Vo Slavu I: Paz y amor en el planeta Tierra.

33.

Todos ya estaban desayunando antes de irse. Will tuvo que explicarle a Zeki todo lo que había sucedido el día anterior y finalmente todo quedó bien.

— Solo no regañes a Will, te prometo que no volveré a salirme de la escuela.

— Bien, pero si necesitas más tiempo, yo puedo hablar con la directora.

— No, estaré bien, a parte mi único animo de levantarme temprano es que desayunaré delicioso.

— Bueno—sonrió—. Hoy descanso, así que los esperaré con una comida deliciosa para que te animes más Zally.

— Muchas gracias hermano—lo abrazó—. Gracias por consentirme.  

— No estoy de acuerdo en que la consientas mucho pero yo también comeré, yo estaré en la oficina para hablar con Xenna—dijo Will mientras iba a lavar su plato—. Me voy, nos vemos en la noche.

— Si.

Zeki los llevó a sus destinos, primero a Zally y después a Will, donde decidió acompañarlo solo para ver que tal iba el proyecto de Xenna.

Ambos caminaron a los laboratorios y ahí estaba el robot que estaban construyendo y parecía ir bastante bien con el gran equipo que tenían.

Sin embargo, había un elemento de ese equipo que Zeki había olvidado, así es, Masha.

— Masha, ¿cómo va el cultivo de bacterias?

— Va muy bien, he hecho muchas pruebas pero necesitaré a Will para... otra prueba—dijo mientras veía a Zeki y a Will llegar.

— Muy bien, Will, necesitamos tu ayuda, ya oíste, vayan al laboratorio químico de enfrente. 

— Si.

Zeki y Masha se miraron, como si quisieran saludarse o algo así, pero solo fue la mirada.

— ¿Qué hace aquí Capitán? Es su día libre—Preguntó Xenna.

— Acompañé a Will y también quise echar un vistazo al robot. Es increíble.

— Si, enviaremos unas bacterias que reaccionan a la energía de la magia, por eso quería a Will en esto.

— Si...

— ¿Cómo vas con los de la NASA?

— Pues están más tranquilos con el meteorito, pero están investigando tanto como nosotros para averiguar de dónde vienen esas criaturas.

— Lo averiguaremos, la gente ya está muy alarmada y ni siquiera se sienten seguros con Red Girl.

— Ya habrá manifestaciones...

— Bueno, si te necesitamos para algo, te llamaré.

— Si, nos vemos Xenna.

— También si necesitas algo, ahí estaré.

— Si, gracias por todo—sonrió y la abrazó—. Nos vemos mañana.

Will estuvo con Masha, pero solo hablaban del trabajo, pero ya sabemos que Will se aburre muy rápido.

— ¿Y cómo va la vida en Moscú?—Preguntó mientras Masha preparaba las muestras en los portaobjetos.

— Bastante bien—dijo con seriedad.

— Oh... ¿Y la familia?

— Will, no estoy para charlar, a menos que sea del trabajo—dijo con un tono de molestia.

— Oye, no me tienes que hablar así, ¿tienes algún problema conmigo? Puedo irme si quieres.

— No, olvídalo, solo no hables.