Me perteneces 💗 [RUBEGUETTA]

[CAP 5]

Rubius

El coche se puso en camino a las calles de la ciudad. El señor De Luque lanzo un gran suspiro y cambio de postura mientras tiraba de sus pantalones. Tomando nota me dije: "Calladito estas mas bonito" Una sonrisita asomo mis labios.

Contemple las luces de la ciudad desfilando por la ventanilla. Las calles estaban llenas de transeuntes despreucupados que parecian no tener ningún problema en la vida. Supuse que en otras circunstancias, si el mundo no nos odiara tanto a mi familia a mí,yo podría haber sido uno de ellos. Pero tal como iban las cosas, no era este el caso.

-¿Por qué haces esto, Ruben?

No estaba preparado para decir dicha informacion y sin duda no figuraba en mi contrato. Preferí no intimar demasiado con el hombre que me acaba de comprar.

-¿Y por qué lo haces tú?-le repliqué-

Volvio a fruncir el ceño y en cierro de modo me arrepenti de haber sido tan impertinente teniendo en cuenta todas las formas con las que él me podia castigar. Aunque solo se arrepintio una pequeña parte de mi

-¿Eres consciente de que ahora me perteneces?Es mejor que no se te olvide. No soy un tipo cruel por naturaleza, pero tu descaro y tu actitud infantil me estan haciendo perder la paciencia-me advirtió con una expresión severa.

Seguramente yo debía parecer un gatito asustado, porque así era como me sentía, pero aun así le mire a los ojos, mi orgullo me impidió apartar la vista. O a lo mejor no despegaba los ojos de él por miedo, por si advertía algún movimiento repentino. Pero lo más probable es que se debiera a que era un ejemplar hermosísimo y maldije por el omega que había en mí por ser tan débil.

-Oye, se que no es la situacion ideal para ti y que probablemente tienes  tus razones para haberla aceptado, al igual que yo-empezó a decir-Pero como tenemos que vivir juntos para siempre al menos intentamos llevarnos bien. No quiero estar peleándome contigo a todas horas. Haras lo que te pida y se acabó . Si no quieres contarme nada de tu vida personal, de acuerdo. No te haré mas preguntas. Pero ahora me perteneces y no tolerare el menor descaro, Ruben ¿Lo has entendido?.

Arrugué el ceño y aprete los dientes.

-Perfectamente.Hare lo que me pides, pero no esperes que me guste.

Una perversa sonrisita paso por sus labios y entonces puso una mano sobre mi muslo. Lentamente empezó a acariciarme mientras sus dedos ascendían y se metían bajo mi pantalon. Se arrimó a mí hasta que noté su calido aliento en mi punto de olor y se me erizó la piel con una sacudida de placer.

-Oh, pues a mí me parece que sí te va a gustar, Ruben.

Su voz rasposa me hizo sentir escalofrios y luego pego sus labios debajo de mi oreja y me besó con la boca entreabierta mientras posaba sus largos dedos en mi entrepierna. Mi cuerpo estupido y traidor respondio a sus caricias permitiendo que sus expertas manos hicieran conmigo lo que quisieran. Creo que incluso se escapó un gemido de mis labios cuando el aparto su mano.

-¡Ah, ya hemos llegado! Hogar, dulce hogar-exclamo al detenerse el coche.

Al arrancarme de la acometida de placer que el señor De Luque me había provocado, miré por la ventanilla tintada. La casa no era nisiquiera una casa, sino una mansíon. Era enorme. Podia albergar una ciudad entera. Si no lo conociera, hubiera pensado que era para intentar compensar su anaconda, pero por supuesto no era este el caso.

El señor De Luque ¡por dios odio llamerle así!..bajo del coche y me ofrecio su mano para ayudarme a salir. Rechaze su ofrecimiento y me baje yo solo. En medio del enorme camino circular de ladrillos de su entrada, había una fuente de piedra tenuemente iluminada con luces blancas. Unas columnas de agua se alzaban en ella y caían en una piscina de cristal. Al volverme para contemplar el resto del entorno, no vi más que césped perfectamente cortado y arbustos simetricos en la entrada.

-Es por aquí, joven-me indicó Alexby tomando la bolsa de mis manos y haciendo que me volviera a fijar en la casa

Unas columnas blancas que se alzaban hasta la enorme galería de la segunda planta de la entrada. Alexby abrío de par en par la puerta doble para que entrásemos y el Hombre misterioso me indicó con su mano que pasara yo primero. El suelo era de marmol y el alto techo tenía forma de abovedada.

Pero lo que me llamó la atencion sobre todo fueron las escaleras. Estaban en medio de la entrada y se extendían hasta el rellano donde se dividian en dos tramos que conducían a direcciones  opuestas de la casa. Parecia uno de esos escenarios en los que una princesa aparece en lo alto de las escaleras y espera a que anuncien su llegada a la multitud que la observa pasmada a sus pies mientras baja delicadamente.

Yo, en cambio, seguramente tropezaría en el primer escalón y bajaria rodando por la escalera como una pelota para acabar estampándome contra el suelo. Y no seria un elegante descenso. Creeme

-¿Que te parece?-me pregunto el señor De Luque abriendo los brazos para que admirara su mansión. Saltaba a la vista que estaba orgulloso de ella.

-¡Bah!, no está mal si lo que te gusta es alardear de tener dinero-le solte encogiendo los hombros como si me estuviera aburriendo.
Pero en realidad estaba impresionado. Muy impresionado.

-Heredé la casa. Y no me gusta alardear de ser rico-añadio-Subamos arriba para estar en un sitio más comodo y dormir un poco. Ha sido un largo día y tengo el presentimiento que mañana lo sera todavia mas, y seguramente cada día a lo largo de nuestras vidas.

Se giro y empezo a subir las escaleras, esperando que yo le siguiera

-Por lo visto estamos de acuerdo en algo, señor De Luque-le dije

Se paró en seco y me lanzo una mirada confundida.

-Me llamo Samuel-dijo calmadamente, y luego siguio subiendo la escalera-Solo sirvientes me llaman señor De Luque.

-¿No soy yo acaso un sirviente?Porque me estas pagando para que me quede en tu casa, como a ellos-le solte

-Creeme, a ellos no les pago tanto como a ti-replico girando para subir la escalera derecha-Tu no te separarás de mi durante toda tu vida y la gente tendra que creer que somos una pareja de verdad. Y si vas por ahí llamandome señor De Luque no se lo van a tragar.

-De acuerdo,Samuel~!-respondí pronunciando su nombre para ver cómo sonaba en mi boca-¿Cual es mi habitacion?-le pregunte al llegar a un largo pasillo con las paredes decoradas con pinturas de su familia y el mismo.

-Nuestra habitación es la del final del pasillo-repuso sin detenerse.

-¡Espera!¿Has dicho nuestra habitacion?

-Si, dormiras conmigo¿Acaso no te lo especificaron?

-Pero si ni siquiera hemos hablado de los términos del contrato-le recordé

Abrio la puerta del final del pasillo y yo le seguí. En cuanto entramos a la habitacion, cerro la puerta y me inmovilizo contra ella arrimandose a mi cuerpo.

-Los terminos del contrato son muy sencillos-dijo rozándome con los labios la piel del cuello-Ahora tu me perteneces y yo puedo hacer contigo lo que se me antoje.

Me beso con brusquedad en la boca, pero no le devolvi el beso. Luego deslizo con suavidad sus labios contra los mios, intentando que yo le respondiera.

-Bésame, Ruben-dijo pegando sus labios a los míos y presionando eso que abultaba bajo sus pantalones contra mi entrepierna.

-Te gustará, te lo garantizo..

——————————————————

Aqui otro capitulo mas!!!
Perdon por los errores ortograficos
Sin nada mas que decir
Chau, chau 😎🔪
Voten si les gusto 🔪🖤