O25

12.6K 1.9K 947
                                    

Habian pasado ya dos semanas desde la última vez que habían hablado. Los cruces en la universidad habian sido inevitables solo con simples saludos secos y miradas desviadas. Mientras Jimin había pospuesto su visita al oculista teniendo en cuenta que cuando fuera, le dirían algo malo.

Lo bueno nunca dura mucho.

Suspiró y se movió incómodo en la silla de la sala de espera, no queria entrar, ya se levantaba y se iba a au casa.

"Park Jimin." Dijo la secretaria del doctor y el omega la miró apretando los labios. Se levantó de su lugar y entró al consultorio.

"Buenos días." Dijo el rubio y el omega tras el escritorio le sonrió indicandole que se sentara.

"Buenos días, Jimin." Dijo y puso alcohol en sus manos frotandolas juntas. "Dime, ¿Por que vienes a darme esta visita?." Preguntó el omega y miro al menor. "Tienes unos hermosos ojos, si te soy sincero, hasta tengo envidia."

Jimin se sonrojo, y agachó su mirada avergonzado.

Nunca le habian dicho eso.

A excepto de él, claro.

"Vine porque uso lentes de contacto y, últimamente sentí muy irritados mis ojos." Dijo el omega menor y el doctor asintió levantándose de su lugar.

"Ven sientate frente a la maquina y pon tu barbilla bien afirmada ahí, mira por el lente." Dijo señalandole un aparato grande y Jimin lo hizo, mientras el doctor iba del otro lado y miraba por el otro lente. "Bueno, me dijiste que usabas lentillas ¿verdad? ¿Te enseñaron como usarlas correctamente?."

El omega asintió y vio al hombre volver a irse tras su escritorio, sentandose en su silla giratoria.

"Si, me dijeron que usara unas gotas y mantuviera siempre humedas las lentillas, que no dejara que se secaran." Respondió el omega y el hombre asintió. 

"Jimin, tienes un raspón en la cornea derecha, esto podira afectar parcialmente tu visión si no lo tratamos a tiempo y como se debe. Al parecer, tus ojos están rechazando el contacto con el hule, por eso sientes tanto malestar." Dijo el hombre y Jimin apretó los labios.

Era obvio, ya lo habia visto venir.

El omega asintió y agachó su cabeza mientras jugaba con el borde de su camisa.

"Debo dejar de usar las lentillas... ¿no es asi?."

[~♡~]

"Amor, ¿Que te dijeron? ¿Todo esta bien?." Dijo la omega que estaba sentada en el sofa con su marido y Jimin ni los miró, solo siguió de largo hacia su habitación.

Su madre muerta en la necesidad de saber que pasaba amagó en levantarse e ir tras su hijo menor pero el alfa a su lado se lo impidió y dejó un beso en su mejilla.

"Iré yo, quedate tranquila." Le dijo Jihyuk, su marido y la omega asintió mientras volvía a sentarse y observaba como el alfa iba escaleras arriba en busca de su hijo.

"Min Min." Dijo bajito su padre y tocó en la puerta dos veces antes de entrar, encontrando al omega hecho bolita en la cama mientras abrazaba su almohada. "¿Que ocurre campeon?." Dijo su padre acercandose a el y se sentó en la cama para luego acariciar su espalda. "¿Malas noticias?."

Jimin asintió con su cabeza y se escucho un pequeño sollozo de su garganta.

Le rompía el corazón a su padre escucharlo de esa manera, escuchar llorar al pequeño omega de su manada.

"¿Me cuentas?." El omega se sentó aún abrazando la almohada y secó las rebeldes lagrimas que habian escapado de sus ojos.

"Debo usar un parche... y no me permiten usar las lentillas, por lo menos no de la misma forma que lo hago, me dijeron que dos veces a la semana era suficiente hasta que mis ojos se acostumbraban." Hipo un poco y miro a su padre con los ojos vidriados. "Papá, no quiero que me vean sin lentillas." Dijo el omega y agachó su cabeza, dejando caer más lágrimas. "El parche va ayudarme unas dos semanas, quizas menos, pero luego..."

❝ Heterocromía. ❞ →【YM】OmegaVerseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora