Hace unos minutos que el ayudante de Elsa regresó con mi maleta, esperé unos diez minutos a que mi habitación estuviera lista y cuando lo estuvo, me instalé, no saqué apenas nada ya que solo será esa noche. Ya ha oscurecido y escucho como juegan al golf, me ilusiona muchísimo que me quede aquí y pueda jugar (intentar) al golf con mi ídolo, es algo que jamás lo hubiese pensado.
Me siento en la gran y cómoda cama observando el número de Tom... wow, lo que darían otras por tenerlo, me encantaría publicarlo en las redes para otras como yo, pero eso sería horrible realmente, rompería la privacidad de Tom y él ha confiado en mí para dármelo, aunque solo ha sido para no quedarme dormida a la noche, seguro me bloqueará después...
Me pongo ropa cómoda y me decido a bajar para no estar sola e investigar o algo, al bajar me encuentro a Zuri vestida como si fuera al gimnasio, va cómoda. Me mira y sonríe, ella me señala junto al campo del golf, ahí están todos reunidos, voy curiosa hacia el lugar señalado y al fondo, veo a Harry y Tom hablando y riendo, un poco cerca a Sam y Paddy acariciando a Tessa... espera. A TESSA, AHHHH. Lo siento, es que siempre la he adorado e incluso he deseado ser ella...
Me acerco un poco más y Tom me ve y me saluda, veo un poco ya que está oscureciendo, pero va vestido de rojo, así que es fácil verlo. -Hola Judith, vente con nosotros- dice Tom gritando un poco. Harry me mira sonriente, voy tan rápido como puedo para no hacerles esperar, cuando llego, me acerco a ellos con una sonrisa boba plantada en mi cara. -¿Hola chicos, qué hacen?- soy idiota ya que veo que están hablando.
-Tom está un poco indignado, no puede jugar porque los más mayores están ocupando TODO- dice señalando un lugar con mucha gente de tercera edad, efectivamente jugando al golf.
-Vaya, os han jodido la diversión- digo lamentándome. -Espera- digo revisando lo que voy a decir, no quiero sonar gilipollas. Tom y Harry me miran con curiosidad mientras los dejo con intriga. -Podemos hacer otra cosa mientras, si queréis-
-Bueno... aquí no hay muchas opciones- Harry se rasca la barbilla mientras piensa algo. -Sí que hay cosas, pero eso lo dejamos para la noche- dice Tom mirándome y guiñandome un ojo. Nota para mí misma: por el amor de dios Judith no te mueras cuando haga la más mínima cosa.
-Cierto, los mayores nos echarían una bronca...- Harry suelta una leve risa contagiosa. No sé cómo acabamos los tres soltando carcajadas MUY sonoras, haciendo que Paddy y Sam con Tessa se acercasen a nosotros. -¿Qué os hace tanta gracia?- dice Paddy mirándonos curioso. -Nada, nada- Tom se seca las lágrimas.
-Oye Padds, creo que mamá te llamó- Se nota que lo que dice Harry es mentira. -Ni de coña pienso creérmelo-
-Lo que tú digas, escuché algo de "helado" pero como quieras- esta vez es Sam el que miente, no entiendo la razón. Estoy a punto de pensar que Paddy soltaría alguna bordería hacia sus hermanos, de repente sale disparado en dirección a su madre que creo recordar haberla visto recogiendo las cosas de la entrevista.
-Tiene dieciséis años, pero eso no cambia su obsesión por el helado- comenta Tom después de que Paddy estuviera a metros.
-No lo entiendo-
-Judith, Paddy no sabe lo de nuestras "fiestas nocturnas" no nos importaría contárselo y que viniera, pero gracias a nuestro buen amigo Harrison, hemos descubierto que hay bebidas escondidas- dice Tom frotándose las manos como si fuera un niño frente una tienda de golosinas.
-Mañana tengo vuelo...- me preocupa coger una buena resaca y no querer vivir. -Confía en nosotros, no nos pasaremos- Harry tiene en su cara un sonrisa malévola, lo que me hace desconfiar de sus palabras, pero no tengo más remedio que hacerlo, lo haré SOLO por respeto, no porque sea un poco borracha.
-Acepto-
-Así me gusta, mientras tanto nos toca la parte aburrida... esperar- dice Sam haciendo una mueca.
Estuvimos hablando de todo un poco, lo que hizo que tomara más confianza con ellos, Hazz se unió y los cuatro me contaron sus anécdotas más divertidas sobre fiestas. Paddy llegó un poco mosqueado con sus hermanos por la mentira de Tom y Harry, además se había quedado castigado sin helado por una semana, cuando la madre le dijo que no había ningún helado se enfadó y la madre vió su obsesión así que lo castigó. Me da pena el pobre, pero así no se quedará con el estómago congelado.
A las dos horas por fin tocaba la hora de cenar, muchas familias estaban allí en el comedor, Harrison me explicó que no todos se quedaban a dormir, me explicó un poco sobre la vida de todos, soy una persona a la que no le importa mucho la vida de otros, pero si el mismísimo modelo, actor Harrison me lo cuenta, mis oídos estarán encantados de escucharlo todo.
Acabamos de cenar y nos despedimos de algunas familias que ya se iban, al cabo del rato, subimos todos al pasillo donde se encuentran las habitaciones, Nikki y Dom al vernos despiertos gritó que fuéramos a dormir de una vez, ella se acercó a mí y me dedicó una sonrisa. -Judith, si quieres puedes irte a dormir para mañana levantarte con fuerzas, si necesitas algo llama a Tom- me acaricia la mejilla y se va sonriente, Dominic que la espera me dedica una sonrisa y pasa su brazo sobre los hombros de su mujer. Nikki le susurra algo al oído a Dom que no escucho. Él la mira y le dice algo que entiendo un poco. -No la agobies, aún apenas se conocen-
¿Qué le habrá dicho? estoy perdida en mis pensamientos cuando noto unas manos agarrarme la cintura. -No te vayas a quedar dormida, ¿eh?- dice alguien susurrándome al oído, un escalofrío me recorre todo el cuerpo cuando me doy la vuelta el corazón me da un vuelco.
-N...No, intentaré que no- ay mi madre. -Eso espero- Tom me suelta y se dirige a su habitación número dos, la mía es la cinco, las de Paddy, Harry y Sam están más lejos. Tom cierra la puerta y lo pierdo de vista, yo, petrificada, me voy a la mía y cierro, después me tumbo sobre mi cama agotada.
-Después de eso no me quedaré dormida, ten por seguro querido Holland que yo no... me quedaré... dormi- ups, me equivocaba.
Escucho un sonido muy molesto, suena una, dos, tres veces seguidas, quiero abrir mis ojos para ver que demonios es eso, pero la pereza me puede. Ahhh, no deja de sonar, joder. Me levanto de la cama molesta y busco la fuente del sonido. Veo entre las sábanas una luz que se enciende y se apaga al mismo tiempo que el pitido.
Lo desbloqueo y se me corta la respiración. ¡Me he quedado dormida! temblorosa empiezo a escribir.
Me resulta extraño hablar con alguien a quien tengo de fondo de pantalla. Raṕidamente me limpio la cara, me huelo las axilas por si acaso, igual me los lavo aunque huelan bien, me peino y salgo sigilosamente con el móvil en las manos, al salir de la habitación, miro a los lados por si veo a Zuri o a alguien que se enfadaría al verme así.
Ni rastro de nadie, perfecto. Bajo hacia la recepción, no veo a nadie, miro el panorama por si veo a alguien, todo está oscuro. Nada, a los segundos noto un viento detrás mía, me giro pero no veo a nadie, esto me da un poco de miedo así que prefiero ir a buscarles, voy a abrir la puerta de la terraza cuando unas manos me agarran la cintura y tiran hacia atrás, yo pego un grito del susto, ¿qué está pasando? cuando voy a darme la vuelta, algo me tapa los ojos, no consigo ver nada, empiezo a gritar pero me alguien me tapa la boca. -Shhh, calla- susurra quien me está haciendo esto, me empuja a no sé dónde, estoy aterrada, así que no puedo reaccionar como mil veces he pensado si esto ocurría. De pronto me suelta, lo que me tapaba los ojos me lo quita y al fin puedo ver, miro de un lado a otro pero no veo a nadie. -Estoy en el campo de golf- susurro. Algo me empuja de nuevo haciéndome caer, cuando me levanto, veo justo enfrente mía una mesa con una pequeña hoguera justo al lado, bebidas de alcohol, comida, tumbonas y mantas en el césped. Miro un poco a la derecha y veo a Harrison, Sam y Harry atentos mirándome muy sonrientes. ¿Pero qué...? Mi expresión ante todo esto es confusa.
Noto un leve golpe en mis hombros y me giro aún sobresaltada, veo a Tom riendo con las manos en el estómago. Ahora lo entiendo todo, siento dentro de mí una ira que muy pocas veces sale.
-¡¿PERO QUÉ COÑO OS PASA EN LA CABEZA, ESTÁIS LOCOS?!- miro a todos mosqueada, de repente todo se queda en silencio, me doy cuenta de que acabo de gritarles a los Holland y Harrison, ¿quién me he creído? siento que la he liado cuando todos comienzan a soltar carcajadas, al principio me molesta que se rían de mí, pero la risa contagiosa de los gemelos me hacen unirme a su estúpida fiesta.
-Lo sentimos Judith, queríamos que te divirtieras- die Harrison aún riendo. -La idea fue de Tom- dice Harry ya tranquilo. -¡Pero no me delates!- Tom se acerca a mesa y coje una botella y se sirve en un vaso de plástico.
-Pensaba que iba a morir- digo seria. -Yo les avisé- Sam se encoge de hombros y también se sirve un poco de bebida. Cuando estoy al fin tranquila me siento en una de las tumbonas y cierro los ojos unos segundos.
-Judith, Judith- noto que alguien me zarandea suavemente, abro los ojos y veo a Harry aguantándose la risa, este chico es muy risueño. -Oye si quieres te llevamos a la cama abuelita- Le miro desafiante -¿Disculpa, me acabas de llamar "abuelita", Holland?
-Eso es lo que pareces- Harry coge también algo de bebida y de un trago se lo toma todo. -¿Me estás desafiando pelirrojo?- cojo un vaso y me sirvo una buena cantidad, lo engullo rápidamente, veo que me mira atónito. El resto están preparando las cosas para jugar al golf.
-¡Eh Sam!- Sam se acerca ante la llamada de su hermano. -¿Qué quieres ahora?
-Ya que tú sabes más, preparanos el chupito más fuerte que haya en la mesa- Sam asiente divertido y lo prepara, nos sirve un vaso nuevo a cada uno y nos sirve lo pedido. -Quien aguante más, gana- Sam que está pendiente de todo, llama a Hazz y Tom para que no se lo pierdan.
-No os paséis que mañana Judith tiene vuelo y mamá nos la liaría- dice Tom preocupado. -Como si fuera la primera vez que tenemos que disimular- añade Sam. Harrison parece encantarle este juego.
Harry se bebe el primero muy convencido, aunque después hace una mueca, yo me bebo el mío sin ningún problema, vamos a por el segundo y yo como si nada, Harry al tercero parece estar a punto de vomitar, así que decidimos parar, los chicos me miran sorprendidos ya que no tengo ningún efecto.
-Bueno chicos, ¿qué queréis hacer ahora?- digo sonriendo. Nos vamos junto a los palos de golf y empezamos el juego, pero antes Harry vomitó unas dos veces y Tom tuvo que explicarme cómo se juego, sinceramente sigo sin enterarme. Mientras jugamos vamos comiendo y bebiendo, a alguno ya se le va notando un poco más alegre, como Sam que no aguanta nada. Voy a tirar cuando sin querer al echar el palo hacia atrás, le doy a Harrison en sus partes íntimas...
-¡Mierda, lo siento!- digo dejando el palo en el suelo y corriendo a socorrerlo, ya que se ha tirado al suelo. -Estoy bien, estoy bien, solo... necesito unos segundos- Yo asiento y le vuelvo a pedir perdón, todos ríen incluyendo él menos yo que me siento fatal, Hazz por fin se recupera y seguimos el juego. -Anda, ven patosa- me dice Tom acercándose a mí, pasas sus manos por mis brazos hasta llegar a mis muñecas, creo tener la piel de gallina y me pongo roja solo pensar que se puede haber dado cuenta. Me sujeta las muñecas y me indica cómo darle a la bola, me dice algo, algunos trucos y dónde debo tirar, pero yo solo escucho las palabras claves ya que me falla todo.
Puedo oler el perfume de Tom... me siento como una chica de wattpad, algo que siempre había soñado. No podría estar en el mejor momento y lugar...