Afraid of love (Harry Styles)

Capítulo 44: Apostemos

Descolgué el teléfono y me lo llevé a la oreja mientras avanzaba por la casa de Harry hasta la habitación que Anne había decorado en su día para que yo la utilizase.

-Dime, Hel.

-¿Dónde estás?

-En casa de Harry, ¿por?

-Pues ven a casa, tenemos una sorpresa para ti.

-Me das mucho miedo-contesté riendo.

-Tú ven

-Espero no tardar demasiado.

-Dile a Styles que no te entretenga y ven ya. Y ya puestos, tráelo.

-Vaaale, ya vamos.

Colgué antes de darle tiempo a decirme nada más y volví a la habitación de Harry, que estaba tumbado en la cama con el móvil en la mano.

-¿Qué quería tu hermana?

-Dice que vayamos a casa, que tienen una sorpresa.

-No se por qué pero eso me da miedo.

-Si, es lo mismo que yo he dicho hahaha-dije besándole.

-Entonces vamos, que tu hermana no es que tenga precisamente demasiada paciencia.

Recogimos todo y fuimos al garaje a coger el coche para llegar antes. Cuando llegamos a casa había un coche aparcado que era demasiado familiar. Claro, era el coche de mis padres.

-Ya se cuál es la sorpresa-dije mirando a Harry. Salimos del coche y entramos en mi casa. Fuimos al salón y tal y como e esperaba al ver el coche, mis padres estaban allí sentados con mis hermanos.

-Hola, familia.

-Aquí tenéis a vuestra hija desaparecida- dijo mi hermano riendo

-No te pases, Liam Payne

-María, no amenaces a tu hermano- me reprochó mi madre.

-Ya estamos- murmuré yo rodando los ojos.- ¿habéis venido desde Nueva York exclusivamente a echarme la bronca?-pregunté mientras reía.

-Para nada. –Intervino esta vez mi padre.- Se que os prometimos a Hel y a ti estar aquí para vuestro cumpleaños, pero no pudimos coger el vuelo por la nieve, ya sabes que volar en enero es difícil.

-Bueno, la abuela decía que más vale tarde que nunca, ¿no? No os preocupéis- dije caminando más cerca de ellos y abrazándolos a la vez en un abrazo que pronto se convirtió en uno familiar.

-Harry, únete, no te vas a quedar ahí tu solo.

-No quiero molestar- murmuró tímidamente, pero mi madre con su fino oído lo escuchó.

-No molestas, eres casi de la familia.

-Casi casi… -dijo Hel en voz baja.

-¿Qué quieres decir, Helena?- preguntó mi madre.

-Nada, nada. Yo no he dicho nada.- dijo recibiendo una mirada asesina mía.

Nos sentamos en el sofá y estuvimos hablando un buen rato hasta que Harry dijo que se tenía que ir.

-Espera, te acompaño al coche, que antes dejé ahí mis cosas.

Salimos de casa y llegamos al coche. Me colgué la bolsa en el hombro y me acerqué a Harry, pasando mis brazos por su cintura a la vez que el pasaba los suyos por mis hombros.

-Bueno, enana, me voy a ir yendo.

-¿Y si te quedas?

-Nada me gustaría más, pero tengo que volver a casa.