Lista de reproducción para el apocalipsis [The Umbrella Academy]

Pista 1: "If the world was ending"

"Estaba distraído y en el tráfico

no lo sentí cuando ocurrió el terremoto

pero realmente me hizo pensar, ¿estabas bebiendo?

¿estabas en la sala de estar, relajándote, mirando televisión?"

Dentro de ocho días se acababa el mundo.

Por supuesto, en ese momento nadie lo sabía. El único que lo hacía todavía no había aparecido en escena. De hecho, ni siquiera se había reencontrado con sus hermanos. Sin embargo, el fin del mundo venía lenta e inexorablemente.

Amber Grey se enteraría de ello varias horas más tarde cuando un niño de trece años apareciera en su habitación mandando todos planes a la basura. El apocalipsis tiende a hacer eso. En ese instante, ella consideraría siempre ese momento como un punto de inflexión en su vida; una conversación que sería aquel instante en que ella podría mirar hacia atrás y pensar que su vida había sido un "antes" y lo que vendría ahora era un "después".

Excepto que, realmente, ese no fue el punto de inflexión de la historia. Quizás sí de la suya, pero como la suya dependía de la de la familia Harveegres y la del mundo en general, no se lo podía considerar como tal.

Cuando uno se imagina un punto de inflexión en la vida de una persona, generalmente se imagina dolor, drama, sufrimientos, traición, errores lamentables y batallas horribles. O tal vez se imagina a un extraño solitario caminando por un sendero en el bosque que se encuentra con una bifurcación en el camino y debe elegir una dirección.

Ahora bien, la última analogía está equivocada porque los puntos de inflexión, por norma general, no ofrecen una opción. Solo ocurren y nadie los quiere. Porque un punto de inflexión significa cambio y a nadie le gusta el cambio. Ni siquiera a los que creen que sí. Porque el cambio siempre da miedo y a nadie le gusta el miedo.

Amber Grey no era la excepción.

Pero, en el momento en que se encontró al niño de trece años con ojos viejos sentado en la cama de su cuarto, tampoco tuvo mucho tiempo para pensar qué había provocado que su vida cambiara a partir de ahí. Ella no sabía que podría haber sido cuando ese mismo niño decidió probar el viaje en el tiempo cuando verdaderamente tenía trece años. O cuando él decidió aceptar a trabajar como asesino con una agencia que manipulaba el tiempo conforme les viniera mejor. Tampoco sabía que ese niño había sido uno de los cuarenta y cinco que habían nacido el mismo día de una mujer que no había estado embarazada hasta el momento de dar a luz. Aunque de eso último se enteraría más tarde, a Amber siempre le interesó ese suceso.

Sin embargo, eso no pasaría hasta un poco después. Por ahora, hay que situar un punto de inflexión en la historia de Amber Grey y los hermanos Hargreeves; y como hay que elegir un momento que ella viviera, decidiremos en el que Amber se enteró que Reginald Hargreeves había muerto. Eso pasó casi al comienzo del día, horas antes de que el niño apareciera en la habitación de ella y es un punto de inflexión tan bueno como cualquier otro.

Cuando Amber se enteró, ella estaba desayunando con su adorado hermano adoptivo tortitas con nata y frambuesa. Entonces Liz, la novia de su hermano, entró en su casa, de la que Amber no sabía siquiera que tenía llaves, y después de un breve beso a Will en los labios, soltó la noticia.

-Reginald Hargreeves ha muerto esta noche -dijo, y arrojó el periódico doblado por la mitad con la cara del hombre en primera plana sobre la mesa del desayuno, como si ese efecto dramático fuera necesario.