Mi amigo y yo

Capitulo 7 Rescate

Luego de un tiempo de haber estado caminando pudimos ver una ciudad en la distancia, tenía toda la intención de ir hacia allá, pero sin previo aviso varios guardias pasaron corriendo, prácticamente frente a mí, por un instante me asuste pensando que aquel numeroso grupo también quería atraparme pero para mi sorpresa continuaron su persecución sin fijarse más que un momento en mí

Tal vez los hubiese ignorado y continuando mi camino hacia la ciudad pero algo de lo que alcance a escuchar, cuando pasaron gritando como una jauría de perros de caza, me hizo recordar la vez que en la escuela, durante el descanso, aquellos chicos quienes todos los días me quitaban el poco dinero que me daba mi mama para comprar mi Lunch me persiguieron, sin descanso por todos lados, porque aquella vez en lugar de entregárselos había decidido escapar

Hasta que finalmente me atraparon, acorralándome en una lejana esquina, donde nadie pudo escuchar mis llamados de auxilio mientras me empujaban de un lado al otro, como si fuese una indefensa pelota, hasta que se cansaron del juego y tras quitarme mi dinero me habían dejado llorando en el piso con las rodillas sangrando luego de que me hubiesen empujado demasiado fuerte

Después de eso prefería entregarles mi dinero sin protestar, quedarme con hambre y sin decirle a nadie de las amenazas que me hacía, pero furiosa por no poder hacer nada para resolver aquel diario problema

Sin pensarlo realice un Grand Jete para tomar impulso y abriendo mis alas volé por encima de las altas copas de los árboles para poder ver hacia donde habían ido, pero no lograba percibir ningún movimiento inusual, al parecer se movían con mucha agilidad y cautela para no alertar de su presencia a quien buscaban atrapar.

Seguí buscando desde el aire, sin éxito, hasta que unos agudos gritos pidiendo ayuda hicieron que rápidamente volara hacia una distante depresión, al acercarme allí me di cuenta que se trataba de la caída de una poderosa cascada. En ese lugar los guardias habían logrado acorralar a una chica, quien trataba desesperadamente de escapar escalando las húmedas y traicioneras paredes que la rodeaban. A pesar de las fuertes caídas que recibía, al fracasar en sus intentos, a pesar de las burlas que recibía de los guardias que la rodeaban por todos lados, ella seguía intentándolo una y otra vez mientras sus acosadores se acercaban para intentar capturarla.

Aun volando me acerque con cuidado para no alertar a los guardias de mi presencia mientras observaba lo que sucedía. Así fue como pude ver que tras volver a fallar en su intento por escapar, ella se dio cuenta que la única opción que tenía sería la de enfrentar a los guardias: a pesar de las lesiones que había sufrido por las caídas, con un ágil movimiento salto sobre el guardia que estaba más cercano a ella. Su ataque hubiera sido exitoso pero sus agresores, al parecer, ya esperaban eso pues varios de ellos iban armados con largas varas metálicas con las que fácilmente interceptaron su salto, derribándola dolorosamente hacia donde otros guardias, armados con Batones metálicos y gruesas redes intentaron atraparla; pero ella sin rendirse, evadió las redes para después volver intentar atacarlos

Era tristemente una batalla perdida y era evidente que ella lo sabía, pero no estaba dispuesta a rendirse, a pesar de que a cada intento que hacia recibía varios golpes de sus agresores. Obviamente la táctica de aquellos guardias era el de debilitarla para poder capturarla

"vamos arañita solo lo haces más doloroso para ti" dijo uno de los guardias después de haberla golpeado varias veces con un pesado Baton "no me importa seguir lastimándote, pero será peor para ti" agrego mientras los demás reían de los esfuerzos cada vez más débiles que ella hacia

"pero mientras decides rendirte practicaremos un poco contigo" dijo otro mientras le daba un feroz golpe por la espalda con su larga y dura vara, cuya fuerza no solo la derribo sino la lanzo unos metros hacia donde estaban sus otros compañeros, quienes pudieron patearla varias veces antes de que ella lograra alejarse, ponerse de pie y estar, débilmente, en guardia