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-No te vayas- pidió SungOh llorando y Tae lo miró dudoso.

-Pero amor, me tengo que ir a trabajar. Tienes que cuidar a tu hermano- SungOh negó aferrandose a la pierna de su padre y este suspiró.

-Llevame contigo. No quiero quedarme con él- decia apuntando a Siwon. -Mira que me hizo, mira, mira- decia apuntando su labio.

-Esta bien, vamos.- dijo recordando lo del dia anterior.

-¿Te lo llevas a que conozcan a su nuevo papi? Seguro ya viene otro como estos ¿no?- Tae lo ignoró y SiWon se acercó rápidamente tomando de su brazo. -Eres mio ¿entendiste? Espero que realmente estes trabajando- el menor asintió y dejó que Siwon lo suelte. -Te amo- dejó un beso en la mejilla del omega y después se apartó.

-Lo tuyo no es amor, Siwon- dijo peinando los cabellos de su hijo.

-¿Y tu que sabes? ¿Alguna vez te amaron?- Tae asintió. -¿Quien? ¿El papá de SungOh? ¿Te amó alguien que ni recuerdas?- soltó una risa y continuó vistiendose.

-Mi família- dijo recordando cuando vivía con sus padres.

-Seguro, se nota que te aman tanto que dejan que yo haga lo que sea contigo- no dijo nada, él jamás le habia hablado a su madre sobre el trato que SiWon le daba. No quería preocuparlos.

-Vamos, hijo, trae tu abrigo- SungOh asintio y corrió a buscar su abrigo.

Caminaron hasta la parada del autobus y subió con sus pequeños. HyunJin jugaba con un muñeco que su padre le habia comprado y SungOh miraba el paisaje y jugaba con Tae por momentos.

El omega no sabia que hacer, no sabia donde dejaría a los pequeños. Llevaba trabajando un dia en el estudio, además, no quería que JungKook supiera de SungOh, no así tan de repente. Aún no asimilaba haber encontrado a aquel alfa que este lo haya estado buscando.

-¿Quien nos cuidará?- preguntó SungOh curioso.

-¿Recuerdas cuando tenias que cuidar que HyunJin no hiciera ruido? Esta vez tendrá que ser lo mismo yo voy a trabajar super rápido y luego volveré a verlos. ¿Esta bien?- SungOh asintió. No le gustaba quedarse encerrado pero no tenían opcion, preferia eso a que SiWon volviera a golpearlo.

Bajaron del autobus y Tae rogaba que JungKook no estuviera llegando o saliendo. Quizás podría convencer a la muchacha de la entrada, parecia ser muy amable.

-Este lugar es muy bonito- dijo SungOh mirando todo tomando la mano de Tae.

-Lo es. Algun dia vivirás en un lugar como este, no importa cuanto cueste pero vas a estudiar en una buena escuela para ser un gran hombre- SungOh asintió y miró a su hermano que continuaba jugando con el muñeco.

-¡Vuela! ¡Vuela!- decía moviendo su muñeco.

Tae suspiró y bajó al pequeño de sus brazos.

-Esperen aquí, yo entraré y luego salgo. No le hablen a nadie-dijo Tae al mayor y este asintió.

Entró rápidamente sin perder el tiempo y miró a su alrededor.

-Señorita, disculpe. Yo... queria pedirle un favor muy grande-la chica asintió con una sonrisa.- Yo no he podido contactar con una cuidadora y no se en donde dejar a mis pequeños. ¿Es posible que los pueda traer aquí? Los dejaré aquí en el vestidor. Ellos son muy tranquilos, no van a salir de alli y le molestaran.-la muchacha miró sorprendida y luego miró hacía la puerta de salida.

-¿Tiene cachorros?- Tae asintió nervioso. La beta caminó hasta la salida y al ver a los niños sonrió.

-Yo los cuidaré, usted trabaje tranquilo- Tae llamó a sus hijos y estos se acercaron con cuidado. -¡Hola! ¿Como se llaman?- preguntó al mayor y este miró a Tae que le sonreía.

-Yo soy Kim SungOh y él es Kim HyunJin- dijo acariciando los cabellos de su hermano.

-Mi nombre es Park Roseanne. Pueden decirme Rose- SungOh olfateo disimuladamente y se confundió al no sentir aroma. -Vengan, vamos a jugar. ¿Quieren comer algo? ¿Les gusta el jugo de naranja?- SungOh asintió y HyunJin le acarició el cabello a la muchacha.

-Cualquier cosa me llamas. HyunJin ya sabe ir al baño, SungOh sabe como ayudarlo- Rose movio su mano y cargó al pequeño.

-Yo los cuido, tranquilo. Ve que el jefe preguntaba por ti- Tae asintió y se despidió de sus hijos.

-Mi papá siempre trabaja- dijo SungOh mientras caminaban hacia la cocina.

-¿De verdad? Es porque quiere lo mejor para ustedes- el pequeño asintió sonriente.

Cuando la preocupación por sus hijos disminuyó, lo invadieron los nervios de ver nuevamente a JungKook.

-Buenas tardes, señor Jeon- saludó haciendo una reverencia.

-Pasa- dijo JungKook con una sonrisa.

Habían hecho un acuerdo en donde seguirían con su vida normal. JungKook consideraba a Tae alguien muy ingenuo que creyó que no habrian coqueteos de por medio.

-Taehyung ¿Puedes pasarme el color cian?- el omega asintió y caminó hasta el depósito. Buscó cual podría ser el color cian y luego lo tomó en sus manos.

JungKook se quedó esperando y recibió la pintura cuando Tae se la ofreció.

- Gracias- dijo sonriendo. Observó a Tae haciendo su deber y luego soltó una tos seca. -¿Me traes un poco de agua?- el menor asintió y salió hacia la cocina privada del alfa.

-Aquí tiene, señor- le sirvió un poco e intentó no mirar a JungKook. Quería pedirle que dejara de mirarlo, se sentía incómodo.

-¿Comiste algo antes de venir?- Tae asintió y continuó trabajando.- Yo no ¿Me prepararias el desayuno?- preguntó mirando al omega al rostro.

-Claro, señor- respondió dejando de limpiar aquella mesa.

Si la paga no fuese tan buena se iría y buscaria otro empleo. Rogaba porque a Jimin se le pasara el celo para que pudiera ayudarlo.

-TaeHyung, ven aquí- llamó poniendose de pie.

-¿Sucede algo, señor?- JungKook se acercó a Tae y lo tomó de los hombros.

-Deja de ser sumiso, no te golpeare, no voy a gritarte. Dijismos que seriamos profesionales. Olvidate de quien soy, se como normalmente eres. No quiero verte agachar la cabeza ¿De acuerdo?- Tae asintió.-Toma confianza y dime JungKook, me sentiré halagado si me tratas con confianza. O si prefieres, JK. ¿Esta bien? Ven, tu prepara mi desayuno y yo el tuyo- Tae se sorprendió y JungKook pasó por al lado suyo para entrar a la cocina.

Una Carta a la Luna- KOOKV, YOONMIN, NAMJIN~ Omegaverse Where stories live. Discover now