❝ Heterocromía. ❞ →【YM】OmegaVerse

O35

"Bueno, debería irme." Dijo el alfa levantándose del sofá y el omega asintió apretando sus labios.

"Hyung..." Le llamó y el alfa le dió toda su atención.

Y como no hacerlo si Park Jimin era la debilidad número uno de Yoongi.

"Mh..." El omega se acercó al mayor y le abrazó fuerte llevando sus labios a la mejilla del mayor y dando un pequeño beso en ella. "P-por favor, vaya con cuidado a casa." Dijo y el alfa sonrió grande.

Ah, Jimin le hacía latir tan rápido el corazón.

"Lo haré." Le respondió y acunó con sus manos la cintura del menor. "Y tú come bien, tapate y descansa mucho." Acercó su cara a la del menor y rozó sus narices dándole un beso esquimal.

Y Jimin no pudo evitar morderse el labio, porque esto era tan nuevo y lindo.

No sé acostumbraría jamás a un Yoongi siendo así de meloso con él.

El alfa llevó sus labios a los del menor y lo beso sintiendo la textura agrietada por el frío en ellos pero importandole poco si se trataba de Jimin. Abrió y cerró sus belfos rozandolos con los contrarios, capturando esos rechonchitos labios con los delgados suyos, chupandolos solo para luego tener esa imagen que se convirtió en su favorita desde hace horas atrás.

Park Jimin con los labios hinchados por mera culpa suya.

Era increíble de ver.

Sabía de lleno que era afortunado de tenerlo así, para él, con él.

"¿P-puedo estar con usted en llamada hasta que llegue a casa?." Preguntó el omega y Yoongi no pudo evitar soltar una sonrisa grande para luego morderse el labio.

Era un caso.

Uno que lo hacía tan feliz con solo unas palabras.

"¿Te preocupas por mí?." Preguntó burlón y el omega hizo un pequeño puchero asintiendo despacito.

No había momento en el que no se preocupara por el.

"¡Hyung!." Grito el pequeño niño de cabellos marrones mientras se acercaba corriendo a el niño que yacia en el piso sentado. "Hyung, ¿Está bien?." Preguntó con sus ojitos brillantes y miro la rodilla lastimada del mayor. "S-su rodilla, usted, ¡No se mueva!."

El niño salió corriendo dejando a un pequeño Yoongi en el suelo soplando su rodilla dónde un raspón se veía claro y feo.

Si, a veces era un poco torpe.

No mucho después llegó nuevamente a su lado el niño de ojitos bicolor con un pequeño estuche el cual abrió y saco gasas, alcohol, banditas y cinta.

"L-le curare así no duela más hyung." Le dijo al mayor quien solo lo veía mientras comenzaba a poner alcohol en una gasa y la acercaba a su rodilla.

"Auch auch auch" se quejo el pálido y el menor hizo un puchero alejando su mano de inmediato.

"S-se que duele, pero mami dice que si no se trata se pondrá peor luego." Le dijo al mayor y con cuidado volvió a acercar su mano a la rodilla ajena mientras soplaba.

De lejos una omega los veía con cuidado sonriendo al ver la tierna imagen de su hijo preocupado por su amigo, sabiendo que la preocupación era mutua, pues nunca había visto una amistad tan linda y pura como la de su hijo con ese niño de tez pálida.

"Siempre me preocupo por usted." Le respondió bajito el omega y despegó sus manos del cuello del mayor. "Por favor, hasta que llegue a casa."

"Jimin, yo contigo quiero hablar toda mí vida." Le dijo el alfa mirándolo con ojos suaves y le sonrió chiquito dejando un beso en su nariz. "Hablar, pelear, cuidarte, mimarte." Dejó otro pequeño beso en sus labios y volvió a verlo. "Esperé tanto para poder decir eso de la forma que quiero que lo interpretes."