Entre libros (UsaMex) (Terminada)

EXTRA

Antes de comenzar esto fue pedido por una persona especial, no es la primera vez que escribo este tipo de contenido, pero no soy el mejor escribiendo escenas de este tipo, solo lo hago para practicar mi narración, si no les agrada este tipo de contendido nadie los está obligando a leer, gracias por tener el tiempo de leer este aviso.

contenido +18, continuación del epilogo.

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Con delicadeza dejo al mexicano en la cama, se colocó arriba de el sin dejar que se escapara.

— Al parecer el niño quiere jugar hasta tarde — Noah se congelo ante lo dicho de su pareja aún no se acostumbra a ese lado de él. Luis aprovecho que Noah perdió el control de la situación para besarlo.

El decidió tomar la iniciativa, cambiando de posición para que su pareja tengas más movilidad. El de piel morena se encontraba sobre el regazo de su pareja. El beso que de un principio era dulce subió de tono, pequeño gemido producía el más bajo que se dejaba tocar por mayor.

Aquel pequeño juego empezó a subir de tono, Noah se dejó guiar por su pareja, tomando el ritmo que el dese, empezó con pequeños roces explorando cada parte de su pequeño, después bajo a su cuello empezó con pequeños besos en diferentes zonas, sin dejar marca en la piel morena.

Luis no se quedó atrás, empezó a jugar con los botones de la camisa de su amado, poco a poco fue quitando uno, deshaciéndose de la primera prenda. Al igual que su pareja empezó a explora el cuerpo ajeno. Noah gruño bajo al sentir como el moreno dejaba marcas en su cuerpo, dejo que el más joven ahora juegue un poco con su cuerpo, dejando escapar gemidos un poco roncos.

José bajo una de sus manos al pantalón estimulando un poco el miembro de Noah, siguió con los movimientos circúlales, disfrutando de la reacción y sonidos que producía su novio. Un gemido ahogado le dio la señal que lo dejara de en paz. Se separó un poco, observado que el mayor intentaba regular su respiración, su piel blanca ya no lo era, un color rojo adornaba sus pómulos.

José sonrió travieso, se acomodó bien, el estadunidense coloco sus manos en las piernas de su amado mexicano para que tuviera un mejor equilibrio. Luis empezó a quitarse la playera que lleva puesta, dejando una buena vista para el de piel blanca, cuando termino de quitarse la playera con ayuda de su pareja.

Noah pasaba sus dedos por la espalda del más pequeño causándole escalofríos al mexicano, siguió bajando y subiendo jugando un poco con ellos, Noah se acercó un poco al pecho del moreno para poder besarlo y juagar con sus pezones.

Luis soltaba gemidos un poco altos mientras se balanceaba de atrás y adelante rozando su trasero sobre el miembro de Noah para provocarlo. Noah con la distracción del contario desabrocho y bajo el cierre del más joven.

Introdujo unas de sus manos para poder masturbar el miembro ya activo del menor, empezando con lentos movimientos, para después llevar un ritmo constante, Los gemidos se convertían en una mezcla de jadeos y suplicas del pequeño, pidiendo a gritos que siguiera.

Luis sentía que en cualquier momento se correría y Noah lo sabía ya conocía demasiado bien las reacciones de su pareja. antes que eso pasara tomo con delicadeza el mentón de su novio y lo besarlo para callar el grito que ahogo en el beso.

La mano de Noah se movió a su trasero y con el mismo semen lo uso como lubricante. Luis se separó del beso en busca de aire, se aferró a la espalda de su amado mientras que poco a poco se quedaba sin ropa.

El estadunidense movía sus dedos buscando algo, y con su otra mano quitaba ya tratando de quitarle los pantalones a su novio. Cuando al fin pudo quitar toda la ropa a su pequeño, encontró lo que buscaba, cuando el peli-castaño empezó gemir más fuerte y sus piernas empiecen a temblar, teniendo pequeños espasmos.

Un gemido más fuerte se escuchó en la habitación, el más joven se había vuelto a correr, su respiración se volvía irregular, se recargo en el pecho de su pareja para poder respirar, después unos cortos segundos se recuperaron. Intento bajar los pantalones de su pareja, pidiendo ayuda con la mirada.

Los dos se encontraban ya desnudos, Noah de nuevo reclamo los labios de su amado para distraerlo, introdujo su miembro adentro del mexicano, pequeñas quejas salieron de la boca del menor. Noah no se movió, esperaba que el dolor se calmara, para comenzar con lentos movimientos, para que se acostumbra. Después de unos minutos aumento la velocidad, mientras los gemidos de los dos se mezclaban, los nombres de los dos eran mencionados aquel acto.

El moreno se aferró al mayor, mordiendo su cuello para callar algunos gemidos y poder respirar. Noah volvió a tocar ese punto, tan rápido como lo empezó a embestir clavo sus unas en su espalda y los gemidos se volvieron suplicas de que siguiera embistiendo con fuerza.

Luis sentía que muy pronto volvería venirse, las embestidas se volvieron más fuertes. Luis mordió de nuevo el hombro de su pareja ahogado un gran gemido, después de sentir como los se vinieron. Despacio Noah saco su miembro del interior del más joven, Luis gimió suave cuando eso paso. Luis no se movía dejaba que Noah se encargara del desastre que provocaron. Ya cansados los dos, se dejaron caer a la cama.

Luis se dejó acurrucar por su pareja mientras le daba unos cuantos mimos antes de quedarse dormido entre sus brazos.

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A la mañana siguiente, el mexicano se encontraba entre los brazos de su pareja, ya estaba despierto.

— Noah, amor, cariño — Picoteaba una y otra vez las mequillas de su novio, Noah abrió unos de sus ojos

— ¿Mande? — Hablo cansado

— Tengo hambre — Reclamo, Noah río ante la petición de su novio, se levantó de la cama y solo se puso los pantalones.

— ¿Quieres café? —

— Con mucha azúcar, por favor —

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