19

10.9K 1.1K 138
                                    

Cierro las fotos porque no puedo continuar viendo esas fotos, sentía que la única persona en la que podía confiar me había traicionado después de todo, lo mejor seria terminar con esto de una vez por todas, tomo mi celular pero cuando lo hago veo el anillo en mi dedo anular, lo miro unos segundos, me lo quito y lo aviento lejos de mi vista. No podía más con esta situación y mucho menos dejaría que siguiera engañándome de esa forma, sentía mucha desesperación pero ahora lo único que podía hacer era calmarme, no podía ir y armar un escandalo en su empresa, no era de ese tipo de persona. 

Pasan las horas y yo sigo en mi oficina, no había parado ni un segundo haciendo contratos y respondiendo los correos que tenia pendientes, solo así había logrado distraer mi mente y no quería regresar a la realidad en un tiempo. Mi celular suena varias veces pero no lo veo, así como Benjamín a entrado varias veces para asegurarse que todo este en orden aun cuando habían pasado dos horas desde la hora de la salida. 

- Él edificio esta completamente vacío. - Dice entrando nuevamente en la oficina. - A excepción de seguridad claro. 

- Puedes irte si quieres, tardare unas horas más.  -Le digo y sé que mi voz suena algo molesta. 

- Esperare aquí. - Dice y se sienta en uno de los sillones que esta a un lado del escritorio, nunca había estado tan adentro de la oficina y era raro tenerlo ahí sentado. - No se como pero tu amiga Halsey ha conseguido mi numero.

Esta vez tiene toda mi atención.

- Me dijo que no le respondes el celular y estaba algo preocupada. - Añade. - Le dije que seguías aquí y que no sabia hasta que hora regresarías. 

- ¿Solo ha dicho eso? - Pregunto ya que sabia que Hals no desaprovecharía su oportunidad. 

- Mmmm me ha hecho unas preguntas un poco raras. - Sonrió un poco por primera vez en todo el día. 

- No le hagas caso, es un poco atrevida. 

Él asiente, se levanta del sillón, camina hasta la silla frente a mi y se sienta. 

- Ocurre algo ¿Cierto? - Miro la computadora ya que se que si hablo sobre eso en cualquier momento comenzare a llorar. - Nora, se que no confías mucho en en mi pero quizá puedo ayudarte. 

Pienso un poco en si contarle o no, tal vez sabe algo. 

- Creo que Tayler tiene algo con su compañera de trabajo. - Le digo. - Sé que ya lo sabes ya que me acompañaste a... ya sabes. - Digo refiriéndome a cuando fuimos hasta su empresa. - Pero esta vez estoy más segura de que algo pasa entre ellos.

- ¿Cómo puedes estar segura? 

- ¿Le mentirías a una persona que amas? - Pregunto en lugar de responder. 

- Depende las circunstancias. - Dice. - No se si hay algo entre Tayler y la otra chica pero de algo estoy seguro y es que a veces hay que sacrificar algunas cosas por nuestro trabajo, aun cuando podemos lastimar a las personas que queremos, este trabajo no solo es cuidar personas, cuando entras te hacen firmar un contrato...- Se detiene un poco. - Creo que estoy fallando a ese contrato ya que no debo de hablar de el. 

- Prometo que no diré nada. - Él lo piensa y asiente. 

- Es un contrato en el cual no puedes hablar sobre tus trabajos más importantes, simplemente por seguridad, así se evita que más personas se involucren en ellos, por ejemplo yo no puedo hablar con mi familia sobre que haces en tu tiempo libre. - Como si hiciera mucho, pensé. - Así no llega esa información a gente que quizá quiera hacerte daño. 

Entendía esa parte pero eso que tenia que ver con Tayler y Lily. 

- Piénsalo un poco Nora, quizá piensas que Tayler te esta ocultando cosas pero puede ser solo por seguridad. 

Mi Salvación (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora