Otras Mil y Una Noches

Capítulo 69

Sehrazat jadeó en el beso y Onur recordó de pronto dónde estaban. Se separó suavemente, lo que menos quería era que ella malinterpretara eso...

Se perdió en sus ojos que lo miraban con un dejo de melancolía...

-Deberíamos ir a la habitación...- le dijo en voz baja y ella arrugó la nariz.

-No dejaré que te quedes conmigo...- dijo en un tono que intentaba sonar enojado.

-¿Por qué no? ¿no era eso lo que querías?

-Estoy enojada, Onur... me haces sufrir... prefieres estar con esa... esa nueva arquitecta...

-No, no... mi vida... creí que entendías que cumplo con mis obligaciones... nuestra empresa está pasando por una crisis y... solo no creí que te pudiera afectar así...

-Pues... estabas equivocado...

-Lo estaba... por eso vine... a pedirte perdón... a estar contigo...

-¿Qué hay de esa...? ¿cómo se llamaba?

-Neylan... es una chica agradable e inteligente... pero no puedo sentir nada por ella...

-¿No puedes? - preguntó y se tambaleó un poco en los brazos de él.

-Porque estoy enamorado de ti, mi vida... mi corazón está cerrado a todas las demás mujeres...

-¿Estás seguro? - sus rasgos se habían suavizado.

-Segurísimo...- dijo y besó la punta de la nariz de ella- ¿vamos a nuestra habitación?

-No tan rápido...- dijo ella y sonrió.

-Mi vida... estás un poco borracha...

-No tiene nada de malo...

-No, por supuesto... pero te conozco y si seguimos aquí, probablemente mañana te arrepientas...- dijo y la apoyó contra su cuerpo para comenzar a caminar.

-En eso tienes razón...- dijo ella levantando el dedo mientras sus piernas luchaban por caminar decorosamente en forma recta.

Llegaron a la habitación y Onur la hizo apoyar contra la pared mientras buscaba la tarjeta para entrar en su bolso. El cuerpo de él la sostenía y Sehrazat se perdió en el aroma del cuello de él, comenzándolo a desear casi con desesperación...

Logró abrir la puerta y la abrazó para ayudarla a entrar. Ella miró sus labios y cuando sintió el sonido de la puerta que se cerraba, él la apretó entre sus brazos y la llevó hasta la cama.

-Onur...- balbuceó ella.

-No hablemos más...- le dijo él sobre sus labios y la besó con urgencia.

Sehrazat suspiró y sintió que todo ocurría en cámara lenta, él estaba sobre ella, sus manos acariciándola, se deseo evidente, rozándola, estimulándola increíblemente...

Perdieron la noción del tiempo, Sehrazat sintió su cuerpo estremecerse con cada caricia de él y luego, con torpeza al principio, pero luego con mayor determinación, fue su turno de devolverle sus caricias y Onur cerró los ojos con fuerza sintiéndola tan íntimamente...

El clímax les llegó a ambos al mismo tiempo y cuando se separaron, agotados, él besó sus labios y la abrazó para dormir...

Sehrazat se despertó y sonrió al sentirse abrazada cálidamente con Onur. Por un momento se sintió algo perdida, no recordaba todos los detalles de la noche anterior, pero recordaba la pasión y la entrega de ambos... eso estaba claro...

Sintió algo de náuseas y se levantó para ir al baño. Había tomado demasiado la noche anterior. Se tomó un analgésico y pidió el desayuno para ambos...