Capítulo 20: ¡Compras, compras y más compras!

12.4K 375 22
                                    

*Capítulo 20: ¡Compras, compras y más compras! *

 

(NICO)

Saber que iba a tener un hijo me había puesto eufórico y, aunque aún no he aclarado las cosas con Silvia, sé que lo ocurrido el otro día en el hospital nos había acercado un poco más. Desde ese día no me habla, y no creo que lo haga hasta que le explique todo pero no sé cómo hacerlo, la veo tan distante que tengo miedo de que no me crea. Aún así hay una cosa que no me cuadra… ¿Será verdad aquello que dijo Isabel de que Silvia le había quitado a Greg? Esa pregunta me tenía completamente descolocado, era una pieza de esta historia que no me encajaba para nada. Ese odio de Silvia por Isabel es demasiado fuerte y, si lo que dice Isabel es verdad, entonces sería ella la que debería odiar de esa forma tan voraz a Silvia ¿no? Aunque, la verdad es que no entiendo demasiado a las chicas, sus prioridades y molestias son distintas a las nuestras. ¡Está decidido! Sólo hay una manera de dar con la respuesta y esa manera es hablar con Greg.

Cogí mi móvil y lo llamé.

-¿Sí?

-¿Greg?-pregunté nada más oír esa voz.

-Sí ¿quién es?

-Soy Nico, mira, me gustaría hablar contigo ¿te importaría?-escuché un pequeño silencio del otro lado de la línea.

-N-no, claro que no.

-Bien ¿cuándo te va bien?-le pregunté algo extrañado por esa respuesta tan… no sé, por esa rara respuesta.

-Esta tarde si quieres, podemos quedar en el bar de la esquina de la plaza ¿sabes dónde es?

-Sí ¿entonces a las siete en el bar?

-Claro, allí estaré. No vemos-me dijo despidiéndose.

-Adiós-dije antes de colgar.

Me senté en el sofá y solté un suspiro. Sonó mi móvil.

-¡Hijo mío!-oí a mi madre al otro lado. <<¡MIERDA!>> quedé en hablar con ella y con mi padre para decirles lo de mi hijo y presentarle a Silvia.

-¡Ma-mamá!-exclamé completamente pálido.

-Cariño te llamo para avisarte de que en unos días estoy por allí, cómo mucho en una semana.

Se me cortó la respiración al oír esa frase. ¿Cómo le explico a Silvia que quiero presentarle a mis padres si no me habla?

-Oh, perfecto, no hay problema-mentí mientras mi corazón latía a mil por hora ¿Qué iba a hacer?

-Muy bien cielo, bueno te tengo que colgar, sino tu padre y yo llegaremos tarde a golf.

-Vale, adiós mamá-dije antes de colgar.

Si antes me senté en el sofá, ahora me tumbé directamente ¡Esto era un desastre, o arreglaba todo con Silvia o decirle a mis padres que cancelen el viaje! Ambas opciones eran complicadas. La primera: Conseguir que Silvia me perdone y segunda: Si ella no me perdona, a ver qué excusa me invento para que mis padres no vengan, difícil, muy difícil…

(SILVIA)

-A ver… el móvil, la cartera, las gafas de sol, una tableta de chocolate blanco, (antojos, sí, esta semana me dio por el chocolate y la anterior por ensalada con mucho vinagre… en fin…) las llaves de casa y del coche ¿Se me olvida algo?-me pregunté mientras llenaba mi bolso con las cosas antes nombradas y buscando con la mirada algo más que pudiese hacerme falta…-¡Buah! ¡No sé qué es lo que se me olvida!-exclamé frustrada, resignada a no saber que me faltaba, bajé al aparcamiento, en concreto, mi coche, en el cual estaba subida Cris con los brazos cruzados de esperarme.

Embarazada a los 16 (Editando...)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora