle que me encontraba en el parque.
Yo observaba cada cosa. Como el tempo cambiaba y como me observaban las madres mientras yo estaba sola en aquella banca, ¿que hará esa mujer en aquel banco? ¿Por que esta sola? ¿Estará llorando? Se preguntarían aquellas mujeres que me detallaban de lejos, murmurando acerca de mi presencia que todo lo advertía.
Mire el cielo oscuro, los niños iban con sus madres para regresar a casa donde el calor de una familia les acogería. Una niña de cabellos casi rubios paso a mi lado con sus grandes ojos miel bien abiertos, esbozo una sonrisa radiante mientras yo la miraba con dulzura atónita al momento, la nena alzo su mano con una flor, me la estaba dando, estirando sus pequeños bracitos me dijo «señorita esta flor la eh tomado especialmente para usted» tendría unos 4 años. Yo sonreí con mi corazón en la garganta, tome la flor con temor, mis manos temblaban y ella las tomo con sus manitas poniendo la flor en mis palmas. Su sonrisa llegaba a mi corazón
Señora: hola, disculpe usted señorita, mi hija me ha insistido en regalarle una flor
-de verdad - me sonroje
Era hermosa, así de seguro hubiera sido nuestra hija, con los ojos de Justin y el cabello entre amarillo y pelirrojo, a sus 4 años hubiese sido una perfecta modelito. Si es que no seria varón. Mis ojos la vieron agradeciéndole por ello.
-muchas gracias, es hermosa la flor, la guardare siempre
Niña: oh por favor - me decía sentándose a mi lado para verme mejor
Señora: Isabela es muy curiosa señorita, espero no molestarle
-no me ha molestado, me ha alegrado. Hoy...
Señora: es como un día muy opaco
-exacto - baje la mirada encontrándome con Isabela quien se aproximo a sentarse en mis piernas
Señora: Isabela no serás tan mal educada
-no se preocupe...
Señora: Elizabeth
-no se preocupe Elizabeth - le acaricie el cabello a la pequeña que se encontraba en mi regazo
Elizabeth: tiene usted mucho rato sola aquí en la banca
-estoy esperando a mi esposo que aun no ha salido de una reunión - mis ojos aguados daban señal de que algo no estaba bien. La mire dedicándole una sonrisa, aquella mujer me acababa de alegrar con Isabela.
Elizabeth: se encuentra usted bien
-algo, disculpe mi mala educación, me llamo ______. Gracias por preguntar
Isabela: cual es tu motivo de tristeza _____
-cosas que pueden solucionarse con el tiempo, y que de seguro no me impiden sonreír. Isabela me has hecho muy feliz con este detalle
Isabela: le dije a mi madre que usted necesitaba sonreír
-eres bastante inteligente - seguía acariciándole el cabello y su madre se sentó a mi lado
Isabela: gracias
Elizabeth: bastante astuta para su edad
-si. Demasiado
Elizabeth: Isabela porque no vas un momento mas a jugar antes de irnos
Isabela: si mama - salto a jugar, como si lo deseara desde hace horas
Elizabeth: disculpe que insista pero se siente usted bien en verdad
No lo aguante aquella niña corría y yo deseaba ver un día a mi hija correr de esa manera, enamorarme de ella como quizás lo había hecho de su padre
-no, pero las cosas mejoraran
Elizabeth: todo mejora con el tiempo, pero son cosas de las que se debe hablar para poderlas superar, su esposo le ha hecho daño
-todo lo contrario, es el hombre mas maravilloso con el que eh estado.
Elizabeth: sabe Isabela para su edad es demasiado inteligente y sabe reconocer a las personas de una manera que yo no podría, solo después de escucharla a ella y detallar a la persona me doy cuenta. Ella se me acerco con una flor en la mano y la señalo, me dijo que usted estaba muy triste, que una flor y una sonrisa le alegrarían, yo le dije que le dejara tranquila, que a muchas personas les gusta la soledad y respirar el aire fresco. Ella insistió tanto que por un rato quise acercarme yo misma, y cuando vi sus lagrimas supuse que mi hija tal como siempre tenia razón
-si, de verdad me sorprende que mi tristeza sea tan traslucida que hasta su hija lo noto - las lagrimas salieron como si las llamaran, solas y fugaces se deslizaban por mis mejillas
Elizabeth: que le pasa ______
-son tantas cosas que arrastro
Elizabeth: no nos conocemos, capaz y no volvamos a vernos, entonces si quiere decirle algo a una desconocida dígamelo a mi
-me case con un hombre tan maravilloso que creo que estoy enamorada de el, hace un mes comenzaba a formarse en mi la típica barriga de una embarazada, y parecía que a penas llegaba a los 2 meses, pero tenia 4. Me acosté alrededor de los brazos de mi esposo una noche y - mi voz quebradiza hizo que se aguaron sus ojos mientras me miraba atenta - me desperté sangran... Sangrando con miedo, pero no me dolía, mi esposo me llevo a una clínica lo mas rápido que pudo, incluso pensé que moriría a causa de la velocidad. Estaba preocupada solo tenia 4 meses para romper fuente, el bebe no podía nacer aun. Solo recuerdo haberme despertado en una habitación con el a mi lado diciéndome que había perdido a nuestro hijo, ya no lo tenia en mi vientre. Toda mi alegría, mi felicidad se había ido con el bebe que se estaba formando en mi cuerpo.
Es increíble como una se encariña tan rápido con una criaturita y espera ansiosa por tenerle en los brazos - continúe. Despacio, me dolía el ama - y acogerle con tanto amor como difunda el corazón.
Elizabeth: lo siento mucho, si yo hubiese perdido a Isabela seguro que no se que hubiese hecho
-yo hubiese querido irme con el, que por poco y no me iba también, los médicos dicen es un milagro. Pero me siento vacía, me quitaron lo mejor que esperaba de mi.
Elizabeth: no te desilusiones, te han dicho a caso que no podrás concebir mas
-no, no me han dicho eso, pero si me dijeron que si llegaba a estar en cinta de nuevo podría correr peligro, tendría que estar bajo tratamientos y un régimen sumamente estricto
Vi a Justin acercarse con una sonrisa, su mirada tierna me levanto el animo y sonreí con lagrimas en mis ojos. Se acerco más deprisa mientras Elizabeth le observaba
Justin: _____ estas bien - preguntaba preocupado
-yo - me levante de la banca aferrándome a el, mi cara en su pecho mientras mi cuerpo temblaba. Lloraba, me apreté mas a el tomándole por la espalda, el me tomo con sus brazos y me abrazo mas fuerte cubriéndome con su cuerpo. Sentía vivir nuevamente a su lado
Justin: tranquila _____ que pasó mi pequeña. No llores más que no me gustan las lágrimas que salen de tus hermosos ojos. Sabes amor, lo superaremos, vamos sonríe que así brillas mas que nunca. ______ saldremos adelante ya lo veras. Y podrás concebir otro bebe y yo incluso estaré contigo si me necesitas - me acaricio el cabello mientras yo le veía atenta - te quiero ______ siempre podrás contar conmigo, pase lo que pase yo estaré a tu lado cuando me necesites, si necesitas mis brazos para que te cubran y protejan mientras duermes yo estaré ahí para ti.
Elizabeth veía encantada la escena entre Justin y yo, éramos un matrimonio creíble que parecía perfecto, lleno de amor y comprensión, me era imposible no enamorarme de Justin.
Justin: disculpe, ha estado usted consolando a mi esposa - con una sonrisa se presento ante la mama de Isabela
Elizabeth: me considero privilegiada por ello, mi hija ha incitado todo esto
-es aquella pequeñita que se columpia
Justin: tiene usted una hija hermosa
Elizabeth: gracias, de verdad se muestra usted como un maravilloso esposo, tal como ha contado ______
Justin: a si, que pena - se sonrojo - gracias por considerarme así - me dio un beso en la mejilla tomándome por la cintura - nos vamos amor
-gracias Elizabeth por escucharme y comprenderme. Gracias en verdad
Elizabeth: de nada, fue todo un gusto, eres muy joven _____ todavía puedes tener bebes. Yo solo pude tener a Isabela y ya no puedo tener más. No dejes morir las ilusiones y lucha.
La abrase como si fuera una amiga que no veía hace mucho y me había reconfortado encontrármela. Me despedí de Isabela y le presente a Justin, me fui contenta, alegre con la pequeña flor en la mano.
____________---------------------------------
Ya en el coche con Justin se me acerco dándome un beso tan apasionado que casi nos desnudábamos delante de cualquiera que pasara.
-por que me gustan tanto tus besos
Justin: no se, yo aun me pregunto porque a mi me gustas los tuyos - me acaricio la mejilla y nos montamos en el carro. Había una larga cola. Estaba agotada. Justin no estaba animado para nada y yo tenía sueño. Al verlo casi dormido me preocupe. El dándose cuenta volteo hacia mí y me dedico una sonrisa, me acaricio la pierna haciendo que me ruborizara. Poco a poco subió con la misma mano hasta mi vientre.
No se veía para adentro del carro porque tenía vidrios ahumados. Su mano siguió delicadamente hasta mis pechos haciéndome estremecer en el asiento de copiloto. Mis piernas temblaban y el dándose cuenta siguió acariciándome con su mano libre y toco mis labios con sus dedos acercando mi mentón a sus labios, debido a que la cola no avanzaba, me acerque a el poniendo una mano en su pierna y la otra en el asiento. Me mordí desde la comisura de los labios hasta la superficie causándome gran excitación. Acaricie el sexo de Justin por encima de su pantalón, lo que lo hizo sobresaltar.
-no temas amor, una leve caricia no tiene nada de malo
Justin: en esa parte si ______ no me hagas hacerte mía aquí mismo
-lo siento, tienes razón - me baje el vestido mostrándole mis senos
Justin: tapate por favor
-si quieres que me tape súbeme el vestido tu mismo
Justin con las dos manos se dispuso a subirme el vestido pero al llegar a mis senos una mano bajo a mis caderas y tomándome por la cintura me acerco para besarme los senos con pasión, tanta pasión que me hacia gemir. Acariciaba su sexo mas rápido haciendo que le gimiera también.
La cola avanzo sin darnos cuenta, llegamos a la casa impacientes por ir a la cama. Hace rato que estábamos incitándonos. Me metí en la ducha y al salir me encontré con el cuerpo desnudo de Justin tomándome por la cintura y apretándome por las pompas y besando mis senos húmedos. Se baño rápidamente y me metió bajo la regadera con el lamiéndome el cuerpo.
Nos aproximamos a la tina que era más bien como un Jacuzzi. Las manos de Justin recorrían mi cuerpo con perfecto equilibrio haciéndome temblar y desconcentrarme. Encima de mí me besaba con tanta pasión y determinación, le deseaba tal cual, puse sus manos en mi cuerpo, tocaba mis senos con la palma de sus manos, le di un beso lamiéndole los labios y rodé una de sus manos para mi sexualidad debajo del agua. Sentí como el miembro de Justin esta erecto y ahora poniéndome yo encima le bese con amor, locura y lujuria.
Lo hicimos, Justin me penetro una y otra vez de una manera única, aunque yo estuviera encima de el mientras apretaba mis pompis me trataba con delicadeza y luego era mas rápido haciendo delirar y gritarle que quería mas. Cosa que a el le gustaba. Sus brazos y besos después de hacer el amor eran el mejor confort. En la cama desnudos Justin me acariciaba con sus labios dándome besos por todo el cuerpo deteniéndose en mi feminidad. Haciendo suspirar y temblar con los besos húmedos que ahí me daba. Y pedía más y quería mucho de él, tanto que volvimos a hacer el amor.
__________-------
Me desperté sin sentir los brazos de Justin, no estaba a mi lado. Me duche y arregle, baje las escaleras buscándolo en la cocina y nada. Se había ido muy temprano.
Me dejo una nota al lado del desayuno diciéndome que llegaría a las 2pm. Sentí la puerta y fui a abrirla, un hombre con paquete me hizo firmar. Cerrada la puerta me fui al mueble con la caja y al verla una nota «no estas sola, me tienes a mi pese a todo, pero cuando no este en casa o salga muy temprano al trabajo que gustaría que alguien mas te cuidara» me quede dudosa por lo que ponía. Abrí la caja mientras algo se asomaba por ella.