Mi Verdadero Amor [ Luzuplay ]

Capituló 23

• El Accidente •

Narra Raúl:

Estaba en mi salón junto a Rubén, nadie nos había descubierto, si nos culparon pero no tenían pruebas de lo que hicimos, Luzu no dijo nada y eso era lo que me sorprendía a un mas.

Teníamos clase última clase libre, por lo que Rubén y Mangel estábamos hablando como si nada - Entonces... ¿Tienes cita con el Luzu bombón? –

Al escuchar eso me sonroje un poco - ¿Pero-? – Rubén contesto que me había escuchado cuando se lo dije ayer a Luzu al escapar – No estabas solo – Sonrió.

Suspire – No le digas a nadie mas sobre eso –

– Demasiado tarde – Agrego Mangel – Ya se lo contó a Alex y seguramente a Alex se le escapo cuando estuvo con Fargan en el receso – Muy bien ahora estaba muerto, ahora todos sabían que le dije ese apodo vergonzoso a Luzu.

Pasados unos minutos un profesor de educación física le pidió a Rubén que ayudara a bajara una caja con pelotas, el de cabellos blancos acepto y salió a ayudar al profesor, suspire y procedí a guardar las cosas de Rubén en su mochila, sabía que se tardaría.

Estaba en lo cierto, sonó el timbre de salida de clases, tome la mochila de Rubén y Salí del salón, sin embargo no me fui, me quede afuera del salón de Lolito esperándolo.

Por unos segundos, pude cruzar mirada con Mónica, ella chasqueo la lengua y siguió su camino ¿Cuál era su problema conmigo? Él pelirrojo no tardo en llegar a mi lado, sin embargo al primero que saludo fue a Mangel.

Salto a sus brazos y con una sonrisa dijo su típico apodo - ¡Mi niña! – Sonreí su amor se notaba desde lejos, a veces lo envidiaba, pues pensaba que jamás llegaría a algo así con Luzu, mas por pena que otra cosa.

Después de unos segundos Lolito me saludo, mientras caminábamos hacia las escaleras, el pelirrojo pregunto si esta vez saldría con ellos, cosa que negué, tenía una cita con el castaño de ojos azules.

Llegamos a las escaleras y escuchamos un golpe seguido de un quejido – ¡Mónica! – Grito cierta pelirroja.

~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ♡

Llegue hasta donde la chica había caído, se sostenía el tobillo con fuerza, se notaba que le dolía - ¿Con que tropezaste? – Pregunte mientras me agachaba para quedar a su altura.

Mónica me miro con el ceño fruncido y hablo – A ti que te importa –

– Piso esa pelota y resbalo – Contesto Nieves mientras señalaba la pelota.

Para estos momentos Rubén subía con una sonrisa por las escaleras, sin embargo se dio media vuelta cuando escucho a la pelinegra gritar - ¿Quién fue el imbécil que deja pelotas tiradas por ahí? –

– ¿Puedes caminar sola? – Pregunte con el ceño levemente fruncido.

Ella me miro de igual manera y contesto – Puedo hacerlo por mi misma – Ahí estaba su maldito orgullo, la chica trato de levantarse pero cayó en el intento.

Suspire, negué con la cabeza – Mangel ¿Llevarías la mochila de Rubén? – El de lentes asintió con la cabeza la tomo y gire mi mirada hacia la pelinegra - Vamos, te cargare hasta la enfermería –

Mónica negó con la cabeza – No te necesito –

Nieves se puso a su altura y hablo con voz delicada – Si no es Auron, será Luzu y sabes muy bien que lo hará a la fuerza –