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CAPÍTULO CUARENTA Y OCHO

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CAPÍTULO CUARENTA Y OCHO.

BOGGI'S P.O.V.
— Me la he pasado excelente con Jime. — La pequeña nos sonrió, e instantáneamente alzó sus brazos hacia ami, así que me agache un poco para tomarla en mis brazos.

— ¿En dónde está Madison?. — La pequeña me miraba curiosa, y yo suspirando le dediqué una sonrisa, la cual al instante me la regreso.

— Pues, Madison esta enferma, así que no la podrás ver por unos cuantos días, ¿Vale?. — Regina asintió.

— ¿Por cuantos días no la podré ver?. — Los gemelos me miraban un poco nerviosos. — Es que la extraño mucho. — La pequeña hizo una mueca, y yo asentí.

— Yo también la extraño mucho, Regi.. pero tenemos  que esperar por unos cuantos días.. mientras, te tengo una sorpresa. — Ella rápidamente abrió sus ojitos de la emoción. — Te puedes ir a quedar unos días con los gemelos, Jimena y conmigo a nuestra casa. — Jimena al instante se unió a aquella conversación, y comenzó a animar a Regina con aquella idea de que se fuera con nosotros.

— Podríamos hacer noche de chicas, ver películas de princesas, ir a nadar, hablar de chicos.. — Con lo último, Regina hizo una pequeña mueca a lo cual todos soltamos una pequeña risa.

— Solo que para esto tendrás que pedirle permiso a tus tíos, no podemos llevarte a escondidas. — Ella asintió. — Solo espera a mañana para decírselos, y si te dan permiso nosotros pasamos por ti. — Regina no podía de la emoción.

Aquella pequeña era como un pequeño rayo de luz que venía a iluminar todos nuestros caminos.. ya que a pesar de lo fuerte que era la situación por la que estábamos pasando todos y cada uno de nosotros, ella siempre lograba sacarnos una pequeña sonrisa, y eso me encantaba.. ya que también era una de las cualidades que Madison tiene.

— Chicos.. — La voz de la tía de Madison se escuchó en la puerta, y al instante todos la miramos y nos acercamos rápidamente con ella, la cual antes de comentar cualquier cosa, fue directo con Regina, y al igual que yo, la alzó en sus brazos. — ¿Así que te quieres ir por unos días con los chicos?. —Regina asintió muchísimas veces, e Isabel dirigió su mirada hacia mi. — He escuchado todo.. y la verdad me parece una idea maravillosa, necesitamos planear todo lo de.. pues.. los cuidados de Madison, la situación de Andrea. — Suspiró. — Pero en verdad agradezco mucho todo lo que hacen por nosotros. — Asentí.

— Son prácticamente mi familia, y así como pienso cuidar a Regina con todo mi ser, también pienso cuidar a Madison hasta el día en que me muera porque. — Una pequeña sonrisa salió de mis labios al recordar todos los momentos que pasé con ella. — Puedo asegurar que ella es el amor de mi vida.. jamás me había sentido de esta manera por nadie, y en verdad agradezco al universo por que le hayan dado una oportunidad más.. realmente es una de
las pocas personas que el mundo merece. — Isabel asintió junto conmigo. — Realmente me gustaría que pudiera despertar.. — Baje la mirada.

— Nosotros también esperamos lo mismo, anhelamos tenerla de nuevo con nosotros. — Rubén se hizo presente en aquella conversación, y poco a poco todos nos fuimos integrando.

— Pues chicos.. estuve escuchando toda su conversación, y les tengo una excelente noticia. — El
doctor que estuvo atendiendo a Madison durante todo el turno, se asomó por aquella puerta de cristal, y todos lo miramos rápidamente. — Ha despertado.. — Casi se me sale el corazón al escuchar aquellas palabras salir de su boca, pero sin notarlo, sentí las lagrimas de felicidad caer por mis mejillas.

Todos nos dimos un fuerte abrazo, y estaba dispuesto a dejar que los tíos de Madison fueran primero con ella, pero me sorprendió muchísimo que de nuevo, me dejaron ir primero.

— Salúdala mucho de nuestra parte, dile que después de ti iremos nosotros.. y que Lucas aún sigue en camino aquí, pero que pronto todos la podremos ver.. que la amamos. — Asentí escuchando y memorizando todas aquellas palabras que decían los tíos de Madison, y al grabarlas, comencé a caminar hacia su habitación.

— Y Bog. — Me detuve, y giré mi vista hacia Isabel. — Si Madison te pregunta sobre Andrea.. no le digas aún lo que sucedió.. déjanos que nosotros se lo contemos, ¿Vale?. — Asentí, y de nuevo camine hacia la habitación donde había estado unos cuantos minutos antes.

Toqué un par de veces la puerta, pero no conseguí aún una respuesta, así que ingrese sin preguntar, y de nuevo la vi tumbada sobre la cama con los ojos cerrados.

— ¿Madison?. — Me acerque hacia ella, y tomé de nuevo su mano, pero ella continuaba con los ojos cerrados, sin mover ni un solo músculo de su cuerpo.

No podría ser que el doctor se haya equivocado... ¿O sí?. — Madison, responde por favor. — La agite suavemente, sin recibir respuesta alguna.

— ¡Bu!. — Maddie abrió sus ojos repentinamente, y realmente sacándome un pequeño susto.

Al momento de mirarla, no lo podía creer.. no podía creer que la tenía frente a mi, realmente estaba demasiado feliz por tenerla de nuevo conmigo, y lo único que pude hacer fue rodearla fuertemente con mis brazos con cuidado de no lastimarla.

— ¿Qué pasó bebé?, ¿Por qué tanto cariño?. — Aquella dulce y hermosa voz que tanto extrañaba.. de verdad nadie podía comprender toda la felicidad por la que estaba pasando en ese momento.

— Te extrañe tanto.. te amo Madison, te amo te amo te amo. — Rápidamente comencé a llenar toda su cara de besos mientras ella se reía cada que le daba uno, hasta que por fin termine dándole un suave beso sobre sus labios.

Nos separamos lentamente, y ambos sonreímos mirándonos mutuamente a nuestros ojos.. y para ser sincero podría pasar todos los días de mi vida mirando a aquellos preciosos y hermosos ojos.

— Yo también te amo.. más que nunca. — Madison respondió, y le dediqué una grande sonrisa. — Perdón por toda la pelea que ocasionó Andrea.. — Madison suspiró. — Me tiene que prometer que nunca más volverá a hacer algo como eso.. alguna de nosotras pudo salir gravemente herida. — En ese momento las únicas palabras que cruzaban por mi mente eran las de la tía de Madison, recordándome que no mencionara nada aún sobre la situación de Andrea. — Hablando de ella.. ¿Está aquí?. — Los nervios comenzaron a apoderarse de mí.

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𝐒𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭 𝐋𝐨𝐯𝐞. - 𝐉𝐮𝐬𝐭𝐛𝐨𝐠𝐠𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora