Capitulo 76

170 32 8
                                    


Pesadillas
***

—Estoy bien Mini— desde hace unas semanas Alphys ha suspendido todas las actividades que podía hacer.

—Ya casi llego— veía como forzaba su pequeño cuerpo por arrastrar un termómetro.

—No tienes que hacer esto, vas a lastimarte— trate de levantarme un poco para alcanzarla.

—¡Vuelve a la cama! que Alphys dijo que debes de reposar para que tu alma no se rompa— la mire un poco y pude notar lo preocupada que estaba, así que volví a recostarme.

—¿No crees que es demasiado?— llevaba todo el día viendo cómo traía una cosa tras otra.

—¡Llegué!— una vez más triunfante y emocionada, festejaba levantando sus patitas al aire. Solo agarre el termómetro y lo limpie con la cobija.

Al paso de cinco minutos parecía estar igual y esta vez con su telaraña trato de arrimar una botella azul, el medicamento experimental para ayudarme a estabilizar mi alma.

Miraba el techo, sintiéndome atrapada, haciendo recuento de mis recuerdos, de todo lo que sucedió ¿Cómo es que llegue a esto? Miraba mis manos, solo pensando en esta enfermedad. Mi vida sería diferente.

Se que estoy rota, que soy un ser defectuoso que ha causado problemas, a veces me siento como una cucaracha que no puede moverse, justo como ahora. A veces quisiera cambiar el pasado. Dejar de ser tan débil. Golpeó la pared que está a mi lado y mi alma se estremeció sintiendo una punzada que provocó que agarrara mi pecho.

—¡No debí de destruir esa cosa!— si no hubiera destruido aquel ser que pudría mi alma a causa del trato con Nigthmare, no sería tan inútil. Tan débil.

No puedo de dejar de pensar en ello, en el pasado. Quizás, la hubiera puesto de mi lado. Ser uno ¿Seguiría siendo yo misma?

—¿Estás bien?— mire a la araña sobre mi medicamento, estaba preocupada y solo asenti.

Se que no puedo regresar en el tiempo y reescribir mi historia, pero puedo mejorar el futuro.

"Al menos eres libre de decidir tu vida, lo que quieres hacer".

Cierto, soy libre. Puedo decidir que quiero hacer. Por hoy solo quiero dormir un poco. Se que no es algo con que empezar al tener mi vida en mis manos, pero solo quiero descansar y mañana sabré que hacer.

—¿_______?— abro mis ojos y veo una silueta, no quiero despertar, aún no.

—¿Mamá?— no quiero despertar.

Vuelvo a cerrar mis ojos y escucho la puerta cerrarse.

Escucho un fuerte golpe y me levanto de inmediato, volteo a todos lados y veo un baston a mi lado, trato de levantarme pero caigo al suelo, aún no tengo fuerza en las piernas.

—¡Alphys!— necesito levantarme rápido.

—¡¿Alphys estás bien?!— me apoyo en la cama para levantarme, por primera vez la puerta me parece estar lejos, agarro el bastón y trato de llegar lo antes posible.

—¡Alphys!— ¿Que le abra pasado? ¿Porque no contesta? La puerta parece alejarse en cuanto me voy acercando.

—¡Alphys!— voy más a prisa, tengo que llegar. Tengo que ver qué esté bien. Escucho gritos ¿Que le están haciendo?

—¡Alphys!— grito más fuerte y trato de avanzar más rápido, casi caigo pero debo de llegar. Me lanzó a la puerta y no puedo abrirla.

—¡Déjala!— es la voz de Frisk ¿Que está pasando? No puedo abrir. Empiezo a golpear la puerta, y los gritos siguen.

—¡Alphys, Frisk!— empiezo a golpear la puerta, no puede ser, no puede estar pasando esto.

Escucho más gritos, hay más personas, cierro mis ojos sin dejar de golpear la puerta.

—¡Abran la puerta!— los gritos cesan y la puerta se abre. La empujó para entrar, las luces están apagadas y giro para ver tras de mi al escuchar un goteo. Una criatura delgada y deforme, un humanoide esquelético con la piel estirada y brazos largos.

—¿Quien eres?— se va girando y noto en su mano un largo cuchillo.

—¿Dónde está Alphys y Frisk?— al verla de frente retrocedo petrificada. Era esa cosa.

—Yo te mate— logré verle lleno de polvo y sangre, movió el cuchillo notando que el goteo venía de su cuchillo con aquel líquido carmesí.

Retrocedi entre risas y ví el cuerpo de Frisk atado a una silla y en el suelo la ropa de Alphys y Papyrus, también de mamá y papá.

—Esto no es real— yo no lo hice.

—¿Crees que estás libre de mi?— esa voz.

—Aun no sabes de lo que soy capaz— me gire mirando la oscuridad y unos tentáculos se precipitaron hacia mi.

—¡Alejate!— abrí los ojos, para darme cuenta que estoy en mi cuarto.

—Alphys— me levanté rápido, pero me caí, trate de apoyándome en la cama para ver el bastón.

—¡Alphys!— trate de caminar, pero solo caí al suelo.

—¿Que haces? Te vas a lastimar— era mini, estaba aqui.

—Tengo que buscar a Alphys, ella está en peligro— la puerta se abrió y entonces respire.

—¿Que, que te paso?— Alphys se hinco en el suelo y solo la abrace.

Estaba aliviada de verla bien.

—¿Dónde están Frisk y Papyrus?— la mire y ella se veía confundida.

—Estan por irse a sus casas— solo había sido una pesadilla ¿O un aviso?

Alphys me ayudó a levantarme, me recostó en la cama, y me cobijo.

—Es mejor que descanses, ma... mañana hablamos— se dirigió a la puerta, al abrirla escuché las voces de Frisk y Papyrus, aquello me daba tranquilidad.

—Alphys— ella me miró.

—¿Me odiarias si me convirtiera en un monstruo?— ví su cara de sorpresa, cambiando a una de preocupación y miedo. Aquello me desgarro el corazón. Pero camino hacia mi y me abrazo.

—No podríamos odiarte— su abrazo era firme y fuerte, sin dudas. Al mirarla su rostro era feroz. Sentí como si fuera mi mamá, protegiéndome de todo.

Se alejo y salió del cuarto.

Las luces quedaron apagadas, ahora siento miedo ¿Seré capaz de protegerlos si Nigthmare regresa? Soy débil ahora.

Un alma rota [AU's de Undertale X Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora