Vo Slavu I: Paz y amor en el planeta Tierra.

37.

— Oh sí.

— Zally Blow, Anthony me dijo que te vería por aquí, sí que has crecido—llegó a saludar el Sr. Bessmerthi.

— Hola, si, hemos crecido—sonrío.

— Mándale saludos a tu hermano, él es un gran hombre, lo vi en el lanzamiento, de convirtió en un gran científico.

— Si, gracias, le mandaré su saludo.

Una alarma de la fábrica empezó a sonar, muchos se sorprendieron.

El Sr. Bessmerthi fue a revisar con sus empleados que había pasado, entraron a la fábrica pero poco después una gran explosión destruyó una pared de la fábrica. Todos se alejaron rápidamente para no salir lastimados.

— ¡Papá!—gritó Anthony.

— Tranquilo Anthony, llama a los bomberos y a emergencias—dijo Zally.

— ¿Y si tardan en llegar? Esta fábrica está algo alejada.

— Pues...—Zally no lo pensó más—. Estoy yo, Tony, iré a buscar a tu papá.

— Gracias Zally—dijo entre lágrimas.

— ¡Llamen a emergencias!—corrió hacia un lado donde no la vieran.

Zally usó magia, su armadura apareció e inmediatamente fue corriendo hacia la fábrica. La gente la vio sorprendida, hacía mucho que Red Girl no aparecía.

Al entrar vio que el fuego estaba alcanzando lugares altamente peligrosos, así que el tiempo estaba encima.

Encontró a varios trabajadores que también se habían unido para ayudar a los demás, vieron a Red Girl y la dejaron hacer lo que tuviera que hacer.

— Tienen que salir de aquí. Esperen a los bomberos.

Todos la vieron un momento y después se fueron corriendo haciéndole caso.

Zally siguió buscando, logró escuchar que alguien gritaba, pedía ayuda.

— ¡Auxilio! ¡No puedo salir de aquí!

— ¡¿Dónde estás?!

— ¡En la barra del sector 5!

— ¡Voy en seguida!

Hizo su escudo para pasar sobre un muro de fuego y logró ver al Sr. Bessmerthi, quien estaba en el suelo con una barra de hierro en la espalda que lo estaba aplastando.

Zally no lo pensó y usó sus fuerzas para mover la barra, era demasiado pesada pero no se rindió, tenía que salvarlo.

— ¡Rápido, el fuego se expande!

Sus manos irradiaron esa aura naranja, lanzó un grito y logró quitar la barra, liberando al Sr. Bessmerthi.

Zally lo tomó del brazo, hizo su escudo y lo ayudó a cruzar el muro de fuego.

— ¿Hay más personas aquí?

— Si, varios estaban en el sector 9, por favor, ayúdalos.

— Lo haré.

El Sr. Bessmerthi se fue, al salir vio que ya estaban los bomberos y las ambulancias ayudando a la gente.

— ¡Red Girl está adentro!

Junto con los bomberos, Zally salió con los últimos sobrevivientes que encontraron. Lamentablemente cuatro trabajadores habían perdido la vida.

Zally se sintió muy feliz de ayudar en algo así, vio a Cindy de lejos que le sonreía. Pero por otro lado, logró ver a un tipo extraño entre la multitud, uno alto con una capucha, el cual se dio cuenta que Zally lo veía, entonces se perdió entre la gente y desapareció.

— ¡Oye tú!—Zally corrió a buscarlo—. ¡¿Quién eres?!

Todos la miraron confundidos.

Solo pensó en que esa extraña persona había tenido que ver con eso.

— Red Girl, ¿qué pasa?—preguntó Cindy.

— Había un extraño aquí, yo lo vi.

— Así es—apareció detrás de Zally—. Esta vez yo no provoqué esto.

Zally volteó a verlo, estaba cara a cara con Aiden.

— Red Girl, que original nombre. Es posible que sepas vencer a mis Doas, pero no podrías conmigo.

— ¿Doas?—Pensó en las criaturas—. ¿Quién eres?

— Mi nombre es Aiden, solo eso te diré.

— ¿Por qué hiciste eso? ¿Por qué mandaste a esas cosas a matar gente?

— Para hacerte enojar—sonrió.

— ¡Todos, váyanse de aquí!

— ¿Por qué? Van a perderse de la pelea.

Zally se acercó a él y era justo lo que él quería solo para decirle al oído: "Sé quién eres, Zally Blow"

Por un momento quedó paralizada pero por suerte reaccionó.

— ¡¿Cómo te atreves?!—Sus manos irradiaron ese fuego naranja cuando sus intenciones eran golpear. Lo atacó con sus fuerzas pero él la esquivó fácilmente y le dio una patada que la sacó casi volando, Zally chocó con un camión de carga.

— ¿Ésta es su salvadora? Que penoso.

La gente solo veía con miedo, muchos se habían ido, Anthony se fue con su papá en una ambulancia, pero Cindy se quedó ahí, no iba a abandonar a su amiga.

— ¡Tú puedes Red Girl!—gritó—. ¡Gánale a ese infeliz!

La gente empezó a apoyar a Zally, esto distrajo un poco a Aiden. Entonces Zally le dio un puñetazo en la costilla, hasta logró rompérsela.

Aiden se quejó un poco del dolor.

— Maldición—fue lo último que dijo, extendió ambos brazos a los lados y desapareció en un rayo de luz blanca.

Ni Zally ni la gente entendía que era eso, pero todos concluyeron en que se rindió y se fue. Gritaron de felicidad y rodearon a Zally para celebrarla y agradecerle.

Cindy también se unió. Ella no podía ver la cara de Zally pero no sabía es que detrás de ese casco, Zally no estaba para nada feliz.