Frío (Merthur)

Noche 1: Leña.

Merlín estaba decidido, intentaría una vez más entrar en las camaras de Arthur y descansar finalmente, desde su primer intento hace una semana, que se vio se vio frustrado por un rubio gruñón, se dedico a interrogar al príncipe solo para obtener como respuesta un simple resoplido seguido de un ¿Importa? ¡Claro que importaba! ¿Por que razón Arthur se levantaría de madrugada a no hacer nada? No tenía lógica pero aun así no insistió pues Arthur se veía algo abrumado por el tema y no deseaba hacerlo enojar. Lo hablaremos cuando se sienta con la confianza para contarlo, se excusaba cada vez que sorprendía al rubio con la vista perdida en la ventana.

Por otro lado Merlín estaba celoso de Guinevere pues se había enterado que Morgana la dejaba dormir en sus camaras pues la azabache temía que su amiga se enfermara y por ende terminara con una nueva sirvienta; Gwen se veía realmente feliz por esto pues su casa era tan helada de noche que temía no volver a despertar. Morgana era una gran amiga y Merlín no pudo evitar pensar que Arthur era un insensible. 

Decidido a entrar en las camaras esa misma noche, recogía algo malhumorado leña para la chimenea de Arthur, miraba la leña que era únicamente para las camaras de los nobles con odio pues la que había para los pequeños cuartos de algunos sirvientes eran apenas unos palos húmedos que de nada servirían.  Una vez tuvo la leña suficiente camino por los pasillos del castillo con dirección a las camaras de Arthur pero antes de poder entrar la puerta se abrió con fuerza al tiempo en que Uther salia de ella. De nuevo discutió con Arthur. 

Ese tipo de discusiones llevaban meses pasando, todo empezó unas semanas después de que Arthur casi muriera y él tuviera que tomar la vida de Nimueh para salvar a Gaius,tras aquellos sucesos las cosas parecían ir de maravilla entre padre e hijo para  que unas semanas después Uther y Arthur se pelearan casi a gritos, primero como platicas acaloradas y luego como reuniones a gritos cuando él no estaba presente. 

Pensándolo bien las platicas a solas comenzaron tras la ultima expedición que hicieron, las misión era fácil solo tenían que vigilar las fronteras del reino durante una semana y llevar un informe al rey sobre si era necesario desplegar guardias a esa área, la misión iba bien hasta que fueron emboscados por bandidos que les duplicaban el número y entre todo el caos Merlín se vio en la necesidad de usar magia y no pensó mucho en lo que hacía cuando susurro el hechizo y tres hombre volaron hasta chocar con unos arboles, pensando que todo estaba bien volteo la mirada al lado contrarío donde Arthur lo miraba perplejo, pero antes de poder decir nada un bandido lo golpeo con una piedra noqueándolo. 

La próxima vez que Arthur despertó estaba en las camaras de Gaius y para la buena suerte de Merlín lo único que recordaba era que estaban en un campamento y fueron emboscados, después de eso no recordaba nada, lo que hizo que Gaius no se viera en la necesidad de meterle otro golpe y darle otro sermón sobre lo irresponsable que llegaba a ser. 

Tras ese incidente Arthur solicito hablar con su padre a solas y luego comenzaron las peleas a  gritos y los castigos de Uther. Arthur escondía algo y por primera vez no sabía que podía ser aquello que incomodaba al joven príncipe, pensó en preguntarle a Morgana al respecto pero no buscaba problemas con el rey o Arthur. 

Entro a las camaras de Arthur encontrando al rubio mirando por la ventana con el ceño fruncido y con los puños bien cerrados a sus costados, estaba furioso y los más seguro era que si lo hacía rabiar un poco más le propinaría un buen golpe, sin mencionar nada camino hasta un lado de la chimenea y comenzó acomodar la leña en su lugar mirando de vez en cuando al príncipe rubio. 

- Últimamente pelas mucho con el rey - comento volviendo a su trabajo.