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"Malos hábitos"

La vida da muchas vueltas ¿no lo creen? En algún momento pueden estar en el tope de todo, pueden mantener las situaciones bajo control y sus secretos bajo la alfombra pero la vida es una montaña rusa, y yo era un claro ejemplo de eso. Pasé de tener toda esta situación bajo control a qué un extraño tuviese suficiente información como para desmoronar todas las barreras que construí.

-¿Kat estás escuchando?- dijo Alina por lo bajo.

-No estoy escuchando y tampoco me interesa escuchar- dije en un susurro. Estaba enojada, sentía como ese sentimiento de miedo e incertidumbre se apoderaba de mí y no me gustaba. Me había acostumbrado tanto a salirme con la mía que el hecho de que mi plan se viese amenazado por un intruso me hacía hervir del coraje.

-Y tú ¿Que opinas de eso Katerina?- dijo mi padre mientras arrastraba toda la atención hacia mi persona. Sentía la mirada de Mikhail presionarme como si de un botón se tratase, traté de ignorarlo pero persistía y por solo por eso me animé a responder.

-Bueno- respiré hondo- Sokolov siempre tuvo apoyo de las autoridades el país así que podía hacer cualquier cosa sin que nadie dudara ¿O creen que la muerte de Giorgio D'Alcázzari fue por puro azar?

-No creo que haya sido por el estado- dijo Mikhail antes de dar un sorbo a su copa de vino- El estado fue muy pertinente y transparente con sus operativos así que dudo que él hubiese permitido algo de tal magnitud- no pude evitar sonreír descaradamente y mirar a Iván que también me estaba mirando con burla.

-Ekaterina- mi padre llamó mi atención y me giré hacia él- контрпредметы (contraargumenta)

-Le explico Señor Petrov - dije enderezándome en mi asiento- D'Alcazzari era uno de los mejores espías que el gobierno tenía a su disposición, y si querían acabar con la mafia tenían que hacerlo desde adentro por eso necesitaban a alguien tan analítico, frío y calculador como Sokolov. Todo estuvo planeado desde un principio, la misión de desmantelar la mafia era secreta por lo que la mafia usó eso para tomar la delantera, así si D'Alcazzari intentaba comunicarse con el gobierno italiano la mafia lo mataría y el país lo haría parecer un accidente, y justamente eso fue lo que pasó- levanté mi dedo índice en señal de que me esperaran, tomé un pequeño sorbo de agua y continué- la mafia rusa mató a D'Alcazzari, el país lo hizo ver cómo un accidente y el gobierno estadounidense no pudo hacer nada al respecto porque era algo secreto. Es pura lógica.

-¿Y porqué el gobierno permitió eso?- preguntó Andrew con un semblante muy confundido.

-Negocios. Sokolov daba los nombres de los peces gordos que eran de interés del gobierno y a cambio el gobierno permitía que Sokolov manejara sus negocios y le brindase protección de cualquier persona que se quisiese revelar contra él.

-Te dije que era una bestia- le dijo Iván a Mikhail mientras palmeaba su hombro.

-Que pena que eso pasó hace más de sesenta años- dijo mi padre mientras daba un largo suspiro y se ponía de pie- Si desean vamos a la sala de estar para que puedan retirar los platos- salió sin decir más y mientras yo me quedaba sentada veía como todos salían atrás de él.

-¿No vendrás?- preguntó Iván en el marco de la puerta- Porque si te estás sintiendo mal puedo llevarte a casa- podía notar la preocupación en su voz, el de verdad estaba dispuesto a ayudarme.

New York nightsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora