DÉJAME ROMPER TUS MIEDOS - AU Izuku Midoriya X T/N Fujitora

CAPÍTULO 7

¿FELIZ?

Narrador omnisciente

Los días pasaban y la relación entre T/N y sus compañeros era cada vez más sólida. Pese a su intento de distanciarse, ellos insistieron hasta encariñarse con la chica. Izuku la había acompañado todos los días de su castigo a la biblioteca. Inko siempre los esperaba con la cena y muchas veces T/N se quedaba a dormir con ellos. Un viernes de 2 meses después, Izuku y T/N volvían a casa después de estar en la biblioteca. Pese a haber terminado su castigo, se acostumbraron a estudiar allí.

Izuku: ¿Quieres quedarte a mirar una película? – Me preguntó sonriendo. Asentí. Al entrar a casa sacudimos nuestros paraguas. La nieve no cesaba.

Inko: Hola cariños míos – Dijo. Se había encariñado con esa pequeña chica, a tal punto de considerarla su hija. Ambos saltaron a abrazarla – Estáis muy mojados¡! A la ducha. No tardéis que la cena está lista – Dijo. Ambos asintieron.

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POV T/N

El agua caliente calmaba el frío que tenía. Traté de terminar rápido y me puse un pijama que dejaba en casa de los Midoriya. Estaba muy agradecida con ambos. Me trataron como si fuera su familia. Pronto sería navidad...

Peiné mi pelo mojado y lo sequé. Salí y vi que la mesa ya estaba puesta. Sonreí y me senté.

Inko: T/N cariño. He estado hablando con Izuku... – Dijo. De pronto dejé de comer. ¿será que estaba siendo mucha molestia? - ¿Por qué no vienes a vivir con nosotros? – Me preguntó. Traté de procesar sus palabras – No tienes por qué hacerlo si no quieres, pero, piénsatelo – Dijo sonriendo – Ambos amamos tenerte aquí, y queremos que te quedes a vivir con nosotros – Explicó. Bajé la mirada. Mis ojos se cristalizaron levemente – Obviamente no tendrías que pagar nada. No te preocupes por eso – Siguió explicando. Levanté la mirada con una sonrisa y los ojos cristalizados.

T/N: Me encantaría – Dije ¿feliz? – Sin embargo... No estoy de acuerdo. Déjeme pagar la mitad de los gastos – De todas formas el estado me pagaba algunas becas por no tener padres.

Inko: Supuse que te resistirías. Un cuarto de los gastos y no cuenta la comida – Dijo. Suspiré viendo que no se rendiría.

T/N: Está bien – Izuku saltó feliz y los tres nos abrazamos. Inko se fue a dormir ya que hoy había hecho algunas horas extra. Desplegamos el sofá-cama y Izuku puso una película de comedia. Al acercarse me miró sonriendo. En medio de la película empezaba a notar el frío así que me pegué a Izuku. Él me miró y sonreí algo sonrojada. Se sonrojó y pasó su brazo alrededor de mis hombros algo dudoso. Al ser él más alto, me medio recosté en su pecho. Subí la manta hasta mi nariz y seguí mirando la película. Uno de los protagonistas hizo un chiste y me reí al mismo tiempo que Izuku.

Nos miramos y sentí un cosquilleo en el estómago. Por un momento nos miramos a los ojos. Él se acercaba y yo también. Mis ojos se posaron en sus delgados labios. A pocos milímetros empecé a sentir el calor subiendo a mis mejillas. Finalmente, nuestros labios se rozaron y nos fundimos en un lento beso. Era calmado y tierno. Su mano que no me tenía rodeada por la espalda estaba en mi mejilla y de vez en cuando movía su pulgar acariciándola. Nos retiramos por la falta de aire, y sin dudarlo volvimos a juntar nuestros labios. Entre la poca luz él me miró a los ojos y vi como se sonrojaba. Puse mi mano en su mejilla y él volvió a mirarme. ¿Debería seguir adelante? ¿Realmente estaba bien seguir con el beso?