Capítulo 21

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Y cuando nadie te esperas por la mañana y cuando nadie te espera por la noche y cuando puedes hacer lo que quieras, ¿Como lo llamas? ¿Libertad o soledad?
Charles Bukowski.

***

Su espera en la sala oscura le preocupaba.

Estaba ebria y en la casa de su novia, corriendo el riesgo de ser atrapada por sus suegros. ¿Por que tan nerviosa? No estaba haciendo nada malo.

Camila había ido a la cocina por unas cervezas.

Miro sus manos y suspiro recordando a esa nueva chica de su clase.

Samanta.

Tenía un forma divertida de ver las cosas y su grupo de amigo parecía siempre pasarla bien. Ella había organizado la fiesta en su casa.

Muchas personas para su gusto, pero la paso bien un buen rato.

Hasta que Camila decidió llevarla con ella a un lugar más privado y realmente la empezó a pasar bien.

Fue tiempo de calidad junto a su chica.

Como le encantaba estar a su lado.

Miro sus manos pálidas inestables esta vez. Quería batir su cabello. El alcohol aun corría por sus venas de manera suave y esas cervezas estaban tardando mucho.

Se iba a levantar pero el pequeño cuerpo de Camila colisionó con el de ella antes de estar de pie.

- Feliz cumpleaños, mi hermosa rosa - susurro Camila pegando con más fuerzas sus labios.

Lauren solo sonrió y llevo sus manos a la espalda de su novia.

Se despego con brusquedad, solo dando la distancia adecuada para comprobar lo que sus manos sintieron.

- ¿Camila? - un suspiro trémulo salió de sus labios cuando sus ojos se dirigieron a la desnudes de su chica.

Sus pechos, pequeños, redondos y jamás explotados.

- Este es mi regalo - susurro ella en respuesta a la pregunta, sostuvo la cara de Lauren y la miro directo a los ojos - ¿Esta bien? Porque yo lo siento bien, lo siento correcto. Quiero que sea contigo.

- Me dejas en otra dimensión. Una dimensión confusa y nerviosa.

Beso sus labios un buen rato y mando a sus manos a hacer el trabajo que pronto haría su lengua.

- Yo también estoy nerviosa, pero eres tu - su sonrisa murió cuando sintió la lengua de Lauren ir a su cuello.

- Me asusta no cumplir con tus expectativas - sin poder evitarlo sus manos llegaron a su trasero desnudo y las dos gimieron - Me asusta arruinar lo que debería ser un recuerdo hermoso.

- Eres tu, Lauren. Eso ya lo hace inolvidable y un recuerdo hermoso. No importa si alguna vez... No seguimos...

- No digas eso - le corto con rapidez y llevo su pequeña mano junto a la de ella a su pecho - Esto es para siempre. Mi corazón me lo grita todos los días.

- El para siempre no importa, mi Rosa. Solo importa que este amor perdurará para toda la vida. Nunca olvides que tu eres mi amor eterno.

Los besos siguieron y le toco a Lauren llenarse de valor y mostrar su cuerpo por primera vez a otra persona.

Las cosas eran prometedoras hasta que sucedió algo que ninguna de las dos se esperaba.

Los padres de Camila entraron a la media noche a su casa, el vuelo se había suspendido y viajarían al siguiente día.

Un Viaje Al Amor Where stories live. Discover now