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Diario de Lesly
26/10/2019

Cuando desperté me encontraba en una habitación desconocida sobre una cama muy grande y suave, me senté de golpe y Tatiana vino a mi lado de inmediato para pedirme que estuviera en calma.
Me contó que minutos atrás me desmayé y que un joven llamado Sebastián me había subido a su habitación para que descansara un poco; me sorprendió demasiado el nombre y me sentí tonta por no haberle enseñado jamás una fotografía de mi Sebastián a Tatiana aunque en realidad no tenía ni una, las rompí todas cuando decidí que lo dejaría en mi pasado.
Le pedí a mi amiga que volviéramos a casa y justo cuando estaba por ponerme de pie, él entró por la puerta principal de aquella recámara. Era él, era el mismo Sebastián que yo conocía. Salí de la cama rápidamente y le pedí una explicación; yo ni siquiera sabía cómo actuar, tenía un nudo en la garganta que no me dejaba hablar con claridad. Me sentía molesta y a la vez algo en mi era como si estuviese resucitando. Fue tan extraño sentir aquel cóctel de emociones que casi volví a desmayarme, una vez que pude asimilar que aquel hombre y yo nos encontrábamos en el mismo lugar hablamos de lo que sucedió en el pasado y comprendimos que llegamos a separarnos por un gran mal entendido y que ahora ya nada se puede remediar.

Amándola por Siempre (Libro #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora