29

707 69 3
                                    

25/02/2020
Diario de Lesly

Al fin frente a frente; él y yo. Andrés y Lesly.
Después de tres meses, la herida aún seguía abierta y mi miedo latente. Cuando lo ví de cerca mi alma se llenó de pavor. Sentí repulsión y desprecio contra aquel hombre que destruyó uno de los tesoros más hermosos que le llegó a mi vida.

—Estoy contigo —me dejó saber Sebastián—. Él ya no podrá hacerte daño —me advirtió.

No sé trataba del daño que me podía hacer, sino más bien de como había destruido una parte de mí, el pánico no era por lo que podía pasar sino por lo que había pasado y que no pude evitar. Es lo común; lo que nos pasa cuando somos presas de situaciones que nos atrapan y que nos dejan sin salida, nos volvemos vulnerables y dependientes.

Andrés me miró fijamente a los ojos y yo no fui capaz de sostener su mirada ni por un segundo.

¿Cómo fui a casarme con un mounstro? ¿Qué me llevó a cometer semejante locura?

—Lamento que todo acabara tan mal —dijo con frivolidad.
—No lamentes nada, pues vas a pagar caro y de eso me encargaré yo —le dijo Sebastián.

Andrés sonrió sarcásticamente, como si le dieran igual las palabras, como si le importara poco el encierro en una cárcel.

—Esta loco —dije.
—Es un sociopata —comentó Susana.

Fue espectacular ver a Sebastián trabajar en lo que más le gustaba. Tenía carácter para ser abogado. Ahora Andrés se encuentra en prisión condenado a muchos años de encierro para pagar lo que me hizo y lo que le hizo a su hijo.

Amándola por Siempre (Libro #2)Where stories live. Discover now