Capitulo 47

572 101 11
                                    

Karma
***

Ha pasado mucho tiempo, desde hace años que estoy atrapada en las pesadillas de Nigthmare, sufriendo un sin fin de torturas, deseo morir, lo deseo con tanta fuerza, que le pido a esa criatura, le suplico que me mate, pero solo me mira y sigue entre risas.

La oscuridad ha tomado forma al paso del tiempo, de una enorme habitación, con los rostros agonizantes y llenos de dolor de todos aquellos a los que he matado y torturado, puedo reconocerlos, y recordar a cada uno y lo que les hice.

De pronto aparezco completa descalza sobre algunos de los rostros.

—No, por favor— ya no me quedaba más que suplicar

—Ahogame, destripame, desmiembra mi cuerpo, incluso quemame viva, pero esto no— tenía un arma en mis manos, con hornamenta de Gaster Blasters de mafiaSans.

—No me hagas repetirlo, ya no quiero matarlo— frente a mí estaba Papyrus, su mirada aterrada y sus lágrimas cayendo una tras otra

—No lo haré, no le disparate otra vez— a un lado de nosotros aquella asquerosa copia de mi, tenía a Frisk sometida y con una navaja en su cuello, ella estaba llorando y temblando de miedo tras aquella risa

—La matarás de nuevo, siempre la matas— no quería, sé que no son realmente ellos, no lo son, es solo una pesadilla más.

—Las mismas pesadillas y horrores que hiciste pasar a todas tus víctimas— Nigthmare apareció tras de mí

—¿Recuerdas que esto mismo paso en Mafiatale?— lo recordaba, recordaba que era Sans quien estaba en mi lugar, mientras sostenía a Frisk

—Se lo que pasará, y no lo haré— estaba temblando, ya no quería hacerlo

—Aun cuando dispare a Papyrus, matará a Frisk, lo sé, yo lo hice— lo recordaba, lo recordaba bien

—Parece que no deseas salvarla— no puedo, esto no es, no lo es

—No es real, no es real— ambos rieron, rieron mucho, se burlaban de mi.

—Si no es real, ¿Porque no disparas?— tenía razón.

—Vamos matalos, mata a ambos— era cierto. Los mire, los mire mucho, pero aún que no fueran reales...

—No puedo, no lo haré— de nuevo esa carcajada

—HEHEHEHE... Pero niña, ya lo hiciste— le mire y ví de vuelta, estaba apuntando a Papyrus, la pistola echaba humo y el pecho del esqueleto estaba perforado, sus huesos se habían roto por el impacto y sus ojos, sus ojos de sorpresa no dejaban de mirarme

—¿Humana _____?— y se desplomó convertido en polvo, escuche a Frisk gritar de dolor y esa criatura le rebanó la garganta. No podía soportar su mirada, sus ojos suplicaban que la ayudará, que hiciera algo mientras trataba de evitar que la sangre saliera, balbuceaba ahogándose con la sangre y trato de caminar hacia mi al ser soltada.

—Frisk...— no quería verlo, ya no y solo grite, grite muy fuerte.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.


—¿Cuanto más soportaras esto?—  abrí mis ojos apenas podía ver, pero podía notar a esa criatura frente a mí, estaba amarrada de mis pies y mis manos hacia atrás, empecé a ver a mi alrededor estaba sobre una silla alta rodeada de unas maderas y ramas pero lo que más me asusto fue sentir alrededor de mi cuello una cuerda.

La mire viendo con más claridad, lo reconocí, reconocía esos ojos desquiciantes llenos de adrenalina, de emocion, ya sabía que haría, lo recordaba, fue como yo lo mate, como yo lo torture, cuidando que su HP no bajará.

Coloco una bolsa transparente en mi cabeza e intente evitarlo, pero me golpeó una y otra vez. Me golpeó en el estómago hasta sacarme el aire y dejarme caer sintiendo la cuerda apretar mi cuello, pero ella me levanto para acomodar la bolsa y ajustarla apretó la cuerda y ví en su mano cinta adhesiva.

Intentaba respirar, me movía como podía, abría la boca lo más que podía por intentar tomar aire sintiendo como la bolsa se metia en mi boca, el calor del vapor por mi aliento humedecia la bolsa. De pronto empecé a sentir calor, mucho calor y después ese calor empezaba a quemar. Le prendió fuego a la madera, seguía moviéndome, necesitaba salir de ahí

—¿Porque no haces algo?— siento como el calor empieza a envolverme y escucho un crujido que me azota dejándome caer, el aire me falta mientras mis piernas se queman, lo único que me queda es gritar, solo gritar tan fuerte, aún que se que nadie me ayudara.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.


Abrí mis ojos una vez más, ahora estoy amarrada en una silla del torso, cuello, manos y pies, respiro acelerada, tomando bocanadas de aire, me siento mareada, todo me da vueltas mientras veo a esa cosa sostener unas pinzas en sus manos

—Hay no...— no sabía que hacer, no podía pensar, por más que intentará mi voluntad se había desvanecido hace mucho

La criatura levantó su brazo y con las pinzas comenzó a golpearme sin detenerse, desahogaba su ira sobre mi mientras ella gritaba entre balbuceos que no lograba entender.

Llegó al punto de mi demencia y mi alucinación que me parecía ver frente de mi a aquellos a quienes lastime, mate y torture, mirándome tan desesperados como ahora yo estoy.

"¡No!, ¡Por favor!, ¡No lo hagas!"

Dejó de golpearme y me miró un momento, y yo también lo hice.

"¡Ya no!, ¡Por favor basta!"

Sentía la sangre caliente en mi boca.

"¡DEJAME IR!"

Ya no podía moverme, no podía gritar, ni si quiera en mi mente

"¡Aléjate de mi!"

Escuchaba los gritos, los millones de gritos de miedo y dolor en mi cabeza, y grite de nuevo al sentir mi dedo ser masacrado

"¡DEJAME!"

Levanté la cabeza viendo como tenía unas tijeras de jardinería oxidadas, y las movía de un lado a otro intentando rebanar uno de mis dedos. Lo único que hice fue gritar e intentar jalar mi mano.

Rebanó cada uno de mis dedos, sin dejar ninguno para seguir con el de mis pies. Los gritos que escuchaba en mi cabeza comenzaron a mezclarse entre ellos y aún cuando gritaba los escuchaba, torturando mi mente.

"¡BASTA YA!"

Esa cosa no se detenía, por más que gritara, más brusco y agresivo era.

Empezó a reír, sacudiendo su cuerpo y con un tic en todo su asqueroso cuerpo, como una desquiciada. Para entonces ya no tenía dedos, ni pies, me faltaba ahora una mano y seguía con la otra. Me iba rebanando pieza por pieza buscando hacerme el mayor dolor posible y lo estaba logrando.

Poco a poco perdía el conocimiento por el dolor, pero esa cosa volvía a golpearme con fuerza para evitarlo y seguía rebanando mi cuerpo

"Solo acaba con esto"

Deseaba que acabará, mis gritos se escuchaban fuertes pero no tanto como para opacar esa infernal carcajada.

******************************************************

—Destruire tú conciencia hasta que seas solo un recipiente vacio—

Un alma rota [AU's de Undertale X Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora