I don't know 《Sebastian X Tu》(TERMINADA)

Furor

Pov. Narradora.

La tarde era tranquila en la mansión Phantomhive, los corredores eran silenciosos, más que de costumbre. El pelinegro yacía sus labores domésticos por todo el lugar, comenzando a preparar la comida como de costumbre.

-Mmm... comenzamos a batir haciendo una mezcla poco espesa, mientras agregamos chocolate negro y blanco en porciones apropiadas y balanceadas... una vez lista la mezcla, se vacía  en un molde engrasado y enharinado para posteriormente hornearlo a 180 centígrados por 30 minutos -hablaba en voz alta el mayor mientras preparaba el postre que haría acompañamiento al puits d'amour (un horneado de masa de tarta y relleno con crema pastelera y mermelada de moras)- ¡¡muy bien!! -decía soltando un suspiro de cansancio- veré si se le ofrece algo a Lady ___ -afirmó terminando de lavar y limpiar la cocina para seguidamente caminar hacía la habitación de la chica- ¿puedo pasar My lady? -tocó la puerta con delicadeza, frunciendo el ceño al no recibir respuesta alguna- ¿sigue molesta conmigo? -pregunto, pero tampoco recibió respuesta- ¡voy a entrar! -informó girando la manija de la puerta para abrirla- 

Sus ojos inmediatamente se abrieron llenos de sorpresa al encontrar al rubio sentado en la silla del escritorio de la joven, quien giro la silla para poder ver al pelinegro y bostezo.

-creí que eras ___ -dijo con frustración-

-ya veo... -ignoró su comentario- ¿qué hace en el cuarto de Lady ___, joven Akemi?  -lo fulminó con la mirada-

-¡agg! -protestó dando giros con la silla como un niño chiquito- escuche que esta enojada conmigo -se detuvo- ¿es verdad? -lo miró atentamente-

-si, así es -respondió el pelinegro con el ceño fruncido- me sorprende que se haya enterado por si solo.

-¡oh! -río- ¿no me digas que crees que soy un peligro para la señorita ___? -hablo con burla y malicia-

-Nunca lo he dicho, pero veo que no hubo necesidad de que lo hiciera.

-JA JA JA JA -río a carcajadas- eres simpático, pero... aún así... ¿no crees que es repulsivo?

-¿Mhm? ¿qué cosa?.

- un demonio y un humano... -el pelinegro al escuchar aquello abrió los ojos con sorpresa-

-¿cómo s-sabe eso...

- ¿acaso... eso no es imposible Sebastian Michaelis? -lo interrumpió mirándolo con una sonrisa satisfactoria, al ver la furia acumulada en sus ojos y en sus puños cerrados- es una pena que el "simple mayordomo" de la familia Phantomhive, no pueda obtener tan facilmente a una bella rosa roja como la señorita ___, ¿no lo crees?.

-tch... eres igual de mocoso que tu padre -respondió el pelinegro con molestia-

-es posible... -habló con burla- pero... pronto tendré algo que tu no -río provocando una mirada de confusión en el mayor-

-¿qué quiere decir?

*** 

Pov ___.

Me encontraba escondida entre algunos botes de basura que impedían que las balas me atravesaran. No lo podía creer. La torpe sirvienta Mey Rin, estaba luchando contra aquel sujeto de ropas negras. Su personalidad en combate era totalmente diferente a la que suele mostrar todos los días. La habilidad que tenía con las pistolas era tan impresionante que ciertas veces me asomaba a ver. Aunque tuviera buena puntería, el sujeto de negro no se quedaba atrás, era muy bueno esquivando las balas, además de que había llegado otro sujeto encapuchado que protegía al de ojos zarcos de todas la balas.

Mey por más que tratará de derrotar a ambos era imposible, cada cierto tiempo se escondía para recargar las pistolas. Aunque aún sigo sin saber como le hizo para esconder esas dos pistolas en su vestido sin que yo lo viera.

-Señorita ___ -me llamó la pelirroja entre jadeos- regrese a la mansión, yo la protegeré.

-¡¿qué?! -espeté con sorpresa- ¡¡claro que no!! ¡no voy a dejar que mueras por mi culpa!

-Mi vida no importa, sino la de usted -dijo esquivando los ataques de los sujetos- eso es lo que implica ser la sirvienta de la familia Phantomhive -me sonrío con amabilidad sin dejar de disparar-

En ese momento no sabía que hacer o como reaccionar. Mi cuerpo completo había dejado de funcionar. Mis latidos palpitaban sin desenfreno y mi cabeza estaba en blanco. No sabía que hacer. Me había quedado estancada. Suspiré con pesadez, mirando a mis alrededores y encontrándome con lo que me devolvió el alma y la esperanza. En una de las pequeñas casitas que habían en ese sitio, tan solitario, encontré un ganado junto a un corral de búfalos, no pude evitar reír al pensar en porque demonios tenían búfalos y animales de granja ahí. Rápida y sigilosamente camine hacia ellos y con cautela abrí  el corral.

Aquellos animales al escuchar el "click" giraron sus cabezas como robots, viéndome fijamente y provocando que por toda mi espalda recorriera un escalofrío y terror. Camine lentamente hacia atrás, mientras estos no dejaban de verme. Sin darme cuenta, pise una ramita que provocó el enojo de los búfalos, quienes comenzaron a correr hacía mí entre bufidos de enojo.

-¡¡Oh Dios!! -gritaba mientras corría llamando la atención tanto de los encapuchados como de Mey Rin, quienes veían a los búfalos detrás de mi. Estos se sobresaltaron al ver que se acercaban cada vez más y de igual forma comenzaron a correr-

Al ver que me iban a alcanzar, me sostuve de un lazo que servía como tendedero subiendo por este y evitar morir por culpa de los búfalos.

-¡¡AHHHH!! -Gritaba con pánico Mey mientras corría junto con las personas que eran perseguidas por los animales-

-¡¡upps!! -exclamé con pena- olvidé que Mey estaba corriendo -dije entre risas nerviosas soltando el lanzo al ver un caballo correr, cayendo así encima de este y sujetar la cuerda de su cabezal- ¡yihaaa! -grité una vez logré controlar al animal-

Pov Narradora.

La gente de la ciudad corría por todos lados desesperadamente evadiendo a todos los animales, especialmente búfalos. Mientras estos corrían detrás de la comida, ___ cabalgaba en busca de la pelirroja, quien había salido corriendo como alma que se la lleva el diablo, esta al no encontrarla comenzó a preocuparse sin dejar de mirar a todos lados. De cierto modo se sentía  mal por haber hecho eso y provocado un caos en la ciudad, pero le reconfortaba saber que Mey estaba viva o eso esperaba, además se habían escapado los encapuchados.

-¡¡buff!! -suspiró con tristeza- ¿a quién engaño? ¡¡¡estoy pérdida!!!

-¿se esta divirtiendo mucho My lady? -pregunto detrás de ella una voz conocida por la menor, quien giró junto con el caballo dirección a la persona-

-S-sebastian... -río nerviosamente al verlo parado enfrente de ella con un muy notable ceño fruncido y cargando a la pelirroja ruborizada entre sus brazos-  

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¡Hey! ¡hey! he traído un nuevo capítulo Jajaja y me dan risa las dos situaciones, primero Akemi y Sebastian se nos ponen muy agresivos xd y después la solución que tuvo la rayis jaja, voy a admitir que fue gracioso imaginarlo, ya que en mi mente se ve super gracioso, o sea rayis solamente sale y provoca todo un desastre en la ciudad, es tan linda jsjs, bueno, bueno, espero les haya gustado, cuídense mucho y nos vemos en el próximo cap, bye bye UwU