TERMINADA//2°da parte en mi perfil// ASH DRAGONS//
La vida de Roxane Lestrange nunca ha sido fácil.
Ahora vive con sus tíos en la mansión Malfoy desde que Walburga Black murió.
Va a empezar su segundo año en Hogwarts, ya que estudió en Durmstrang...
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-¿Qué es esto Charlie?- pregunté.
La sala estaba llena de pequeñas luces flotantes que parecían luciérnagas. En un rincón había dos sillones y un sofá con varios cojines y un par de mantas. Entre ellos había una mesita con dos tazas de las que salía un hilo de vapor. En frente de la mesa el fuego crepitaba en una pequeña chimenea dándole calidez a la sala.
En otra esquina había un pequeño árbol de navidad decorado con espumillones rojos. Y en el techo había unas guirnaldas navideñas.
-La sala de los menesteres. Es una habitación en la que una persona sólo puede entrar cuando tienen una necesidad. A veces está ahí, y a veces no lo está, pero cuando aparece, siempre está preparada para las necesidades de quien la busca. - explicó.
-¿Y cual es tu necesidad? - pregunté mirándole a los ojos.
Poco a poco Charlie se acercaba mientras yo retrocedía, hasta llegar a tocar la pared y no poder dar más pasos.
-Mi necesidad, - sus ojos conectaban con los míos y cada vez estaba más cerca. Sentía su aliento chocar contra mi piel - eres tú.
Le miré un instante y vi sus ojos con un brillo que no tenía desde hace tiempo.
-Charlie.- susurré recorriendo con mi mano su mejilla antes de besarlo.
No me había olvidado.
Al separarnos le vi sonreír. Me tiré a abrazarlo y sentí sus fuertes brazos agarrándome. Pegándome a él.
-Esto no puede ser real.- dije separándome de él y bajando la mirada confusa- Yo te borré la memoria. Tú no deberías recordarme.
-Y no te recordaba. Al principio.- dijo el pelirrojo encogiéndose de hombros - Por suerte para mi a Terence se le escaparon algunos comentarios estando conmigo. - Maldito Kennet - Y tenía fogonazos de recuerdos por las noches.
Charlie agarró mi barbilla y levantó mi mirada haciéndo que se centrara en él.
-Solo hay una cosa que no entiendo. - dijo haciéndome quedar con intriga - ¿Por qué?
Suspire profundamente y agarré las manos de Charlie.
-Por ti. - contesté - No quería ponerte en peligro. No he podido perdonarme lo que te ha pasado Charlie. -mis ojos empezaron a cristalizarse - Nunca seré capaz de hacerlo. - susurré.
Charlie envolvió mi cara entre sus suaves manos y me besó. Fue un beso cálido y dulce. Un beso de perdón.
Podía notar la sonrisa del pelirrojo entre cada beso. Una chispa se encendía cada vez que sus labios rozaban los míos.
-Yo nunca te olvidaré Roxane. - susurró en mi oído mientras sus dedos desfilaban por mi cuello.
