Diez segundos

23.8K 1.8K 837
                                    

Bakugou ____
Ocho meses de embarazo
Eiji: 4 años

Los tres Bakugou nos encontrábamos, llenos de cajas de mudanza por todo el departamento, donde guardábamos nuestras pertenencias para nuestra próxima mudanza al que sería nuestro definitivo hogar.

-Yo también protegí a mamá de un hombre extraño en la calle- Dijo Eiji referente a la plática que tenían, entre él y su padre.

-¿De quién?- Preguntó curioso Katsuki

-Era un hombre de cabello verde, parecía el héroe Deku- Respondió incrédulo nuestro pequeño

-¿De qué habla el niño?- Está vez se dirigió a mi

-Eiji ¿Por qué no vas a colorear en tu libro de dibujos, corazón?- Mande al pequeño para que no escuchara la conversación que tendría con Katsuki

-¡Sí, mamá!-Y el pequeño se fue corriendo a su habitación

-¿Qué fue lo que sucedió, mujer?- Preguntó aún más serio

-Eso pasó el día del accidente, nos encontramos con Midoriya en el centro, pero no hay de que preocuparnos, le deje en claro que no quería saber nada de él- Respondí serena

-De cualquier forma él ya sabe que estamos casados- Respondió Katsuki

-¿Lo sabe?- Pregunte confundida

-Estuvo allí cuando te saque de tu propia tumba- Así que él estaba ahí

-Ya veo, bueno de cualquier forma no estamos haciendo nada indebido, solo nos enamoramos- Respondí, doblando más ropa y poniéndola dentro de la maleta.

-¿Qué es lo que dirás cuando pregunten como nos enamoramos?- Pregunto curioso, caminando hacia a mí, rodeando mi cuerpo entre sus brazos, besando mi nuca con suavidad.

-Bueno podría decir que al compartir tu dolor del divorcio comenzamos a salir como amigos y terminamos enamorados- Respondí sencilla a su pregunta

-¿Dolor de divorcio? Estás borrando la parte más divertida- Me giré a verlo, él posicionó sus manos a los costados de mí muy abultada barriga, acercando su rostro peligrosamente a mí

-¿A si?- Pregunte coqueta, dando un corto beso en la comisura de sus labios

-Si- Sé que el buscaba más besos y caricias, pero teníamos muchas cosas que hacer.

-¿Por qué primero no me ayudas a terminar de empacar? Recuerda que mañana nos mudaremos, si terminas rápido tal vez te mime un poco- Y salí de la habitación

La mudanza fue de maravilla, era una pintoresca casa en un barrio tranquilo y privado donde nuestros hijos podrían vivir sin ningún inconveniente a futuro.

Con alegría nos dedicamos juntos a pintar y decorar las habitaciones, Eiji había elegido para la suya una paleta de colores de su héroe favorito, naranja y negro, así que ya imaginarán a Katsuki encantado por la idea, aunque ambos terminaron más pintados de naranja que las propias paredes, no me parecía bien que ambos tomaran todo como un juego, pero adoraba verlos juntos y felices.

Para la habitación del bebé lo dejamos en blanco, pues no sabíamos su sexo, habíamos decidido que fuera sorpresa para el mismo día del nacimiento, así que solo adornamos y entre padre e hijo construyeron la cuna, debo admitir que me preocupa que hayan sobrado tantos tornillos, así que por precaución usando mi don termine uniendo cada barra de metal a la otra, sin decirles por supuesto, si se daban cuanta que desconfiaba de su trabajo serían un mar de inconformidades.

¿Cómo criaría a un Bakugou? (Bakugo Katsuki)Where stories live. Discover now