𝘠𝘰𝘶𝘳 𝘦𝘺𝘦𝘴 𝘵𝘦𝘭𝘭 𝘐 𝘭𝘰𝘷𝘦 𝘺𝘰𝘶. (𝘚𝘩𝘪𝘬𝘢𝘮𝘢𝘳𝘶 𝘕𝘢𝘳𝘢)

𝙲𝚊𝚙𝚒́𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚌𝚞𝚊𝚛𝚎𝚗𝚝𝚊 𝚢 𝚞𝚗𝚘

Ｄａｎ

Seguíamos corriendo por el bosque intentando encontrar a Sasuke, llevamos mucho tiempo buscando, muchas horas, y cada vez es más difícil.

—Itachi, tengo que encontrarte —me detuve al sentir una mano en mi hombro.

Miré a mi lado y no ví a nadie.

—¿Jiraiya? —murmuré.

Agité mi cabeza.

—Estoy volviendome loca —seguí con mi camino.

—¿Encontraste algo? —preguntó Shikamaru.

—Nada, deberíamos de reunirnos con los demás —él asintió y fuimos en busca de los demás.

Al estar reunidos seguimos buscando sin separarnos, hasta que en un punto fuimos detenidos por un sujeto de máscara naranja.

—Hola, ¿Que tal todo ahí abajo? —preguntó con un tono demasiado infantil.

—¿Es de Akatsuki? —murmuré.

—Los de la aldea de la hoja corriendo en un lugar como este, quiero decir, son diez contra uno, eso es un poco injusto, ¿No creen? —asentí dándole nos razón.

—Por esa túnica, puedo ver qué eres de Akatsuki —dijo Yamato.

—¡Soy nuevo, mucho gusto! ¡Yo soy... Tobi! —dijo emocionado.

—Nuevo... —dije cruzada de brazos—. Quiero creer que conoces a Itachi.

—¿Itachi-senpai? Sí, aunque me da un poco de miedo —movió sus brazos jugando con las mangas de su capa.

—Ya veo. ¿Y sabes dónde está? —se cruzó de brazos y me miró, o eso creo.

—Sí, Itachi-senpai se fue por ahí —señaló el camino—. Se encontrará con su hermano y pelearán.

—Oh, ya veo, eso suena muy interesante. ¿Puedes dejarnos pasar? —pregunté con una sonrisa.

—¿Eh? No puedo, además, no somos amigos —abrí la boca ofendida.

—¿Qué dices? Claro que somos amigos.

—No tengo tiempo para esto —Naruto intentó atacar a Tobi con su Rasengan, pero el ataque solo lo atravesó.

De pronto Shikamaru fue arrojado a mi y ambos caímos al suelo, él encima mio.

—Se nota que te gusta estar sobre mi —le guiñé.

—No es momento para eso, Problemática, después lo haremos —solté una pequeña risa y me acerqué a sus labios.

—Los veo en la aldea —acerqué mi rostro a su cuello y dejé un beso ahí para después empujarlo lejos de mi.

Todos intentaron hacer algo para que Tobi se apartara, pero ninguno de los ataques podía darle. Me moví en mi lugar con impaciencia y aprovechando que estaban distraídos comencé a caminar lentamente para pasar al otro lado.

—¡Oye, no puedes irte! —abrí de más los ojos al ver que me vio.

—¡Lo siento! —comencé a correr a toda velocidad.

Mientras corría rogaba a kamisama que por favor estuviera a tiempo, que pueda llegar para salvarlo.

—¡Sasuke! —llamé deteniendome y gritando lo más fuerte posible.

Mis ojos se abrieron de más al ver cómo Itachi cae al suelo.

—¡No! —corrí a él y me puse de rodillas tomando su rostro—. Itachi, Itachi.

—Yo no... —murmuró Sasuke.

Me levanté y golpeé mi puño contra su nariz.

—Te lo mereces por todo lo que has hecho —lo tomé de su ropa y lo acerqué más a mi—. Vete, haz una tontería más y te golpearé con toda mi fuerza.

Lo solté.

—Creí que venías por mi —me puse junto a Itachi.

—Vine por él, merece estar junto a su mejor amigo. Después iré detrás de ti, ahora vete —asintió y se marchó muy herido.

Pasé mi mano por el rostro de Itachi.

—Sigues vivo —lo abracé.

—¿Dan? —se movió un poco.

—Sí, tengo que sacarte de aquí.

Me quité mi capa y se la puse a Itachi cubriéndolo.

—Transformación —dije tomando la apariencia de un hombre.

Como pude coloqué a Itachi sobre mi espalda y comencé a correr lejos de ese lugar.

Tiempo después llegué a una posada del pueblo más cercano del lugar y comencé a curarlo.

—Te tengo que llevar a la aldea en cuanto estés mejor —Itachi se movió un poco y comenzó a toser.

—¿Por qué te preocupas tanto? —preguntó adolorido.

—Sasuke merece tener a su hermano a su lado.

—¿Por qué ese afán? —solté un suspiro.

—Porque todos merecen ser felices al lado de las personas que lo hacen feliz y tú haces feliz a Sasuke —me alejé de él.

—Eso fue antes, ahora tal vez no.

—Te curé lo más que pude, necesitarás estar en reposo por mucho tiempo, y en cuanto lleguemos a la aldea recibirás tratamiento para esa enfermedad —asintió.

—¿Me aceptarán en la aldea? —sonreí de lado con afirmación.

—Sí, nos iremos en cuanto te sientas mejor, iré a comprarte ropa, mientras tanto descansa —tomé mis cosas y salí de la habitación.

Fui a la tienda de ropa más cercana y elegí la que más creía adecuada a los gustos de Itachi y después fui a comprar comida.

Al volver a la habitación él estaba dormido.

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—¿Estás seguro de eso? —pregunté caminando a su lado.

—Si uso mi verdadera apariencia, los enemigos internos de la Hokage me pueden buscar —explicó—. Por esa razón usaré está apariencia.

—¿Y como debo llamarte?

—Llámame Hiro Hiroshi —asentí.

—Qué original eres, Hiro —me burlé.

Ambos entramos a la aldea y nos dirigimos a la oficina de mi madre dónde encontramos a Kakashi, Shikamaru, Naruto, Sakura y Yamato.

—Dan —se sorprendieron al verme—. Me dijeron que desapareciste y que la misión falló, Itachi fue asesinado por Sasuke.

—Sí, bueno, se lo merecía por tonto —Itachi golpeó mi cabeza con su mano—. Solo era una broma.

—¿Quien es él? —preguntó Shikamaru en un tono celoso.

—Les presento a Hiro Hiroshi —dije riendo—. Mejor conocido como, Itachi Uchiha.

Todos se sorprendieron y entonces Itachi volvió a su apariencia real.

—Itachi Uchiha —dijo mi madre.

Itachi se acercó y se puso con una rodilla en el suelo y una ligera reverencia.

—Lady Tsunade, estoy bajo sus órdenes.

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