La Luz de mis ojos | Lumity (AU-Amity Lobo)

Prólogo

La luna llena se ponía en su punto, dejando ver una hermosa luz blanquecina sobre las Islas Hirvientes. Las nubes se iban alejando poco a poco mientras iban dejando ver las hermosas estrellas, para que todos pudieran contemplar el hermoso manto plateado arriba de ellos. Sin embargo, la luna llena traía consecuencias a los más desafortunados, no sólo se utilizaba la magia de la luna para las cosas normalmente hechas por las brujas. Sino que las maldiciones que todos tienen entre su ser y su aura se manifiestan al punto de la medianoche.

Justo faltaban cinco minutos para que dieran a la medianoche. La gente se empezaba a meter a sus casas, muchos ya estaban dormidos y otros esperaban en el bosque por el avistamiento de una bestia singular.

Una familia de cinco integrantes caminaba por el bosque, adentrándose más a ella. Estaban conformados por la madre, el padre, dos gemelos, y la hija menor de la familia. Todos caminaron hasta que llegaron a un claro, justo donde la luna alumbraba su hermosa platinada ante la familia Blight.

Alador, el padre, alzó su mano al aire tras un círculo con el dedo, haciendo parecer en medio del claro tres velas ya prendidas. Estas velas tenían una llama particular, cada una de ella constaba de un color diferente y en la figura de la misma vela se asomaba una letra bajo el mismo color. Los dos hermanos peliverdes, se pusieron enfrente de su respectiva vela. Sentándose frente a ella y mirando su llamada tan hipnotizante. Mientras que el padre hacía lo mismo, colocándose frente a la vela más grande que tenía la inicial del nombre de este.

La madre, Odalia, se dirigió a los alrededores del claro para sentarse en un tronco caído y observar a su familia desde ese momento. Lo último que quedaba detrás era la menor, la chica con el cabello color menta miraba su padre con ojos expectantes y sus pequeñas orejas puntiagudas se movían de un lado a otro concierto nerviosismo por lo que iba a pasar esa noche.

— Acércate — 

Habló el padre con voz ronca mientras veía su hija menor quién había venido caminando en muletillas y tenía un yeso en una la pierna. Dos días antes, había jugado Grudgby contra Boscha, siendo parte del equipo de Willow y la humana Luz.

Ella obedeció y se acercó, con pasos cortos y algo torpes por las muletas, quedando a unos 20 cm el círculo de velas. El padre y los dos géneros que se encontraban sentados miraron hacia el manto plateado y a la luna que se veía tan perfecta y su blusa irradiaba una sensación de tranquilidad.

— Es la hora — 

Dijo el mayor a sus hijos.

Los chicos peliverdes desviaron su mirada ahora en sus verdades respectivamente y con ambas manos empezaban hacer círculos en el aire a los costados de ellos. Alador, cerró sus ojos e imitó los movimientos de los gemelos. El viento comenzó a soplar alrededor de la familia Blight, y Amity, la menor, no estaba muy segura de que es lo que debía hacer ahora. La sangre que corría en sus venas además de ser una bruja hecha y derecha con gran poder y un futuro prometedor, tenía también una pequeña maldición heredada de sus antepasados y de su padre.

—Reciten conmigo— se escuchó a Alador decir

Los tres que estaban sentados en el claro empezaron a reciclar en latín lo que parecía ser un conjuro de iniciación en latín.

"Lobos vienen, lobos van. Sea por sangre o por maldición, la manada unida estará. Que los viejos ancestros se reúnan con nosotros y los nuevos cachorros se acerquen a la luz y se vuelvan uno con nosotros."

"Lupi veniunt lupi ad. Sive sanguinem sive in maledictum, eo quod non sit maxime unum. Sit vetus maiorum, ut veniat ad nos et super filios terræ consurgere facis nova lux apud ducatur et inveniar in nobis."