𝐒𝐚𝐫𝐜𝐚𝐬𝐭𝐢𝐜 -- 𝐜𝐢𝐧𝐜𝐨 𝐲 𝐨𝐜𝐡𝐨

☆25☆𝖥𝖫𝖠𝖲𝖧𝖡𝖠𝖢𝖪

—dale ocho —la regaño Diego—

—pero-

—pero nada jovencita, saca a cinco de su berrinche y después vamos a comprar helado —Ben la agarro de los hombros, la dio vuelta y la empujó para las escaleras—

Ocho empezó a bajar las escaleras y se paró enfrente de la puerta de cinco

—abrí cinco —hablo suspirando profundamente—

—ya, ¿cuantas veces les tengo que decir que se vallan? —preguntó incrédulo desde su habitación—

—o entró por las malas o por las buenas, vos elegís —lo amenazo—

—inténtalo —la provocó sarcásticamente—

Ocho rodó los ojos y con sus poderes destrabo la puerta y la abrió con una mirada triunfante

—siempre la misma lucha —la cerró tras pasar—

—okey, si viniste a procurar de que no me maté, no, todavía no.

—¡¿todavía!? —preguntó algo exaltada—

—agh, si viniste a darme consejos de vida, te invito a retirarte —se tiro boca abajo en su cama y ocho se sentó al lado de el—

—a ver... si estás así por que papá te dijo eso...-

—a mi no me importa lo que dijo el viejo —la interrumpió contradiciéndola sin despegar la cara de su almohada—

—¿entonces? —preguntó incrédula—

—me enoja que vos no me creas —soltó y ocho se quedó en silencio— que pienses que no soy capaz de hacerlo. —dijo desanimado sin levantarse ni mirarla—

—no es que no te creo —suspiro y se acosto a la par de él boca arriba— es que pienso que aún eres chico. —cinco iba a hablar pero ella se adelantó— se que lo harás... porque eres un testarudo, y espero que si te pasa algo pienses en mi y digas 'porque no le hice caso' —soltó una pequeña carcajada— pienso qué hay cosas que te faltan aprender, vivir...

—¿como que? —preguntó incrédulo— no me dejan salir de esta mansión, simplemente salimos a una cafetería y ese es nuestro único plan.

—no se cinco, yo sigo en pie con mi decisión, no pienso que sea lo correcto irte en este momento —habló con voz serena para que el chico no lo tomara mal—

—todos piensan que es solo un sueño —río por lo bajo sarcásticamente— que es una fantasía y que no voy a poder.

—es una fantasía —afirmó y cinco se levantó a mirarla— pero sin fantasías todos nos volveríamos locos —alzó los hombros— y mataríamos a Luther —el chico rio—

Cinco se le quedó mirando y apoyó la cabeza en su panza mientras ella le tocaba el pelo

—¿que te ofrecieron los chicos para que vengas?

—tuvieron que irme a buscar a la casa en el bosque, interrumpir mi libro de Harry Potter y Diego me trajo al rededor de 15 quilómetros en su espalda —suspiro— Vanya quería hablar con vos y Allison preguntarte sobre qué shampoo usas

—nunca le dire —suspiro— pero hay que darle esperanzas para que luego sienta más la derrota

Ocho rio —tengo una duda —cinco le hizo un ademán para que siguiera— ¿porque te empeñas tanto en este tema del tiempo?

El chico suspiro y la miró por sobre su pecho —porque quiero demostrarles a todos que soy capaz...

—¿y si sale mal? —volvió a preguntar ella—