XLIII. "Se acabó"

9.7K 1K 467
                                    

Cuando bajé de mi auto no vi a Lisa en ninguna parte e inmediatamente se me hizo extraño ya que siempre acostumbraba a llegar primera durante nuestras citas improvisadas.

Caminé por el parque y me detuve en la banca que siempre nos sentábamos a conversar, besarnos o simplemente abrazarnos mientras veíamos a los perros que venían a jugar junto a sus dueños.

—Hey.

Escuché su voz tras de mí y me volteé rápidamente para besarla y decirle lo mucho que la había extrañado durante estas horas. Pero su serio rostro y mi no correspondido beso me hicieron retroceder dos pasos de ella.

—Lili... —traté de buscar su mirada pero la desvió—. ¿Estás bien?

—No realmente —respondió de manera seca y brusca mientras llevaba sus manos a los bolsillo de su chaqueta. Me sorprendí ya que ella no solía hablarme así, ni si quiera cuando estaba molesta.

—Bebé, ¿qué pasa?

Intenté rodearla con mis brazos, ella accedió al principio pero a los segundos tomó mis brazos con delicadeza y los apartó de sus hombros.

¿Auch?

—Jen... —soltó mis brazos y volvió a esconder sus manos en su chaqueta. Inclinó su cabeza hacia un costado y tensó fuertemente su mandíbula antes de susurrar un doloroso—. No creo que esto esté funcionado.

—¿Qué no está funcionado? —dije tonta y torpemente.

—Nosotras —nos señaló con sus ojos.

Sentí como si me estuviese cayendo por un enorme precipicio sin fondo.

—¿Qué?

Traté de sonar y verme calmada pero su estúpido rostro sin ninguna emoción o remordimiento de lo que había dicho me estaba comenzando a poner nerviosa.

—No creo que seamos compatibles.

Rodé los ojos. Aquello era lo más estúpido que Lisa había dicho en su vida y eso que la chica habla tantas idioteces que no sabía cuando estaba siendo seria y cuando no.

—¿Es una broma? —reí sin gracia alzando ambas de mis cejas— ¿Es una broma? —repetí atrapando su fría mirada.

—No, es en serio.

Quería seguir estando tranquila y poder controlar el nido de emociones que se removiá en mi pecho pero fue imposible.

—¿De dónde viene esto? —hice sonar la lengua en mi paladar e inconscientemente llevé una de mis manos a mi cintura— Ayer estábamos perfectamente, hasta bromeamos sobre la nueva novia de Sana.

Bajó su mirada hasta sus balenciaga y murmuró antes de mirarme.

—Lo vengo pensando hace un tiempo...

—Lisa, detente —suspiré—. ¿Cuál es la real razón de todo esto? No estás siendo clara.

—Se acabó.

Me clavó sus almendrados ojos sin ninguna expresión en ellos.

—¿Q-Qué mierda? —por un momento creí que estaba bromeando— ¿N-No puedo opinar sobre esto? —hasta creí que me estaba mintiendo pero su mirada no tenía ninguna jodida expresión y no podía descifrar absolutamente nada de ella.

Sentí el llanto acumularse en mi garganta y mis ojos comenzaron a arder. Estaba en un punto donde no sabía si reír o llorar por lo estúpida que me veía.

—Jen... —cerró sus ojos y dejó salir un pesado suspiro—. Jennie, para mí también es difícil —apretó sus labios luego de decir aquello sin mirar mis ojos.

DAISIES | Jenlisa [BORRADOR] Where stories live. Discover now