❁ 𝟱𝟬 𝐑𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐃𝐄 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃 ❁

❁ Capítulo 30 ❁

Ya habían pasado dos semanas, Sonic ya podía caminar sin ayuda, y durante ese tiempo, he estado yendo a citas con un psicólogo por el suceso, no quería que ese suceso me afecte en un futuro. 
Por primera vez, Speed para moverse a su trabajo tuvo que irse en transporte público, ya que su auto aún seguía en reparación. Me causaba risa que después de trabajar, se quejaba del transporte y no tenías espacio para ti mismo. Aún me quedé unos días más en su casa, y también le hablaba a mi amiga para que no se sintiera sola. 

Por este día, Sonic me dio una sorpresa, quiso llevarme a un teatro a ver una obra que es recomendada por muchísimas personas del lugar. Tuve que arreglarme lo más elegante que pude.

— Por suerte está a unos cuantos de aquí, así que solo debemos de salir de la privada y caminar 5 minutos.— expresó Sonic mientras se acomodaba la corbata negra de su cuello.— No pienso ir de nuevo en transporte.

— Bienvenido a la pobreza.— dije en modo de burla. 

Me senté frente al espejo y comencé a maquillarme. No suelo colocarme mucho, solo sombra de ojos rosa, un delineado muy delgado, mascarilla de pestañas y un brillo labial. Me gustaba estar al natural. 
Sonic se agachó a mi altura y miró el espejo.

— Me encanta como te ves.— comentó y mis mejillas se tornaron rosas. 

Pronto, salimos de casa y nos dirigimos al teatro. Toda la ciudad aún estaba viva, muchos autos rondaban por las calles, varias personas caminaban por las calles, y una de ellas éramos nosotros. La ciudad aún estaba en movimiento. 

Llegamos, y entramos en seguida. Nos sentamos y en lo que empezaba la función, Sonic me habló sobre nuestro futuro.

— ¿Te has imaginado tu boda? — preguntó.

— Sí, desde niña me la he imaginado, estar de blanco y me derrito al pensarlo. 

— Obviamente me refiero a que si lo has imaginado conmigo.— sonrió con los ojos cerrados.

— La verdad no.— respondí con toda sinceridad.— No pensé que estuviera contigo. 

— Bueno, ahora la puedes imaginar. Tú, vestida de blanco será lo más hermoso que mis ojos hayan visto en toda mi vida. Y tener nuestra fiesta con todos nuestros amigos. No podré esperar la noche de bodas.— reí y le di un pequeño golpe en su hombro.— Después de eso, tener nuestra luna de miel en alguna parte del mundo, la ciudad o país que tu elijas. Volveremos a cumplir nuestros sueños más grandes y tener un hijo. 

En ese instante, abrí los ojos y por poco me ahogaba con mi propia saliva. Comencé a toser un poco y las personas de mi alrededor me vieron confusos. Traté de calmarme y me relajé. 
Tomé otras bocadas más de aire e inhalé el aire suficiente para disfrazar mi miedo. 

— ¿Tener un hijo? — dije con una sonrisa falsa.

Alguien de ahí avisó que la obra ya daba su inicio, y pidió que todos los que se encontraban en el lugar permanecieran en su lugar y en silencio. 

Tenía demasiada emoción por ver la obra, pero después de que Sonic mencionara sobre tener un hijo, me quitó todas las ganas que tuve desde un principio. No estaba lista para tener y criar un hijo, es una de las cosas más difíciles, y pienso que no seré buena madre. 
Me centré en mis pensamientos, no oía lo que hablaban los actores que se hallaban frente mío. 
Por más que quería prestar atención, mi cuerpo me lo impidió. Por suerte, Speed no notó todo esto que me sucedía. 

Al finalizar, salimos del lugar, no estaba segura de qué responder si me preguntaba algo relacionado con la obra, no presté atención y me sentí mal por ello.

— Realmente fue una de las obras más cómicas que he visto, de verdad, me sacaron una buena risa.— comentó acerca de lo que fuimos a ver, reí falsamente y continué caminando.— ¿Viste como se cayó el personaje principal? Eso fue demasiado gracioso.

— Sí, fue bastante gracioso.

— Eso no pasó y noté que desde que te mencioné sobre tener un hijo, tus ánimos bajaron. ¿Hay algo malo en ello? Digo, es tu decisión también, al fin de cuentas.

— Aún no estoy preparada, quiero hacer demasiadas cosas, seguir trabajando, viajar a todos los países que tengo en mi lista, alcanzar mi más grande sueño, ser alguien en la vida, y tener dinero por mi propia cuenta, no por alguien más, es obtenerlo gratis y no vale eso para mí. Agregando que no estoy segura que sea una buena madre.— finalicé la conversación.

El silencio incómodo estuvo entre ambos, seguimos caminando hasta llegar a casa. 

Entramos, y en seguida fui por mi crema especial para quitarme el maquillaje. Me lo quité y me dirigí al baño a lavarme el rostro. Sonic solo se cambió de ropa y se lavó los dientes, al igual que yo. No me habló, ni siquiera se tomó la molestia de verme, o de decirme buenas noches, extrañé un poco eso. 

Antes de acostarme, tomé mi collar que tenía guardado entre mi ropa, nunca me lo pongo porque siento que podría perder aquello tan apreciado. 
Cuando era niña, mi mamá me lo dio, como símbolo de su amor, y teniendo el collar en sus manos, prometió jamás dejarme sola, aunque no estuviese en la Tierra. 

Con pocas lágrimas en los ojos, acaricié la cadena de oro.

— Perdón mamá, solo no estoy preparada para un hijo.— dije en mi mente acostándome.

Minutos después, dejé la cadena a un lado mío, y me acomodé para dormir. 

Al día siguiente, me encontré una nota en su almohada, diciendo que necesitaba trabajar, porque una empresa contactó a la suya en busca de negocio. Decidí hacer un poco de limpieza, estaba demasiado aburrida estando encerrada.

🌸 Narradora 🌸

El empresario, se dirigía a una prisión, la prisión de Green Hill. Estaba serio, y no lucía nada contento. Tardó en llegar a su destino, pero al final lo cumplió.

Contactó a la persona que le prometió entrar para ver a cierta persona. 

— La comunicación será a través de unos teléfonos, y estará protegido por una ventana de cristal, por lo que no tendrán ningún contacto físico.— explicó la persona, quien lo iba a dirigir con la persona que quería hablar.— Me alegra que ya esté bien de su rodilla.

— Muchas gracias.

Ambos entraron al lugar, todo estaba escoltado por oficiales, vigilando el área. Se dirigieron a la sala de visitas, sentaron a Speed en una silla y tuvo que esperar a que llegara esa persona.

Unos cuantos minutos pasaron y él ya se encontraba frente a Sonic. Ambos tomaron el teléfono.

— ¿Qué quieres inútil? — preguntó de manera grosera.

— ¿Crees que no lo sé Shadow? A Amy le detectaron un desgarre en el cuello uterino, ¿qué le hiciste mientras ella dormía en la habitación? — preguntó enojado.

Las risas del erizo negro invadieron la línea telefónica, Sonic solo esperaba la respuesta de su pregunta.

— Mis planes salieron a la perfección, desde un principio sabía que terminaría aquí, pero me aseguré de tenerles un regalo de bodas cuando ustedes dos se casen.

Sonic estaba confuso de sus palabras, sus ojos brillaban más de lo normal, dejando salir su ira.

— ¿¡Qué es lo que quieres decir!? — preguntó confuso.

— Tranquilo, no te exaltes de esa manera, solo es que podría tener un hijo, eso es todo. Recalco que no será tuyo. 

Inmediatamente el erizo azul se sorprendió, y sintió que le faltaba el aire. Luces de colores aparecieron en su vista, y pronto perdió el conocimiento.

Continuará

Capítulo 30