Capítulo 22

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Dormir a tu lado

Quería desaparecer ... subir en humo, pasado, fantasma. No pude reconocerme en ese momento. ¿Cómo podría arrojar tantas preguntas sobre él así? Preguntas que probablemente nunca esperó que pudiera decir ...

Llegó el camarero, trayendo una botella de vino. Me serví dos vasos y me fui. Solo miré la vista de la playa, con las manos apoyadas en mi cara y vi que ya había estropeado la noche así.

 Y cuando me di cuenta, él había vuelto. Estaba sentado a la mesa, pensé en pedirle perdón por todo. Pero él solo me miró con una leve sonrisa en su rostro. En serio, no lo entiendo.

Christopher: ¿Quieres ir a la playa?- preguntó.

Acepte un poco confundida. Caminamos sobre esa arena, en dirección al mar. El cielo no estaba muy estrellado, las grandes ciudades tienen esta enfermedad, pero la luna estaba allí en la esquina, menguando, como si fuera una sonrisa del cielo.

Se quitó los zapatos y los calcetines y los llevó en la mano.

Christopher: Me encanta sentir esta arena ... - comentó. - Perdón por invitarte y no cenar. Pero ese lugar también me estaba asfixiando ... No suelo ...

Dulce: "Lo siento"- lo interrumpí. - No puedo creer que fuera tan estúpida como para atacarte con esas preguntas.


Él le dio una pequeña sonrisa. Una sonrisa que no entendí el significado.


Christopher: ¿Escuchaste mi conversación con Anahí?- Preguntó.

Agache mi mirada totalmente avergonzada. Seguimos caminando, a pasos lentos, siempre hacia el mar.

Dulce: ¿Cómo lo haces? - Yo pregunté. Me miró sin entender. - ¿Aceptas todo lo que hago tan fácilmente?


Christopher: Dulce ... sobre la pintura, ya dije que no me importa que pintes. En cuanto a esas preguntas ... - suspiró. Un suspiro largo y triste ... - No estoy preparado para hablar de eso, de ninguna de las preguntas que me hiciste.

Dulce: "No tienes que prepararte"- le dije, poniendo mi mano sobre su hombro. - No tienes que decir algo que no quieres ... mucho menos a alguien que conociste hace dos días.

Se detuvo y se sentó en la arena, sin importarle si se ensuciaba los pantalones o no. Hice lo mismo y me senté a su lado.

- Pero siento que contigo puedo abrirme ... - dijo mirando al cielo. - Pero... todavía no puedo hacerlo ...  

Me alegró escuchar eso. Mis ojos comenzaron a pesar. Tenía sueño Tuve un día ocupado, haciendo una bufanda, tratando de organizar mi ropa y teniendo un ataque de pintor.

Christopher: "Eres una pintora talentosa", dijo. - Aunque no entiendo nada sobre este tema - mostrando una sonrisa, avergonzado. Sólo devuelve la sonrisa. Bostecé y sentí que mi cuerpo se iluminaba. - Simplemente no me gustó lo que pintaste ...

Dulce: Tampoco sé por qué lo pinté- dije casi en un susurro. - Fue solo algo que vi anoche ... - Mi voz apenas sale.

Christopher: ¿Un recuerdo?


Dulce: Quizás...

Y terminé dejando caer mi cuerpo a un lado, apoyado contra el suyo. Puse mi cabeza sobre su hombro. Como estaba cansada ... porque si fuera normal, no me habría acercado tanto. Ni siquiera parecía importarle.

Christopher: Si fue un recuerdo, no debería ser algo bueno ... - comentó.

Dulce: Ni siquiera quiero pensar en eso- dije suavemente mientras me acurrucaba junto a él.

Christopher se rio entre dientes.

Christopher: Creo que alguien estaba trabajando mucho mientras yo estaba fuera ...

Dulce: Limpié la casa ... necesitaba ... hacer ... algo ... por ti ...

Mis ojos se cerraron. Podía escucharlo decir:

Christopher: Um ... Anahí tiene razón ... te pareces mucho a ella ...

Y luego, me quedé dormida...

Memoria PerdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora